Prensa Latina (Fausto Triana)/ inSurGente.- La salud del presidente cubano, Fidel Castro, mejora ostensiblemente y hay razones para el optimismo en torno a su recuperación, afirmó hoy el ministro de relaciones exteriores de la isla caribeña, Felipe Pérez Roque. El canciller de Cuba ironizó al decir que "no es una buena noticia para Bush (George W.) ni para el gobierno de Estados Unidos. Pero lo cierto es que Fidel se restablece, hace ejercicios físicos y está mucho más fuerte". Está en contacto directo con los dirigentes del Partido y del Gobierno, le consultamos diversos asuntos y él nos da orientaciones, y cada vez más participa en tareas, acotó en rueda de prensa.



Pérez Roque, que presidió hoy la reactivación de las relaciones entre el Movimiento de Países No Alineados y la organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), encomió al mismo tiempo la actitud del pueblo cubano.

"En este tiempo hemos visto con admiración la respuesta ejemplar de nuestro pueblo, su cultura política, el sentido de unidad nacional, la madurez y la confianza en la Revolución", apuntó.

El diplomático recordó que las administraciones estadounidenses diseñaron planes para derrocar a Fidel Castro, invadir a la isla y hasta estrategias para cuando no estuviera físicamente presente el Jefe de Estado.

Sin embargo, no tenían calculado que iba a estar y a no estar al mismo tiempo y esto los ha desconcertado, comentó.

"No tenemos nada en contra del pueblo norteamericano, que no entiende por qué se le priva del derecho a visitar Cuba y cada vez comprende mejor la injusticia del bloqueo económico, que es inmoral", recalcó.

El presidente Bush se va a jubilar sin haber logrado sus objetivos contra nuestro país, no posee autoridad moral para dictar lo que debemos hacer, somos una pequeña isla, independiente y soberana, y en nuestro territorio se hace lo que decidimos los cubanos, sentenció.

Debería antes de irse (Bush) cerrar el centro de torturas de la Base Naval de Guantánamo, devolvernos ese territorio usurpado a Cuba, renunciar a las guerras y a los ataques preventivos, y retirarse de Iraq, opinó.

El jefe de la diplomacia de La Habana comentó que la gira de Bush por América Latina es tardía y extemporánea, y "no conseguirá los propósitos de cambiar la historia de nuestra región".

En Latinoamérica cabalga hoy el Libertador Simón Bolívar, rememorando que durante 20 años el área fue sometida a la pobreza de la mitad de su población gracias a las recetas neoliberales impulsadas por Washington, añadió.

Avanzamos hacia una verdadera integración regional. Sólo Cuba ha operado de la vista gratuitamente a más de 500.000 latinoamericanos, explicó.

Sobre un eventual diálogo entre Washington y La Habana, Pérez Roque reiteró la disposición de su país a emprender conversaciones sobre la base del respeto mutuo.

La única condición que ponemos es que no haya condiciones para entablar un diálogo, como ha manifestado en más de una ocasión el primer vicepresidente del Consejo de Estado de Cuba, Raúl Castro, concluyó.