El caos y la desesperación de las personas que desean obtener un pasaporte llegó a La Paz. Desde hace cuatro días, cientos de personas —incluso llegadas del interior— duermen en las puertas de la Dirección Nacional de Migración para iniciar su trámite y obtener el documento que les permitirá viajar al exterior. 

De acuerdo a información obtenida en Migración, cada día se entrega un promedio de 250 pasaportes. Esto, según algunos funcionarios, ha generado una sobredemanda, motivo por el que desde ayer el equipo de seguridad que resguarda las instalaciones anunció que sólo podrán iniciar su trámite 100 personas. Pero, según las personas que hacen fila, les informaron que hoy sólo atenderán a 60.

La Razón no logró una entrevista con la directora de Migración, Magali Zegarra, porque estaría prohibida de hacer declaraciones a la prensa sin autorización de la Ministra de Gobierno, señaló su secretaria personal.

Se conoció también que hoy, a las 10.00, la ministra de Gobierno, Alicia Muñoz, brindará explicaciones en una conferencia de prensa sobre lo que ocurre en esta repartición. De acuerdo a la gente apostada en Migración, cada día se reduce el número de personas que pueden acceder a un pasaporte, lo que ha generado caos y desorden. Algunos incluso denuncian que no se respetan las listas de las personas anotadas porque los que controlan estarían recibiendo coimas para dejar que otros inicien su trámite sin haber hecho colas ni dormido en el lugar.

La desesperación de la gente y la protesta contra Migración ayer incluso se manifestó en un bloqueo de las calles Bueno y Camacho, en pleno centro paceño.

Omar, que prefirió no dar su apellido, que dijo ser chef profesional, egresado de la Escuela Hotelera, sostuvo que “el Gobierno no puede privarlos de obtener un pasaporte a quienes tienen el deseo de ir en busca de una fuente laboral”. Otra persona de la fila protestó porque, hasta hace una semana, entre los requisitos estaban fotocopias legalizadas de carnet de identidad y certificado de antecedentes —lo que les significó un costo económico—, y que ahora se decidió anularlos.

Entre otras de las protestas está el hecho de que se estaría dando preferencia a los becarios que viajarán a Venezuela, aspecto que también dejó de tener prioridad con la anulación de la resolución que pedía los certificados de antecedentes y del carnet.

Testimonios

“Nos reuniremos con mi esposo”
Magalí.
Madre de tres hijos

“Hace dos años se fue el papá de mis hijos, vamos a tratar de salir de Bolivia para reunirnos con él antes de que nos pidan visa como ya se anunció. Él tiene trabajo, dice que es muy duro estar ahí, pero hemos ahorrado para estar juntos en Navidad”.

“Dormimos desde hace tres días”
José.
Apoderado de dos niños

“Dormimos desde hace tres días en la calle, soportando el frío. Yo soy apoderado de los hijos de mi hermana que ya está en España hace un año. Ahora estamos haciendo el trámite para la niña de 6 años y el niño de 8, que ojalá puedan viajar pronto”.

“Somos un grupo de 15 jóvenes”
vicente.
De Cochabamba

“En Cochabamba no se puede sacar un pasaporte, somos un grupo de 15, la mayoría jóvenes, que llegamos a La Paz pensando que al ser sede de gobierno —y como no había mucha demanda— era posible tramitar el pasaporte, pero está muy caro quedarnos”.

“Tengo una beca para Venezuela”
noemí salinas.
Estudiante

“He sido beneficiada con un beca para estudiar medicina en Venezuela y necesito tener mi pasaporte en pocos días. Hay tanta gente que me da mucho miedo que se terminen y me vea perjudicada. Los de seguridad nos están dando prioridad en las filas”.