|
General: Theresa Bond ,Más de Falsimedia
Elegir otro panel de mensajes |
|
De: matilda (Mensaje original) |
Enviado: 02/01/2006 02:20 |
Bond y la Asistencia a una Cuba Libre
inSurGente (Antonio Maira).- El miércoles 14 de diciembre el diario El País publicó un artículo titulado “Nuestros lectores en la Habana”, que firmaba una tal Theresa Bond, seudónimo de “alguien que escribe desde Cuba para publicaciones como el Foreing Affairs”, según afirma Carlos Manuel Estefanía, director de Cuba Nuestra, un feroz panfleto anticastrista que editan los exiliados cubanos en Suecia. El País, uno de los medios de comunicación del grupo PRISA, notorio representante del sector “progresista” de la Falsimedia española, publica un artículo de encargo, firmado con un seudónimo, evidentemente planificado en el ámbito del Departamento de Estado, diseñado en grueso y tal vez en fino en el entorno de Caleb McCarry y del representante del Imperio en la Oficina de Intereses de los EEUU en La Habana. La conclusión es obvia: El País funciona dentro de una red desinformativa y de propaganda dirigida por el Departamento de Estado del gobierno de los EEUU. El texto del artículo –un verdadero libelo mentiroso y contradictorio, y por eso último muy clarificador- se refiere a la situación de los “disidentes” encarcelados en Cuba y en relación con ellos al “papel liberador” de las llamadas bibliotecas independientes (1) . El tal Carlos Manuel Estefanía se jacta de haber conseguido la publicación del artículo que reproduce El País hace dos semanas, en el suplemento cultural del periódico Dagens Nyheter -“uno de los más importantes de Suecia”- en fecha tan temprana como el lunes primero de agosto con el sugestivo título de "Bakom gallret blomstrar det fria ordet" (Tras la rejas florece la palabra libre). La descarada jactancia de ser los inductores de la publicación del texto encabeza un editorial en el que el día 7 del mismo mes de agosto Cuba Nuestra reproducía casi textualmente el texto de Bond en forma de comentario del director del libelo, titulado esta vez: ¿Bibliotecas independientes en las cárceles de Cuba? Una semana antes de la aparición en El País, el artículo -ya muy baqueteado como hemos visto- se publica en Le Monde, que le transfiere el testigo al periódico independiente de Polanco. Dagens Nyheter, Cuba Nuestra, Le Monde, El País, en un periodo de cuatro meses y medio. Después de esos primeros avatares, el texto -originalmente escrito en inglés, según parece- irá rebotando de tribuna libre en tribuna libre haciendo camino a la infamia. El origen del panfletario artículo -que publica como original el órgano más cualificado de Falsimedia en España- viene claramente señalado en el texto citado de Carlos Manuel Estefanía: âDespués de España, probablemente sea Suecia el país europeo que mayor cobertura de prensa le da al movimiento democrático en Cuba, una situación que no poco debe al activismo de una parte de la inmigración cubana en este paísâ. Dada la poderosa iniciativa que los EEUU conceden a la âdisidenciaâ cubana en el âproceso de transiciónâ(2) es evidente que estamos ante un artículo diseñado y distribuido por el Departamento de Estado, de la misma manera que el Pentágono ha fabricado textos que después ha colocado âcon nombres de autores inventados o seudónimos- en la âprensa libreâ iraquí, según se ha denunciado y demostrado en las últimas semanas. Con la NED nos hemos topado, con la Nacional Endowment for Democracy o, lo que es peor, con el trabajo sistemático del Coordinador para la Transición a una Cuba Libre, Caleb McCarry, nombrado por la Secretaria de Estado de los Estados Unidos. El asunto es mucho más escandaloso en el caso de El País que en el cado de los medios de comunicación iraquíes, ya que la Falsimedia en el país árabe es un aparato de publicidad creado por los sucesivos virreyes y embajadores de Washington en Bagdad, y el periódico español es uno de los símbolos de la independencia y libertad de prensa aceptados y divulgados como tales por el conglomerado mediático que responde al llamado “consenso de Washington”. De modo que, recapitulemos: -El País, uno de los medios de comunicación del grupo PRISA, notorio representante del sector “progresista” de la Falsimedia española, publica un artículo de encargo, firmado con un seudónimo, evidentemente planificado en el ámbito del Departamento de Estado, diseñado en grueso y tal vez en fino en el entorno de Caleb McCarry y del representante del Imperio en la Oficina de Intereses de los EEUU en La Habana. -Dentro de ese entorno dirigido por el Comité para la Transición a una Cuba Libre, los elementos dinamizadores –“grupos de tarea”- son las organizaciones del exilio cubano más reaccionario. Tales elementos se encargan de señalar obligaciones a los medios de comunicación –Falsimedia- que se han integrado dentro de la red que colabora en las tareas propagandísticas del “proyecto Cuba” del Consejo de Seguridad Nacional, el Departamento de Estado y el Pentágono. -El artículo –probablemente no es el primero- inicia su periplo en Suecia cuatro meses antes, el día 1 de agosto, y es republicado en Le Monde en la primera quincena de diciembre, una semana antes de que se distribuya desde El País para la opinión pública española. Inmediatamente después de la primera publicación, uno de los panfletos menos presentables del exilio cubano, Cuba Nuestra, afirma que el circuito que inicia “Falsimedia Bond” en Suecia está organizado por el exilio cubano más activo que sitúa en ese país y en España. El mismo panfleto proporciona datos muy concretos sobre “la empresa” para la que trabaja la autora o el autor del artículo distribuido, y sobre los canales de distribución. -Las fechas tan separadas de publicación apuntan a la organización de los medios en una estructura funcional más rígida que la anterior, menos basada en la emulación voluntaria entre los enemigos de Cuba y más con la tarea concreta de “asistir a Cuba” que ha planificado el Departamento de Estado. Se trata pues de una verdadera red de difusión de artículos que no pierden “la frescura” con el paso del tiempo. En realidad se fabrican siguiendo una estrategia desinformativa y de propaganda, y después se colocan escalonada o simultáneamente en los medios, según se trate de crear poco a poco una “matriz de opinión” o de buscar un efecto de choque sobre coyunturas más concretas. La conclusión de todo esto es muy clara y, sobre todo, muy precisa: El País funciona dentro de una red desinformativa y de propaganda dirigida por el Departamento de Estado del gobierno de los EEUU. Notas:
(1). Para un análisis pormenorizado de las “bibliotecas independientes” puede leerse el magnífico artículo publicado por Rebelión: http://www.rebelion.org/medios/040111uni.htmPara leer el artículo “nuestros lectores en la habana”: http://www.camagueyanos.com/wwwboard/messages/45940.html(2). El deseado por los EEUU proceso de transición está totalmente diseñado, tanto en lo que se refiere a los instrumentos que se utilizarán âse detallan los que sólo violan el derecho internacional, y se mencionan con alusiones muy claras los que además constituyen actos claros de terrorismo- como a los resultados que cumplirán el proceso, dos enormes documentos. Uno de ellos es una ley del Congreso de los EEUU âla Helms Burton-, que como hizo en menor grado la Enmienda Platt a principios del siglo XX define la estructura económica, social y política de Cuba, y los procedimientos para establecerla y controlarla que utilizará el gobierno norteamericano. El otro es el Informe del Comité para la Transición a una Cuba Libre. La existencia de una ley de los EEUU y de un documento operativo, y el nombramiento por Washington del llamado Coordinador para la Transición son hechos ponen en evidencia varias cosas: la llamada âtransiciónâ en Cuba es una decisión de los EEUU; el objetivo de la transición, su resultado en cuanto a la estructura económica, social y política de Cuba, es también una decisión de Washington; y, finalmente, que no existe ninguna organización en la isla a la que el gobierno norteamericano conceda el más mínimo protagonismo en esta determinación externa del futuro de la isla. |
|
|
Primer
Anterior
2 a 6 de 6
Siguiente
Último
|
|
De: SadCHARLOTE |
Enviado: 02/01/2006 06:43 |
Aquí les traigo el articulo publicado en el periódico El País que ha cagado de miedo a toda esa gentucha Nuestros lectores en La Habana THERESA BOND EL PAÍS - Opinión - 14-12-2005 Primo Levi lleva casi tres años entre rejas en Cuba, y ha permanecido durante meses enteros en varias cárceles. Después de la represión enérgica contra los disidentes en marzo de 2003, Günter Grass fue enviado a la prisión de Boniato a animar a Manuel Vázquez Portal, un poeta cubano condenado a 18 años. Es obvio que la frágil y valiente esposa de Manuel, Yolanda, prefiere a los europeos del Este: realizó con Ryszard Kapuscinski, Milan Kundera y Josef Skvorecky el trayecto de 980 kilómetros desde su casa hasta la cárcel. Y El tambor de hojalata llegó junto con una goma de borrar y un pedazo de jabón, ya que las ratas se habían comido las provisiones de Manuel. La más viajada probablemente sea Aung San Suu Kyi, líder birmana pro democracia. Cruzó la isla desde la penitenciaría de Santiago de Cuba hasta la prisión de Pinar del Río con Normando Hernández, que se había declarado en huelga de hambre y fue trasladado como castigo. Cuando Fidel Castro ordenó el encarcelamiento de 75 de los disidentes más activos con condenas de hasta 28 años, asestó un duro golpe al movimiento de la oposición. Pero no hay mal que por bien no venga. Por un lado, las mujeres de los "75" descubrieron una resistencia interna que jamás habían sospechado, muy similar a la de las madres argentinas cuando exigieron información sobre sus desaparecidos en los años setenta. Por otro, la mayoría de estos presos políticos están empleando su tiempo "libre" para instruirse en historia, ciencias políticas y poesía, aprender idiomas y estudiar manuales médicos. Estos internos recientes son la flor y nata indiscutible del movimiento disidente. Antes de su detención, eran periodistas independientes, activistas sindicales, economistas, médicos o bibliotecarios con un apetito lector superior a la media. Alfredo Felipe Fuentes es un periodista independiente y bibliotecario que solía compartir con el vecindario su impresionante colección de volúmenes sobre los derechos civiles. (Su acusación nos informa de que "la literatura noble se mezclaba con libros de evidente inclinación por la desobediencia civil, que incitan y promueven el cambio del sistema social y de Gobierno"). Y la lista de sus obras confiscadas menciona 50 títulos sobre derechos humanos como La protección internacional de los derechos de la mujer y Teoría de la justicia y derechos humanos, además de 51 copias de la Declaración universal de los derechos humanos. ¡Material incriminatorio, ya lo creo! No es de extrañar que la petición de 15 años de la acusación se incrementara a 26. Durante los dos últimos años, Alfredo ha estado desprovisto de sus derechos humanos y de sus libros sobre los mismos, pero tiene en su celda una biografía de Gandhi, Los miserables, de Víctor Hugo; El poder de los sin poder, de Václav Havel, y La segunda revolución, de Adam Michnik. Los ex disidentes Michnik y Havel comparten la inusual distinción de haber escrito misivas desde prisión que los internos cubanos ahora saborean entre rejas. Cartas desde la prisión, de Michnik, y Cartas a Olga, de Havel, figuran entre las lecturas penitenciarias más populares. Réquiem, de Anna Ajmatova, parece dirigido a las esposas; la gran dama de la poesía rusa escribe desde el Leningrado de 1940 sobre el permanecer frente a la puerta de la cárcel, una actividad conocida para bastantes mujeres de La Habana en 2005. Manuel Vázquez comentaba en una ocasión que gracias a las entregas de Yolanda, su solitaria celda parecía una versión en pequeño de la Feria del Libro de Francfort. Sus libros circulaban entre los prisioneros políticos y los internos comunes, e incluso por el corredor de la muerte. Manuel no podía creer que todas aquellas delicias lograran pasar el escrutinio de la censura carcelaria. Quizá la explicación sea que si los guardias fueran lo bastante refinados como para interpretar poemas de Ajmatova y distinguir entre Karl Marx y Karl Popper, ellos también serían líderes de movimientos disidentes y no empleados del sistema de seguridad del Estado. La supervivencia física es el principal reto en las penitenciarías cubanas, de modo que clásicos del gulag de la era soviética como Un día en la vida de Iván Denisovich, de Alexander Solzhenitsyn, o Mi testimonio, de Anatoly Marchenko, se consideran manuales prácticos, aunque la relevancia de los consejos para resistir el frío siberiano es dudosa. Muchos detenidos tienen un acceso muy limitado a los libros. En su visita trimestral, la familia de Adolfo Fernández Sainz, traductor estatal en congresos internacionales que más tarde se convirtió en periodista independiente, debe incluir el peso de los libros en los 13,5 kilos de comida autorizados, Su esposa prefiere que Adolfo coma en lugar de leer, así que los frijoles negros entran, pero Shakespeare se queda fuera. Berta Soler desafía a los guardias y lleva a su marido, Ángel Moya, otro prisionero político del grupo de los 75, biografías de Martin Luther King Jr. y del mulato Antonio Maceo, héroe cubano de la independencia del siglo XIX. Y cuando Moya necesitó una operación de espalda pero fue retenido en prisión, Soler organizó una sentada frente a la oficina de Fidel Castro en la Plaza de la Revolución de La Habana. Dos días después, Moya se encontraba en el pabellón de cirugía. La noticia sobre esta desobediencia civil sin precedentes se difundió de boca en boca. Pronto, a la esposa de otro detenido se le acercó una prostituta de La Habana con un walkman: "Dale esto a la negra que se plantó en la Plaza, es pa' su macho". Los walkman no están permitidos en las celdas, así que la esposa sugirió libros en su lugar. "Ay, mamita, de eso sí que no tengo", respondió la trabajadora sexual, "pero le compro algunos". Unos días después, apareció con obras de E. A. Poe, un Arsenio Lupin, de Maurice Leblanc, y una biografía de Vincent Van Gogh. Lo que más tarde acabaría convirtiéndose en una biblioteca itinerante para estos internos consistía al principio en las sobras de las colecciones de los acusados. Luego, una de las esposas empezó a comprar libros en la zona. Hay tres formas de adquirir libros -o cualquier otra cosa- en Cuba: en divisa local, pero las opciones quedan limitadas a literatura propagandística, excepto un Dostoievsky o un Balzac aquí y allá; en tiendas del Estado que sólo aceptan moneda extranjera, pero cuya oferta apenas va más allá de las novelas de suspense en otras lenguas para que las disfruten los turistas de vacaciones con sol y playa, que no es precisamente lo que prima en el paisaje penitenciario; y en puestos de libros privados, que están permitidos en la parte histórica de la capital para dar un aire popular al entorno, y en los que los géneros y los precios se adaptan a los extranjeros: la mayoría son obras por y sobre Castro y Che Guevara. Más tarde, amigos en el extranjero establecieron una lista de lectura principal y empezaron a enviar manuales, diccionarios, enciclopedias, biografías y novelas históricas, con lo cual la colección llegaba a unos 400 títulos. Al principio, las esposas pedían "libros grandes", ya que parecía que sólo se autorizaba uno por visita; las extensas "obras completas" publicadas en papel fino hacían furor. Luego el peso se convirtió en un problema, así que los ligeros libros de bolsillo eran más codiciados que las ediciones en tapa dura. El escoger títulos para su lectura en la celda es delicado; no valen El Conde de Montecristo o Robinson Crusoe, aunque Berta Soler -por ingenuidad o pura valentía- llevó a Moya un clásico del género: Papillón, de Henri Charrière. Tampoco nada demasiado gráfico, como El amante de Lady Chatterley o Trópico de Cáncer. Ni el Marqués de Sade, por favor, aquel otro preso distante de La Bastilla. Pocos intelectuales son indiferentes al castrismo, así que los escritores o bien se oponen a su dictadura y sus obras no llegan detrás de los barrotes (Mario Vargas Llosa, Octavio Paz, Susan Sontag, Hans Magnus Enzensberger y otros por el estilo), o bien son apologistas incondicionales (encabezados, lamentablemente, por Gabriel García Márquez) y es mejor no irritar más a los prisioneros evocándolos. Por supuesto, los escritores cubanos exiliados están prohibidos -cuanto más importantes, peor-, así que nada de Reinaldo Arenas o Guillermo Cabrera Infante. Cuando se conoció la existencia de la biblioteca itinerante para los internos, hubo donaciones de libros por parte de cubanos que no se atrevían a alzarse, pero que querían mostrar solidaridad con quienes sí lo hacían. Uno de esos partidarios afirmaba al entregar algunos volúmenes: "Puede que yo sea un cobarde, pero que después no digan que Roberto no ayudó a los disidentes". "Después" está en muchas mentes de la isla, en la que todo el mundo espera discretamente la muerte de Fidel, también conocida como el "hecho biológico". Sin embargo, toda una generación de disidentes que podría haber ayudado a preparar a la sociedad cubana para la era pos-Castro sigue inactiva, leyendo libros. Tal vez haya esperanza en el pragmático espíritu emprendedor del pueblo: cuando se le pidió que donara obras para la biblioteca itinerante de los presos, un librero particular de la Plaza de Armas, en la Vieja Habana, que ofrece servicios tanto a turistas como a exiliados cubanos de Miami, aceptó, pero a cambio pidió autógrafos de los presos políticos. ¿A lo mejor el pago inicial para una Cuba libre? |
|
|
|
De: 02ManuelA |
Enviado: 02/01/2006 11:02 |
http://amediavoz.com/ajmatova.htm#HAY%20EN%20LA%20INTIMIDAD... DEDICATORIA
Las montañas se doblan ante tamaña pena y el gigantesco río queda inerte. Pero fuertes cerrojos tiene la condena, detrás de ellos sólo "mazmorras de la trena" y una melancolía que es la muerte.
Para quién sopla la brisa ligera, para quién es el deleite del ocaso - Nosotras no sabemos, las mismas por doquiera, sólo oímos el odioso chirriar de llaves carceleras y del soldado el pesado paso.
Nos levantamos como para la misa de madrugada, caminábamos por la ciudad incierta, para encontrar una a la otra, muerta, inanimada, bajo el sol o la niebla del Neva más cerrada, mas la esperanza a lo lejos canta cierta...
La sentencia... y las lágrimas brotan de repente, ya de todo separada, como arrancan la vida al corazón, dolorosamente, como si hacia atrás la derribaran brutalmente, pero marcha... vacila... aislada...
¿Dónde están ahora aquellas compañeras del azar, de mis años de infierno desnudo? ¿En la borrasca siberiana cuál es su soñar, qué imaginan en el círculo lunar? A vosotras os envío mi adiós y mi saludo .............................................................................................. LA TIERRA NATAL
No la llevamos en oscuros amuletos, ni escribimos arrebatados suspiros sobre ella, no perturba nuestro amargo sueño, ni nos parece el paraíso prometido. En nuestra alma no la convertimos en objeto que se compra o se vende. Por ella, enfermos, indigentes, errantes ni siquiera la recordamos.
Sí, para nosotros es tierra en los zapatos. Sí, para nosotros es piedra entre los dientes. Y molemos, arrancamos, aplastamos esa tierra que con nada se mezcla. Pero en ella yacemos y somos ella, y por eso, dichosos, la llamamos nuestra.
Versión de María Fernanda Palacio |
|
|
|
De: 02ManuelA |
Enviado: 02/01/2006 15:21 |
PRÓLOGO Eso sucedió cuando sólo sonreía el muerto, contento de su paz y como un apéndice inútil, Leningrado pendía de sus cárceles cuando, locos de dolor, caminaban en tropel los condenados, y los silbidos de las locomotoras cantaban cortas canciones de despedida. Las estrellas de la muerte se erguían sobre nosotros y la inocente Rusia se retorcía bajo unas botas manchadas de sangre y bajo las ruedas de los negros furgones (3) 1 Te llevaron al alba (4), y fui tras ti como en un entierro. En el ático oscuro lloraban los niños, y ante la imagen sagrada se derretía la vela. En tus labios estaba el frío del ícono y un sudor mortal en tus cejas. ¡No lo olvidaré! Como las viudas de los Streltsy (5) aullaré bajo las torres del Kremlin. 2 Apaciblemente fluye el Don apacible (6) la luna amarilla entra en casa. Entra con un gorro ladeado, la luna amarilla ve una sombra. Esta mujer está enferma, esta mujer está sola. Su marido está en la tumba, su hijo, en la cárcel. Rogad por mí. 3 No, no soy yo, sino otra quien sufre. No podría soportarlo. Que un velo negro cubra lo sucedido, y que se lleven las linternas⦠Noche. 4 ¡Si te hubieran mostrado a ti, la bromista, adorada por todos tus amigos, la alegre pecadora de Zárskoe Seló, lo que sucedería con tu vida! Cómo, entre trescientas mujeres, con un paquete, harías cola bajo Las Cruces (7), y cómo con tus ardientes lágrimas, fundirías el hielo de Año Nuevo. Allí silenciosamente los presos Se abalanzan y cuántas vidas inocentes se consumen... 5 Diecisiete meses hace que grito. Te llamo a casa, me arrojé a los pies del verdugo, hijo mío, horror mío. Todo se ha enturbiado para siempre y no puedo distinguir ahora quién es el animal, quién la persona, cuánto tiempo queda para la ejecución. Y sólo hay flores cubiertas de polvo y el tintineo del incienso, y huellas desde algún lugar a ninguna parte. y me mira fijamente a los ojos y me amenaza con una muerte cercana una inmensa estrella (8). 6 Pasan pronto las semanas. Lo que sucedió, no lo comprendo. Cómo a ti, hijo, te contemplaron Las noches blancas (9) en la cárcel y cómo de nuevo te contemplan con su ardiente ojo de gavilán. Y de tu alta cruz, y de tu muerte, hablan. 7 LA SENTENCIA Y cayó la palabra de piedra sobre mi pecho todavía vivo. No importa. Estaba preparada. De alguna manera me las apañaré. Hoy tengo que hacer muchas cosas: Hay que matar la memoria, hay que petrificar el alma, hay que aprender de nuevo a vivir. Si no... El caluroso susurro del verano celebra su fiesta en mi ventana. Hace tiempo que presentía este día luminoso y la casa vacía. 22 de Junio de 1939 (10) Casa de Fontanka 8 A LA MUERTE Si has de venir ¿por qué no ahora? Te espero. Me siento muy mal. He apagado la luz y te he abierto la puerta a ti, tan sencilla y asombrosa. Toma para esto cualquier forma, irrumpe como granada arrojada, o furtivamente, con una pesa, como un bandido experto. O envenéname con el tufo del tifus. O con un cuento inventado por ti, conocido por todos hasta la náusea, Para que yo vea la punta del gorro azul (11) y al portero, pálido de terror. Todo me da igual ahora. Humea el Yenisei (12) y resplandece la estrella polar, y el último horror vela el brillo añil de los ojos amados. 19 de Agosto de 1939 Casa de Fontanka 9 Ya la locura cubre con su ala la mitad de mi alma, y le ofrece su vino de fuego, y la imanta hacia el negro valle. He comprendido que debo cederle a ella la victoria oyendo mi propio delirio como si fuera ajeno. Y no me dejará ella llevar nada conmigo por mucho que la suplique o fatigue con mi plegaria: Ni los terribles ojos de mi hijo, petrificados por el dolor, ni el día en que llegó la tormenta, ni la hora de la visita en la cárcel, ni la suave frescura de sus manos, ni la sombra temblorosa de los tilos, ni el lejano y ligero sonido de las últimas palabras de consuelo. 4 de Mayo de 1940 Casa de Fontanka 10 CRUCIFIXIÓN No llores por mí, Madre. Estoy en el sepulcro (13) 1 Un coro de ángeles glorificó esta hora grandiosa. Y los cielos se fundieron en el fuego. Al Padre dijo " ¿Por qué me has abandonado?" Y a la Madre. "No llores por mí". 2 Magdalena palpitaba y sollozaba. El amado discípulo se petrificaba, pero allí donde en silencio la Madre estaba nadie osaba mirar. (3) negros furgones. Alusión a los vehículos de la policía política soviética. (4) Te llevaron al alba. Este poema se refiere al arresto del historiador de arte Nikolai Punin, con quien vivía Ajmátova en 1935. (5) los Streltsy. Cuerpo militar de elite instituido por Iván el Terrible En 1698 se amotinaron frente al zar Pedro el Grande, quien consiguió aplastar la rebelión. Casi todos los Streltsy fueron torturados y ejecutado "a pesar de las súplicas de clemencia de sus esposas ante las torres del Kremlin. Este incidente es el tema de un cuadro famoso de Vasily Suríkov, "La mañana de la ejecución de los Streltsy". (6) el Don apacible. Ajmátova utiliza el río Don como símbolo del sufrimiento de toda Rusia. La cita de la famosa novela de Mijail Shólojov El Don apacible (1933-1935) es utilizada por Ajmátova como contraste entre la literatura soviética del realismo socialista y la realidad rusa. (7) Las Cruces Cárcel de Leningrado (San Petersburgo) donde llevaban a los presos políticos. Debe el nombre a su estructura en forma de cruz. (8) Una inmensa estrella. Alusión al pasaje de El idiota de Fiodor Dostoievski, en el que el protagonista, el príncipe Mishkin, ve "una inmensa estrella" al regresar a Rusia, que cae sobre una tercera parte de los ríos y de los manantiales causando una gran destrucción y pérdidas de vida. A su vez, el pasaje procedía del Libro de la Revelación (8.10-12), donde se menciona también el incienso, las bestias y la destrucción. Todos estos sucesos apocalípticos son recreados por Anna Ajmátova en este poema. (9) Las noches blancas. Alusión a las noches blancas de San Petersburgo, donde durante el solsticio de verano, en la noche del 23 al 24 de junio, no se pone el sol. Ajmátova alude también a la novela corta de Fiodor Dostoievski que lleva el mismo título. (10) 22 de Junio de 1939. Esta fecha corresponde al día en que el hijo de Ajmátova, Lev Gumiliov, fue sentenciado a un campo de trabajo. (11) gorro azul. Alusión al color del gorro de la policía política (12) Yenisei. Río de Siberia. A sus orillas se crearon numerosos campos de trabajo. (13) Epígrafe - Aparece en eslavo eclesiástico en el texto original. Estas líneas pertenecen al Noveno Canto Fúnebre del Viernes y Sábado de Santos de la Iglesia Ortodoxa Rusa. Ajmátova altera el texto original “No llores por mí, Madre, / mientras miras al sepulcro” para conseguir la identificación entre la cárcel y la tumba. | |
|
|
|
De: mfelix28 |
Enviado: 02/01/2006 19:40 |
Estoy esperando a que El Payo Libre me describa con todo lujo de detalles las enfermedades , peligrosísimas, que sufre Primo, Levi. De momento parece sano, aunque se suicidó en 1987. |
|
|
|
De: SadCHARLOTE |
Enviado: 02/01/2006 19:40 |
Ademas de Primo Levi no se dio cuenta que también están presos en la isla , circulando por las cárceles castristas Gandhi 1869 - 1948 Victor Hugo 1802 - 1885 Octavio Paz 1914-1998 Susan Sontag 1933-2004 Edgar Allan Poe1809-1849 Etc Etc Etc Pero no se le puede pedir peras al olmo!!
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 6 de 6
Siguiente
Último
|
|
|
|
©2025 - Gabitos - Todos los derechos reservados | |
|
|