No es lo mismo hablar mal de Cuba, que hablar de las cosas malas que hay en Cuba.
Hablar de las cosas malas que hay en Cuba, es hablar de los problemas que afectan a este pueblo. Poniendo por encima de todas las diferencias de opinión y criterios ideológicos, el objetivo de que esos problemas se resuelvan y este país gane en libertad y prosperidad.
Hablar de las cosas malas que hay en Cuba es lo que este humilde servidor ha intentado hacer de vez en vez, cuando ha tocado el tema de los problemas del transporte, el acceso a internet, la manipulación de la prensa oficial y otros temas igual de escabrosos.
Hablar de las cosas malas que hay en Cuba es lo que ha hecho Eliecer Avila, un estudiante de la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI), en un debate (al fin se puede usar correctamente en Cuba el termino debate!!!) con el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón, en un encuentro ocurrido en los días previos a las elecciones del mes pasado.
Según se puede comprobar en el video "extraoficial" que circula de mano en mano en la Habana, Eliecer Ávila habló con mucha franqueza y hasta cierta ingenuidad, de algunos de los problemas que le afectan como cubano y dejó planteadas preguntas muy interesantes que se hacen día a día muchos ciudadanos de este país.
Ya aclarado uno de los puntos pasamos al que sigue.
Hablar mal de Cuba es lo que se han dedicado a hacer diversos medios de prensa internacionales, intentando hacer circular por el mundo la noticia de que Eliecer Ávila había sido arrestado, y de que estaba a punto de propagarse una posible ola de represalias contra los estudiantes cubanos. Infobae, un medio de noticias argentino que no parece conocer lo que es el respeto a la verdad, encabeza la lista con sendos titulares de impacto: "El estudiante cubano que pidió libertad está preso" y "Opositor apresado por Castro negó todo en Granma".
Es interesante ver como un par de verdades echadas al viento, desatan tamaño vendaval de mentiras. Por un lado está esa prensa amarillista que sirve a oscuros intereses y solo se acuerda de este país cuando salen sus problemas a flote. En manos de una derecha manipuladora y falsa, que intenta ocultar sus malas intenciones en buenos trajes cortados a la medida, esta prensa parece desear y hasta necesitar que las cosas en Cuba vayan de mal en peor, y me imagino a más de un editor o corresponsal desencantado por el hecho de que el estudiante no haya sido arrestado finalmente, tal y como ellos se habían apresurado en "informar".
Por otro lado está el gobierno cubano, al que las palabras de Eliecer Ávila circulando de mano en mano en discos compactos o memorias flash, se le habían atragantado en la garganta, y que ahora aprovecha la campaña de desinformación desatada por los medios de prensa para tomar un segundo aire. Ahora el gobierno se declara un campeón de los debates, en un burdo artículo publicado en la prensa oficial bajo el título de "El fantasma de la tontería informa sobre Cuba".
Y cito un fragmento: "Puede también que una parte de nosotros, crecidos al amparo del gobierno socialista paternal, que dominó una buena parte de nuestro camino, no asumimos responsablemente nuestros deberes de propietarios y nos enajenamos de responsabilidades derivadas de esa condición".
Bello y profundo Mea Culpa. Ahora resulta que el cubano no hacía uso de la crítica porque estaba "enajenado" en un gobierno paternal. Tonterías.
Criticar al gobierno, cuestionar cualquier política o postura oficial, o mantener una posición ideológica diferente siempre fue muy mal visto en este país, sino "Fresa y chocolate", la gran película de Tomas Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabio, fuera un filme de ciencia ficción y no un retrato veraz y demoledor de la sociedad cubana de esos tiempos y no hubiera tenido que esperar más de 10 años para ser trasmitida en televisión.Los hechos se muestran por si solos: el gobierno está llenando sus sitios oficiales con los videos de la desmentida realizada por los estudiantes de la UCI (entre ellos Eliecer Ávila) a las falsedades que han intentado promover los medios internacionales a los que anteriormente me referí.
Pero el primer video, el que interesa de verdad a los cubanos no está por ningún lado. La consigna parece ser: lo importante no es que los cubanos participen en el debate, sino que el resto del mundo pueda darse cuenta de que aquí todo está bien.
Es la misma técnica usada en "La mesa redonda", un programa televisivo tan manipulador que hubiera dejado rojo de envidia al mismo Goebbels. En "La mesa redonda" los brillantes cuestionamientos y las preguntas capciosas siempre llevan un tema internacional de fondo, mientras los temas de Cuba se conversan entre sonrisas y apretones de manos.
La única conclusión posible es que este mundo está bien jodido y el tema cubano es un buen ejemplo de ello. Eliecer Ávila dice la verdad, luego la prensa internacional miente y el gobierno cubano manipula. Como diría el gran Calderón, esto de la política "es de pinga queridos amiguitos, papaítos y abuelitos". Y esta comedia silente sigue su función.
*La comedia silente era un programa para niños que ofreció la tv cubana hace muchos años. Era un programa donde un locutor (Armando Calderón) ponía voces y efectos sonoros a comedias silentes del Gordo y el Flaco, Buster Keaton y Carles Chaplin.
PD: Después de tanto tiempo sin escribir, estaba preparando un regreso por todo lo alto con un post sobre el Duque Hernandez. Me estaba dando el gusto de refinar cada oración y de pronto sucedió todo esto, obligándome a "soltar" este texto que me ha salido directamente de las vísceras. En fin, lo importante es que estamos de vuelta.