El 16.2 por ciento de ellos probó la cocaína al menos una vez, mientras que el 42.4 por ciento lo hizo con cannabis.
Washington. Los estadunidenses son el mayor consumidor de cannabis y cocaína del mundo a pesar de tener una legislación represiva, según un estudio llevado a cabo en 17 países que fue publicado el lunes en PLoS Medicine, una revista científica en línea.
Según este análisis, dirigido por investigadores de la Universidad de New South Wales (Sydney, Australia), el 16.2 por ciento de los estadunidenses probó la cocaína al menos una vez, mientras que el 42.4 por ciento probó cannabis.
Este estudio se basa en datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los neozelandeses están en el segundo lugar de consumidores de estupefacientes, lejos detrás de los estadunidenses, con 4.3 por ciento y 41.9 por ciento respectivamente.
La encuesta, que fue hecha a 54 mil 68 personas en 17 países, pone en evidencia la existencia de un grupo socioeconómico más propenso a consumir drogas ilegales.
Es así como un adulto joven, de sexo masculino, con ingresos altos, soltero o divorciado, tiene generalmente más tendencia a consumir regularmente estupefacientes.
El consumo "no parece tener una relación directa con las políticas nacionales en materia de lucha contra la droga", afirmaron los investigadores. De hecho, "los países con una legislación más rigurosa no registran un menor consumo de estas drogas que las naciones más tolerantes", prosiguieron.
Holanda es el perfecto ejemplo, ya que a pesar de su política liberal en materia de estupefacientes, cuenta solamente con un 1.9 por ciento de consumidores de cocaína y un 19.8 por ciento de cannabis.
En Estados Unidos, si bien 12 estados autorizan el consumo de cannabis para fines médicos, entre ellos California, la legislación federal prohíbe la tenencia y el consumo de productos ilícitos.