Alertan sobre nueva ola migratoria silenciosa desde Cuba

ISABEL ESPRONCEDA

El Nuevo Herald

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AL DIAZ / The Miami Herald

EN ESTA fotografía de archivo aparece un cubano preparando una balsa durante el éxodo de balseros de 1994.

Una nueva ola migratoria desde Cuba hacia los Estados Unidos se está produciendo de manera discreta pero sin dudas creciente, asegura un estudio de la Universidad de Miami basado en estadísticas de agencias federales.

Bajo el título de Llegando a América: la nueva crisis migratoria cubana, el documento investiga las tendencias migratorias cubanas a partir de 1950, y concluye que Estados Unidos enfrenta ''un diluvio'' y una ''nueva crisis migratoria'' que pasa ``desapercibida tanto para los medios de comunicación como para los políticos''.

En los últimos dos años, llegaron a territorio estadounidense unos 77,000 cubanos, casi el doble de los que escaparon durante la crisis de los balseros de 1994, señala el informe del Instituto de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos (ICAAS) a partir de cifras del Departamento de Seguridad Territorial.

''De hecho, más cubanos llegan a los Estados Unidos, legal o ilegalmente, que cuando los Vuelos de la Libertad de mediados de los años 60 hasta principio de los 70'', destaca el texto. ``Contrariamente al criterio convencional de la magnitud del éxodo de los balseros (aproximadamente 40,000) y el Mariel (aproximadamente 125,000) desde el año fiscal 2000, unos 191,000 cubanos han reiniciado sus vidas en los Estados Unidos, lo cual eclipsa la combinación de las migraciones del 1994 y del 1980''.

A partir de los acuerdos migratorios firmados por el presidente Bill Clinton en 1995, unos 20,000 cubanos son autorizados a emigrar anualmente a Estados Unidos.

El estudio incluye también las llegadas ilegales por vía marítima y las entradas por la frontera mexicana, opciones que han tenido una tendencia creciente en la última década.

Los cubanos que arriban ilegalmente a territorio estadounidense pueden ajustar su estatus gracias a la Ley de Ajuste Cubano, vigente desde 1966. La legislación ha ampliado este año sus beneficios a los hijos de cubanos nacidos fuera de la isla.

Al detallar por décadas el comportamiento migratorio desde la isla, el estudio evidencia que sólo entre los años fiscales 2000-2007 arribaron a Estados Unidos más cubanos que en los períodos de 1980-89 (132,552) y 1990-099 (159,037). Entre 1950-59 lo habían hecho sólo 73,221. Se calcula que para el año 2009 Estados Unidos habrá acogido a 267,000 nuevos inmigrantes cubanos.

De manera que en la etapa de 1990 al 2009, más de 426,000 cubanos se habrán asentado en este país, una estadística que se equipara con los 458,000 inmigrantes del llamado ''exilio histórico'' previo a 1980.

El lento paso de la recuperación socioeconómica posterior al llamado ''período especial'' de los años 90 y la falta de esperanza especialmente entre los jóvenes sobre cambios significativos bajo el mandato de Raúl Castro, se reflejará probablemente en un aumento de la emigración en los años venideros, asegura el estudio.

Agrega que las consecuencias humanas y económicas que podrían derivarse de esta circunstancia, tanto para el gobierno federal como para los gobiernos locales, son motivo suficiente para preocuparse.

El estudio sugiere que ''la llegada no ya de decenas sino de cientos de miles de cubanos en un corto período de tiempo es un escenario que toda administración evitaría a cualquier costo''. Aun más, con las prioridades acerca de la seguridad nacional suscitadas tras los ataques del 11 de septiembre, y la actual división de la sociedad estadounidense por las cuestiones migratorias en general.