Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

LA CUBA DEL GRAN PAPIYO
¡ Feliz Cumpleaños albi !                                                                                           ¡ Feliz Cumpleaños SadCharlotte !
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 Conociendo Cuba 
 CANCION L..A 
 FIDEL CASTRO.. 
 Fotos de FIDEL 
 Los participantes más activos 
 PROCLAMA AL PUEBLO DE CUBA 
 
 
  Herramientas
 
General: Una pizca de honestidad: Cuba y el internet
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 8 en el tema 
De: matilda  (Mensaje original) Enviado: 27/02/2007 18:20

Cuba y el internet. Primera parte
Muros virtuales
por Amaury E. del Valle

Durante más de 40 años Estados Unidos ha torpedeado el desarrollo de Cuba con innumerables artimañas para impedir que alguna tecnología llegue a la Isla.



29 de noviembre de 2006

Herramientas

 Imprimir
 Enviar

Países
 Cuba

Temas
 Globalización económica, privatización de los servicios públicos
 Control de la América Latina

Ver segunda parte
Ver tercera parte
___________________________________________________

A finales de 1960, dos computadoras IBM 1401, compradas por Cuba a la Internacional Business Machine, la mundialmente conocida IBM, quedaron varadas para siempre en el puerto de Nueva York, mientras los portuarios se preguntaban qué hacer con aquellas inmensas cajas de “cerebros electrónicos”, como se les decía a estos armatostes, grandes como escaparates, que entonces eran el último grito de la tecnología.

Quizá sea el primer caso, mas no el único, que evidencia cómo las sucesivas administraciones de la Casa Blanca, con su política de bloqueo económico y comercial, han torpedeado por más de 40 años el desarrollo tecnológico de la Isla, algo que a veces a simple vista no se nota, pero que es una realidad cruda y constante. Cada byte que llega a nuestro territorio en un disco duro cuesta mucho más que su precio normal en el mercado, pues los equipos de cómputo se encarecen hasta en un 30 por ciento o más por encima de su valor, al no poderse adquirir directamente en su mayor mercado mundial, Estados Unidos, o tener que pagar grandes tarifas de transportación por comprarlos lejos. Incluso en ocasiones hay que abonar un plus extra por el temor del vendedor a las pérdidas que le ocasionaría que el Departamento del Tesoro, o el de Estado, descubriera que ha negociado con la Isla proscrita.

Son apenas un par de ejemplos. Hay muchos más.

Computadoras proscritas

El bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos obstaculiza seriamente nuestro acceso a las tecnologías de la información y las comunicaciones, pues desde el año 1962 Cuba tiene prohibido adquirir equipos de cómputo de cualquier compañía o subsidiaria estadounidense.

Según el informe que la delegación cubana presentara en la segunda fase de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información, que se efectuó en noviembre en Túnez, esta situación ha acarreado pérdidas millonarias en las actividades de telefonía básica e inalámbrica, sistemas de alarma, comercio electrónico y comunicaciones postales. Además, es un factor que limita la adquisición de nuevos conocimientos, no solo por académicos criollos, sino también por norteamericanos, pues los científicos y profesionales de ese país necesitan, todavía hoy, la autorización del Departamento del Tesoro para viajar a Cuba, algo que muchas veces es negado.

Resulta increíble que hasta la labor de ayuda humanitaria, destinada en muchas ocasiones a hospitales, escuelas y otros centros sociales, sea torpedeada. Así ha ocurrido más de una vez con la Caravana de Pastores por la Paz, organización religiosa norteamericana a la cual le han pretendido confiscar las computadoras donadas a nuestro país. La denuncia de Cuba ante la Cumbre Mundial especifica el caso de USA/Cuba-Infomed, organización no gubernamental radicada en California, que pretendía, como en otras ocasiones, donar 423 computadoras que serían instaladas en hospitales y policlínicos cubanos para apoyar la red de diagnóstico e informaciones médicas.

El 10 de abril de 2003 el Departamento de Comercio de Estados Unidos negó categóricamente una licencia de exportación a esta entidad para traer los equipos, que estaban destinados al Instituto de Nefrología y a la red nacional de atención a enfermedades renales, donde facilitarían un estudio epidemiológico para la prevención de enfermedades renales crónicas; al Cardiocentro del Hospital Pediátrico William Soler; a la red cardiopediátrica nacional y a la Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas.

Lo increíble es que el documento de la prohibición consigna: “Los Departamentos de Comercio, Estado y Defensa de los Estados Unidos han llegado a la conclusión de que esta exportación sería perjudicial a los intereses de política exterior de los Estados Unidos”. Estados Unidos, hipócritamente niega a trabajadores humanitarios donar tecnología a Cuba mientras entrega gratuitamente computadoras, impresoras, módems, celulares y cuanto artilugio novedoso hay para fomentar la contrarrevolución interna.

Guajiros sin E-commerce

Los guajiros de Oriente hace rato saben que su café y el cacao, apreciados en todo el mundo, también pueden “degustarse” por Internet. Lo saben, pero no pueden ponerlo a disposición de los cibernautas.

En la supuestamente democrática “Autopista de la Información” usted no puede vender nada sin tener una tecnología que le proporcione una firma digital. Ese es su identificativo, su carné virtual, su sello cibernético, su tarjeta de presentación y autentificación en los bancos para que la gente pueda comprar y pagarle legalmente. Pero los campesinos cubanos de las provincias orientales no tienen firma digital. Desde el año 2000, por no disponer de las tecnologías de certificados digitales, está paralizado el programa de la Unión Internacional de Telecomunicaciones para llevar el comercio electrónico a zonas donde nunca ha llegado, que permitiría a esos productores vender sus bienes y servicios por Internet, fundamentalmente a otros países del Caribe.

Los proveedores de esta firma virtual —empresas de Estados Unidos— tienen prohibido suministrar esa tecnología a Cuba. Algo similar les sucede a otras empresas nacionales, que para vender en Internet tienen que estar buscando constantemente socios en todos los confines del planeta dispuestos a arriesgarse, siempre bajo la amenaza de una multa gigantesca de Estados Unidos, presión que obliga a los negociadores criollos a dar mayores facilidades a la otra parte, y reduce por ende las ganancias.

Daños mutuos

El colmo de quienes apoyan y refuerzan con medidas cada vez más absurdas el bloqueo, es que han llegado a perjudicar a las propias empresas norteamericanas, al obligarlas a no vender sus productos a la Isla.

Quizá el mejor ejemplo de esto sea el gigantesco monopolio de Bill Gates, Microsoft, que en las licencias de uso de todos sus productos consigna que estos no pueden ser exportados a Cuba, a terceros que negocien con ella y hasta a personas que se sospeche puedan hacerlos llegar a nosotros.

Similares situaciones se dan con todo tipo de software y equipos, motivo por el cual entidades nacionales se ven obligadas a comprar las licencias de software, sus actualizaciones y la transferencia de tecnología a través de terceros países, con el consiguiente incremento de precios y demora en la adquisición.

La sociedad norteamericana pierde, por otro lado, la posibilidad de acceder a creaciones informáticas o tecnológicas del patio, como las colecciones multimedia educativas o de salud, apreciadas en otros lugares del mundo, que pudieran ayudar a muchas personas, fundamentalmente entre los hispanos residentes en territorio de EE.UU., a elevar su nivel cultural.

Se queda, además, sin poder constatar los avances en sectores como la producción de equipos médicos de alta tecnología, muchos de los cuales son competitivos mundialmente por su calidad, prestaciones y precio, y que pudieran ser utilizados para salvar la vida de muchos norteamericanos, específicamente en las comunidades más pobres. El absurdo e irracional bloqueo no tiene justificación alguna. Daña a ambas partes. Y, por desgracia, el mundo virtual tampoco escapa a esta realidad.

 Amaury E. del Valle
Los artículos de esta autora o autor




Primer  Anterior  2 a 8 de 8  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 8 en el tema 
De: matilda Enviado: 27/02/2007 19:31

Bloqueo a Cuba en Internet (II)
Ciberterrorismo Made in USA
por Amaury E. del Valle

Desde 1996, cuando «permitieron» el acceso a Cuba a Internet, las administraciones norteamericanas han brindado jugosos aportes monetarios para la creación y mantenimiento de una serie de sitios web que exhortan a la subversión interna en Cuba y llaman a ejecutar acciones terroristas, e incluso se vanaglorian públicamente de estar violando las más elementales leyes, entre estas la propia legislación norteamericana.



18 de diciembre de 2006

Desde
La Habana (Cuba)

Herramientas

 Imprimir
 Enviar

Países
 Cuba

Ver la primera parte de esta investigación.
Ver tercera y última parte de esta investigación


 

Desde que EE.UU. autorizó la conexión de Cuba a Internet, la Casa Blanca estimula, financia y dirige el uso de la Red de redes contra la Revolución.

Mercenarios sin fronteras

El dinero que reciben las organizaciones contrarrevolucionarias para mantener una «imagen negativa de Cuba» en el ciberespacio es tan cuantioso, que incluso les ha permitido «comprar» voceros en otras partes del mundo.

Quizá en ese sentido el caso más típico sea el de Reporteros Sin Fronteras (RSF), que desde 2002 ha recibido del Center for a Free Cuba (CFC) cuantiosas sumas para que calumnie a la Revolución en diversos tópicos, entre otros la famosa «libertad de Internet».

Estas subvenciones escondidas, que fueron descubiertas por la Red Voltaire y confirmadas por RSF ante la evidencia palpable, ascendieron en 2002 a 24 970 USD; ya en el 2003 se multiplicaron por más del doble, y el año pasado alcanzaron la cifra de 92 330 USD, un monto lo suficientemente jugoso como para que Robert Menard, secretario general de RSF, no tenga reparos en desvariar contra Cuba y su supuesta «represión a Internet», desconociendo que el país en más de una ocasión ha sido reconocido por organismos internacionales como un ejemplo de «desarrollo social» de la Informática.

Lo más curioso de esta situación es que el CFC está dando a Reporteros Sin Fronteras un dinero que en su mayoría proviene de donativos de la USAID, una agencia oficial del gobierno norteamericano, por lo cual el Center For a Free Cuba en la práctica actúa como un puente monetario entre la Casa Blanca y Menard.

Sin embargo, este no es el único ejemplo de encubrimiento de estas campañas, pues para ello la Oficina Oval utiliza a terceros organismos, supuestamente imparciales, y a periodistas y medios de prensa de todo el mundo, a quienes paga por calumniar a la Revolución Cubana y silenciar sus logros en materia de informatización de la sociedad.

Guerra asimétrica

Mediante organismos gubernamentales como la USAID, el Plan Bush en el año 2004 destinó 36 millones de dólares para promover la subversión y apoyar materialmente a los grupúsculos contrarrevolucionarios, a los cuales dota de modernas tecnologías que niega al pueblo cubano en virtud del bloqueo.

Esta llamada «Comisión para una Cuba Libre» otorgó adicionalmente en el 2004 otros cinco millones para difundir una imagen negativa de la nación, primordialmente a través de Internet, presentándolo como un país que viola los derechos humanos, promueve el terrorismo, fomenta la desestabilización, realiza actividades de espionaje y desarrolla un programa de investigación de armas biológicas.

Con estos fondos, que han aumentado a partir del endurecimiento de la política del bloqueo, se ha incrementado la agresión directa a las redes informáticas cubanas, estrechando así el cerco norteamericano en la red.

Ya el pasado 14 de febrero de 2006 el Departamento de Estado anunció la formación de un equipo que monitorea puntualmente a los países considerados «regímenes represivos que controlan el uso de la Internet», dentro de los cuales se apresuró a ubicar a Cuba.
El Global Internet Freedom Task Force (GIFTF), subordinado directamente a Condoleezza Rice, se concentrará en los «aspectos de política exterior de la libertad en Internet», por lo menos de forma abierta.

En realidad, el verdadero trasfondo de esta guerra cibernética ya anunciada por Donald Rumsfeld está en la noticia divulgada la semana pasada, cuando el secretario de la Fuerza Aérea, Michael Wynne, anunció que ese cuerpo armado tiene previsto crear lo que podría llegar a ser un comando destinado a «proteger el ciberespacio civil y militar de Estados Unidos».

Si a esto le unimos que una de las líneas de propaganda ideológica en la campaña de mentiras contra la Mayor de las Antillas es tratar de estigmatizarla como una «amenaza cibernética», no es de dudar que en el futuro próximo veamos fortalecer la ya evidente agresión.

Incluso Estados Unidos pudiera justificar el corte del servicio de Internet a Cuba con el supuesto «peligro informático», algo totalmente risible si se tiene en cuenta que por culpa de la Casa Blanca los cubanos tenemos para todo el país un ancho de banda de Internet similar al que tiene un solo usuario norteamericano o europeo. Y no exageramos en ese sentido, pues ya la guerra empezó, aunque en el plano económico, al impedir que empresas norteamericanas suministren equipos, tecnologías y software a homólogas cubanas o de terceros que comercien con estas.

En este sentido, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, según sus siglas en inglés) mantiene una vigilancia estricta para impedir que los ciudadanos norteamericanos utilicen la web como pasarela para cualquier transacción electrónica que pueda beneficiar a una institución cubana.

Desde que Bush anunció el endurecimiento de las acciones contra el pueblo cubano en 2003, las que entraron en vigor en 2004, el Departamento del Tesoro, a través de la OFAC, ha regulado los vínculos de los norteamericanos con 13 empresas de Cuba o vinculadas a la Isla. De estas, cinco operaban o tenían expresión por Internet y mantenían sitios que fueron incluidos en la lista negra: www.caribesol.ca, www.cimexweb.com, www.havanatur.cu, www.cuba-shop.net y www.sercuba.com.

Ciberterroristas «buenos»

Es muy significativo que con todas estas medidas y agresiones contra el ciberespacio cubano, Estados Unidos no solo viola las más elementales regulaciones internacionales en materia de comunicación, sino que pisotea sus propias leyes, incluyendo legislaciones recientes como la Ley Patriótica, que condena el terrorismo, y la Ley Antispam.
Hoy el gobierno norteamericano permite con total impunidad, y hasta de manera encubierta financia, a páginas web de corte terrorista como las de Alpha 66 y la de la radioemisora La Poderosa, y otras que exhiben contenidos terroristas o llaman a través el ciberespacio a su práctica, sin que nunca hayan sido molestadas.

Alpha 66, por ejemplo, en su sitio muestra fotografías de grupos armados terroristas entrenándose en campos cercanos a Miami o escalando armados montañas en el sur de California, sin que el FBI jamás haya «detectado» este ciberterrorismo, a pesar del rastreo constante de la red con programas espías.

Además, muchos de estos grupúsculos y hasta las web financiadas oficialmente por el gobierno estadounidense, violan la legislación federal y también la estatal de Florida que pena el «spam», al permitir el envío masivo de mensajes de correo electrónico no deseados, con la complicidad de empresas informáticas como AOL, Yahoo y Hotmail. Sin embargo, a pesar de las denuncias públicas de estas prácticas, y la complicidad de grandes empresas informáticas, en esto, como en muchas otras facetas, las leyes norteamericanas son ciegas, sordas y hasta mancas, pues con solo dar un par de clic pudieran cancelarse muchos sitios que hoy promueven impunemente el ciberterrorismo contra Cuba.


Respuesta  Mensaje 3 de 8 en el tema 
De: matilda Enviado: 27/02/2007 20:38

Bloqueo a Cuba en Internet (III y final)
Estados Unidos realiza cercos virtuales extraterritoriales contra Cuba
por Amaury E. del Valle

La aplicación fuera de sus fronteras de la absurda política del bloqueo también alcanza al ciberespacio.



18 de diciembre de 2006

Desde
La Habana (Cuba)

Herramientas

 Imprimir
 Enviar

Países
 Cuba

Temas
 Globalización económica, privatización de los servicios públicos
 Control de la América Latina

Ver primera parte
Ver segunda parte
___________________________________________________

Hace apenas unos días, un estudiante cubano de informática intentó «descargar» desde su computadora el lenguaje de programación Java, desarrollado por la compañía Sun Microsystems en la década del 90 y de amplia difusión hoy.

Un cartel bien explícito le advirtió que su intento de descarga sería infructuoso, pues su país no tiene autorización para usar ese programa producido por una empresa norteamericana. Al cartel solo le faltó explicarle al atónito joven que la negativa es una expresión más del bloqueo norteamericano.

El constante torpedeo al acceso de los cubanos a todo tipo de programas, servicios o nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones forma parte de una estrategia muy bien planeada y exquisitamente desarrollada por el gobierno norteamericano, que incluso mediante la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC por sus siglas en inglés) persigue a quienes intenten violar en el ciberespacio el fortísimo cerco virtual que ha tendido la Casa Blanca.

Las limitaciones son tan agudas, que incluso alcanzan hasta grandes y famosas empresas .COM, como se les conoce a las entidades comerciales del mundo de la tecnología. De las limitaciones no escapa ni siquiera el gigante buscador Google, que a pesar de haber contratado un dominio bajo el .cu, autorizado sin limitantes por el Registro de Nombres de Dominio de Cuba, actualmente niega a los cubanos servicios como Google Code Search, sin dar más explicación al respecto en inglés que: «Lo sentimos, pero Code Search no está disponible en su país».

Peligro en la UIT (Unión Internacional de Telecomunicaciones)

La presencia cubana como Estado miembro en la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) se vio amenazada en el 2006 por las presiones del bloqueo sobre bancos suizos que normalmente sirven de depositarios de la cuota que deben pagar los miembros de la or-ganización internacional.

El 6 de enero de este año, el Ministerio de la Informática y las Comunicaciones de Cuba realizó las acostumbradas tramitaciones anuales pertinentes con el Banco Financiero Internacional S.A. para efectuar el pago por concepto de la cuota de Cuba como Estado miembro de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, por un monto de 80 557 CHF (Francos Suizos).

Sin embargo, este pago fue rechazado por el banco donde posee su cuneta la UIT, en Suiza, argumentando: «los fondos no pueden ser acreditados debido a la imposición de sanciones económicas». Esto, además de hacer peligrar la presencia de Cuba en un organismo internacional de Naciones Unidas, y constituir una aplicación extraterritorial del bloqueo, también implicó gastos adicionales por las gestiones que se tuvieron que efectuar para poder ejecutar esta transferencia a través de otro banco, así como retrasos en los pagos de casi seis meses.

No obstante, no es el único ejemplo de los intentos por cortar el flujo de conocimientos y tecnología al país, o de impedir sus contactos en este campo con el exterior. Las imposiciones llegan incluso a boicotear la confianza de las redes informáticas cubanas, como lo demuestra la negación a la Oficina para la Seguridad de las Redes Informáticas (OSRI) de utilizar las siglas CuCERT para el Equipo de Respuestas a Incidentes Computacionales, cuya misión es la de prevenir y responder a los incidentes computacionales en Cuba.

La OSRI ha tratado de obtener autorización para utilizar las siglas CERT con el propósito de aprovechar el reconocimiento internacional que la misma posee, que facilitaría el alcance de los objetivos de este equipo, tanto nacional como internacionalmente, así como su identificación con instituciones homólogas en el extranjero con similares misiones y objetivos que los nuestros. Esta autorización redundaría en beneficios de alcance mundial en la lucha contra los incidentes computacionales y el «cibercrimen».

A pesar de esto, y aunque desde finales de octubre de 2004 la OSRI viene haciendo gestiones vía correo electrónico con el Instituto de Ingeniería de Software, de la Universidad Carnegie Mellon, en Pittsburg, Pennsylvania, Estados Unidos, la propietaria de la Marca Registrada CERT, después de múltiples y extensas gestiones, respondió el pasado 17 de marzo de 2006 que «...desgraciadamente, debido a las políticas del Gobierno de Estados Unidos», eran incapaces de satisfacer nuestra demanda de permiso en este momento (se refiere al uso de las siglas CERT).

Cables cortados

Además de impedir que el país se conecte con las redes internacionales de fibra óptica, el gobierno norteamericano también ha tratado de evitar que esta importante vía de conexión se extienda por el interior del país, negando la exportación de cables a las empresas estadounidenses que los producen o amenazando con sanciones a las extranjeras.

CUBATEL, la entidad encargada de esa tarea, solicitó durante 2006 ofertas a un total de 45 entidades relacionadas con la producción o comercialización de diversos tipos de cables, accesorios o equipos relacionados con las comunicaciones por fibra óptica. De todas, solo cuatro enviaron respuestas diciendo que no estaban interesadas o no podían hacer negocios con Cuba como resultado de las leyes del bloqueo; dos respondieron acerca de la posibilidad de contactar por intermedio de sucursales en terceros países, y las restantes 39 simplemente no respondieron. Algunos correos con respuestas negativas a la parte cubana por hombres de negocios norteamericanos son más que evidentes de la intención de empresas de ese país de establecer relaciones comerciales normales, las que se ven imposibilitadas por la absurda política del bloqueo.

Así, Saif Usmani, funcionario del Departamento de Ventas de Standard Marketing Incorporated, respondió: «Le agradecemos por contactarnos para sus requerimientos industriales, pero tenemos que declinar su solicitud porque no podemos romper la ley federal. En el caso de que las relaciones USA-CUBA mejoren en el futuro cercano y el embargo sea levantado, amaríamos ofrecerles nuestros productos».

Mientras, Scott Clay, funcionario de ventas de 3M Telecommunications, explicaba: «Desearíamos poder hacer negocios con ustedes, pero debido al embargo de EE.UU. con Cuba nos están prohibidas esas actividades. Si nuestras regulaciones cambian alguna vez, estaremos felices de asistirlos en el futuro».

Garrotes extraterritoriales

Hasta programas tan nobles como el de llevar la computación a todas las escuelas cubanas, la creación de salas de video, consultorios médicos o centros para el acceso a las nuevas tecnologías, muchos de estos ubicados en lugares de difícil acceso y que por ende deben funcionar con paneles solares, se ven afectados por la cacería criminal contra cualquier intento la Mayor de las Antillas de acceder a nuevas tecnologías.

Un ejemplo en este sentido es la situación con los inversores de corriente y otros equipos que se utilizan como parte indispensable de los Sistemas de Energía Fotovoltaicos que obtenían de una empresa canadiense, la cual, debido a sus intereses de negocios con Estados Unidos, se negó a seguir vendiendo estos productos a otra entidad del mismo país que negocia con la cubana COPEXTEL, lo cual provocó tener que buscar un suministrador alternativo y por ende el encarecimiento de los precios.

De hecho, hasta las sucursales en Canadá de los tres principales suministradores de equipos de computación en Estados Unidos: Ingram Micro, Tech Data y Sinnex se han negado a suministrar medios a una compañía canadiense porque esta hace negocios con Cuba, a pesar de que la mayor parte de estos suministros ni siquiera son fabricados en territorio de Estados Unidos, en franca aplicación extraterritorial del bloqueo.

Son apenas algunos pocos ejemplos de un ensañamiento cruel e innecesario contra los cubanos, quienes a pesar de eso cada día alcanzan un mayor dominio de las nuevas tecnologías, basado en el uso social de estas a favor del desarrollo de todo un pueblo.


Respuesta  Mensaje 4 de 8 en el tema 
De: MIKIMBYJODON1 Enviado: 27/02/2007 21:45
matilda aquien quieres engañar con esas fotos militares  ademas son viejicimas porque hoy dia todo a nivel militar usan monitores planos para ocupar menos espacio no sigas engañandote vieja  vas a cojer una ulcera ..

Respuesta  Mensaje 5 de 8 en el tema 
De: YoelA Enviado: 27/02/2007 22:52
jajajjauijuaaaaaaaaaaaaaaaaaaja

Respuesta  Mensaje 6 de 8 en el tema 
De: SadCHARLOTE Enviado: 27/02/2007 22:52
 

Respuesta  Mensaje 7 de 8 en el tema 
De: matilda Enviado: 28/02/2007 11:59
Mikimby ,quien puede ser tan pelotudo que se fije en las fotos y no en el escrito???
Bueno,reconozco que hay un par mas boludos todavía.....
Será que a la Red Voltaire no le alcanzó la guita ??
O será que vos estás haciendo señales "de humo"??
Juazzzzzzzzzz
 
Que cosa che!!! uno los instruye y ni asi.......
mati

Respuesta  Mensaje 8 de 8 en el tema 
De: SadCHARLOTE Enviado: 28/02/2007 11:59
El burro hablando de orejas
 


Primer  Anterior  2 a 8 de 8  Siguiente   Último  
Tema anterior  Tema siguiente
 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados