La Segunda Guerra de Independencia de los EEUU
Más de medio centenar de muertos en Bagdad, torturados, maniatados y con tiros en la cabeza
inSurGente (A.M.).- Bush ha comparado, el último 4 de Julio, la guerra de Iraq con la II Independencia de los Estados Unidos. En realidad, la guerra en Mesopotamia es una versión a gran escala de una mezcla entre la represión salvaje de los escuadrones de la muerte en El Salvador y Nicaragua –dirigidos por el mismísimo Negroponte desde Honduras en la década de los 80 del siglo pasado-; la tortura generalizada y la matanza de las dictaduras militares fascistas en Chile, Argentina y Uruguay; y la experiencia de desarticulación de la resistencia argelina con el empleo de la tortura y el asesinato. En ninguno de esos casos, la intensidad del genocidio llegó a los extremos de lo que está ocurriendo en estos mismos momentos en Bagdad y en el resto de las ciudades iraquíes. Los resistentes a la ocupación, los patriotas que apoyan a esa resistencia, o la inmensa mayoría del pueblo iraquí que simpatiza con ella, están siendo torturados y asesinados. Será, sin duda, por la brutalidad sin límite y por el cinismo con el que se aplica, el primer capítulo para una verdadera Historia Universal de la Infamia. Y los mismos métodos se están generalizando en Afganistán y en Palestina, y preparando en el Líbano. En todos los frentes con la complicidad criminal de Europa.
Bagdad, 9 jul (PL) La policía iraquí reportó hoy el hallazgo en diversos barrios de Bagdad de 26 cadáveres con signos de torturas y que suman 55 en las últimas 24 horas.
Fuentes de seguridad notificaron que los occisos -ahora en la morgue de esta capital- estaban maniatados y con los ojos vendados y no portaban documentos de identidad.
Los agentes hallaron la víspera otros 29 cuerpos en similares condiciones en varias áreas de la capital.
Esas 55 personas sufrieron tormentos y luego fueron rematadas con disparos en la cabeza.
El Ministerio de Interior informó que el pasado mes se encontraron en Bagdad unos 550 restos de personas torturadas y acribilladas a balazos.
Aunque existe una tendencia a ubicar esos casos en medio del caos de la violencia de base confesional, lo cierto es que cada vez se hace más evidente la presencia de elementos paramilitares (escuadrones de la muerte) en ese tipo de acciones.
Miembros del propio Ministerio del Interior fueron relacionados con la existencia de esos grupos ilegales.
Los secuestros y asesinatos ocurren en momentos en que Estados Unidos y el gobierno iraquí incrementaron la presencia de sus soldados en las áreas centrales del país, entre ellas esta capital.