El Duende viernes 25 abril 2008.
EL DUENDE.
También los amigos de El Duende opinan aquí.
Con frecuencia recibimos a través de nuestro correo electrónico mensajes con informaciones de interés para nuestro oyentes y lectores, que en muchas ocasiones trasladamos a Uds. para así enriquecer con dichas colaboraciones esta diaria tarea informativa – aguda siempre y jocosa a veces- que realizamos desde nuestra oscura tumba fría del cementerio de la calle 8, apenas a dos cuadras de la Tertulia del restaurante Versalles.
Hoy vamos a ceder nuestro espacio habitual en Radio-Miami a un amigo oyente que nos remitió para su difusión, una jocosa colaboración en la que nos relata una historia, que de haber ocurrido en la vida real, demuestra que en medio de tantas vicisitudes por la que atravesamos los que vivimos en este planeta, hay todavía quien toma las cosas no muy en serio y tiene tiempo para hacer maldades picarescas que nos hacen desternillar de risa.
Dice así la colaboración de nuestro oyente-lector que nos escribe:
Este relato es para todos aquellos que ocasionalmente han tenido un mal día y han necesitado desquitarse con alguien.
Estaba sentado en mi escritorio cuando efectué una llamada telefónica. Me contesto un tipo malhumorado diciendo:
¡Aló!, le dije: "Buenas, ¿podría hablar con Luís González?..."
"No aquí no vive ese huevón". Y me colgó el teléfono de la manera más grosera.
Resulta ser que había marcado un número incorrecto por lo que procedí a llamar al teléfono indicado. Después de colgar, observe el número de teléfono errado en mi escritorio; decidí llamar a ese número y contesto la misma persona que me tranco. Le dije: - "Eres un hijo E' P".
Y colgué. Inmediatamente anote ese número en mi agenda y le puse al lado la palabra HIJO
E' P.
Cada semana, cuando tenía ganas de jorobar un poco al tipo y cuando éste contestaba le decía: "Eres un hijo E' P.". La broma me hacía sentir mucho mejor porque me quitaba el estrés jorobando al maldito Hijo E P. Pero al tiempo me entere del servicio de la compañía de teléfonos de identificación de llamadas, por lo cual me limite a dejar de llamar por unos días al “Hijo E' P”.
Después se me ocurrió lo siguiente: Marque su número telefónico y cuando me contesto diciendo: ¿Aló?, le respondí al momento: "- Buenas tardes, le llamo del Dpto. de ventas de la compañía telefónica Bellsouth para saber sí conoce el servicio de identificación de llamadas que ofrecemos a nuestros suscriptores. El tipo contesto diciendo que no, que no tenía ese servicio. Sabiendo yo entonces que no podría identificar mi número telefónico, le dije: "Eso es porque eres un “Hijo E' P".
Un día estaba en el parqueo del centro comercial de Dadeland esperando que saliera una señora con su auto para aparcar el mío en su puesto de estacionamiento. Pues, resulta que cuando la señora salió vino un tipo manejando un Toyota Negro del año y se metió en el sitio en el que yo iba a parquear. Le toque la corneta, pero nada, el tipo simplemente se bajo del carro y se fue para el centro comercial ignorándome por completo.
Ante su actitud pensé "ese es un “Hijo E ´P" . Y fue cuando note que en su carro había un letrero que decía: Se vende este Toyota. Interesados por favor llamar al teléfono 305-641 74 10 y pregunte por el Toyota que está a la venta.
Después llame al tipo del Toyota al teléfono indicado:
-¿Hablo, con el señor del auto japonés negro que está a la venta? - Sí, habla conmigo, me contestó el hombre.
-¿Podría decirme donde lo puedo ver?, le respondí.
-Sí,- me contestó- vivo en la ciudad de Hialeah en la calle tal número más cual, a una cuadra del ayuntamiento. Es una casa pintada color crema de tejas rojas y el carro está parado frente a la casa. Mi nombre es Eduardo Pérez, de los Pérez de Hialeah que antes vivíamos en Marianao y me puede encontrar en casa después de las 6 de la tarde.
-Okey, gracias. Le dije. ¿Le puedo decir algo señor Pérez?
- Sí, como no, me respondió amablemente.
- Eduardo, es que tu eres un “Hijo E' P”. Y le colgué el teléfono.
Bueno, a partir de ese día tenía a dos “Hijos E P”” a quien llamar para jorobar y entretenerme un rato. Después de pasarme un tiempo llamando al par de Hijos E P, la cosa se puso sabrosa, por lo que decidí hacerla más divertida y se me ocurrió lo siguiente:
Llame al “Hijo E P”” número uno y le volví a repetir el insulto. Entonces el tipo, en forma grosera grosera me contesto molesto con otros insultos.
¿Sí? Y entonces le dije: "¿Eres el hijo E' P?", pero no colgué.
El tipo me dijo: -¿Estás ahí? a ver si dejas de llamarme.
Yo le dije: -No, que lo seguiría llamando.
El tipo me pregunto con tono suave: -¿Cómo te llamas?
Eduardo Pérez, le dije, dándole el nombre del dueño del Toyota a la venta.
- ¿Donde vives?, me preguntó.
Y le respondí : Yo vivo en Hialeah en la calle tal numero mas cual a una cuadra del ayuntamiento, en una casa pintada de rosado que tiene a la entrada un Toyota negro.
- ¡En menos de una hora estoy allá para partirte la cara, maldito!, me respondió el hombre indignado.
Yo le dije entonces:- ¿No me digas, que me estoy muriendo de miedo. Y te lo vuelvo a decir, eres un âHijo E´Pâ. ¡Hijo E' P!, ¡Hiiijoooo eeeee' p!, y le colgué el teléfono.
Después de eso llame al “Hijo e p” número dos, y cuando contesto le dije: - Hola hijo e' p.
, sí te llego a encontrar, te voy a romper la cara y partir el trasero,
- ¿Así es la vaina?, le dije, pues hoy es tu oportunidad porque en menos de una hora estoy en tu casa para romperte la jeta, hijo e' p, a ver que me vas a hacer.
Enseguida llame a la Policía de Hiealeah y les dije que iba para la dirección tal de Hialeah a una cuadra del ayuntamiento a matar a mi novio marica porque lo encontré con otro hombre.
Después llame a Radio-Miami y todos los canales de la televisión para reportar que la PM había encontrado un arsenal de armas de los terroristas de Osama Ben Ladeen. Infiltrados en Miami.
Enseguida me fui para la dirección antes descrita a ver el espectáculo:
Unas 6 perseguidoras rodeando la casa, dos tipos dándose coñazos en plena calle, la policía tratando de separarlos y un consejero haciéndolos recapacitar y las cámaras de televisión de todos los canales de Miami reportando una disputa pasional entre dos supuesto arrebatados maricas. ¿Qué les parece la broma? Eso sí que es ser, un redomado “Hijo E ´P”.
Y después de esta jocosa colaboración de un asiduo oyente de el Duende nos despedimos de Ud. Hasta el próximo lunes que vamos directo con nuestro gallo cantando a nuestra tumba fría. Bambarambay.