El anciano Ramón Bardon Martínez, (conocido por Monguito) de 68 años de edad, vecino de calle 220, # 101 entre 1ra. y Mar, Jaimanitas, Playa, Ciudad Habana; está siendo despojado de su vivienda, una residencia amplia y en muy buenas condiciones, donde ha vivido desde niño y que luego heredó de sus padres. La misma está situada en un lugar de interés gubernamental, pues colinda por el fondo con la unidad de Tropas Guardafronteras de Cubanacán y a 50 metros por el costado de las instalaciones de la Seguridad Personal de Fidel Castro.
El caso en cuestión ha sido urdido por las autoridades mediante una componenda legal, en la que participó la PNR, la Fiscalía y el Tribunal Provincial de Ciudad de la Habana, quien dio ropaje legal a está tropelía al dictar sentencia firme No. 32 / de 2006 donde ordena la confiscación de la vivienda, basándose en dos causas prefabricadas para achacarle de: PROXENETISMO Y TRATA DE PERSONAS. Sustentando como argumento que Bardon Martínez, alquiló sin tener licencia para ello, en al menos dos ocasiones habitación a una pareja, de la cual ella resultó ser prostituta.
Todos sabemos qué cosa es un proxeneta y que un tráfico de personas, los vecinos de Monguito, desmienten los planteamientos de las autoridades al asegurar que el mismo es un hombre decente; resultando que lo único claro es que se trata de un despojo inmoral con la participación de todos los involucrados antes mencionado. El asunto parece responder al interés de alguien, pues la Contrainteligencia se está ocupando de intimidar, mientras que al viejo le quieren dar un cochitril de mala muerte.
Francisco Chaviano González.
Coordinador general ai.
Unidad Liberal de la República de Cuba.