Cuba impide a atleta visitar a su madre enferma
WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald
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TORU YAMANAKA/AFP/Getty Images
Rematadora de excepcionales condiciones, Agüero ganó doce medallas con la selección cubana entre 1995 y el 2000, incluidas las preseas de oro en las Olimpiadas de Atlanta'96 y Sydney 2000.
Los Juegos Olímpicos de Pekín abrieron sus puertas con una nota negativa para el gobierno de Raúl Castro: la decisión de las autoridades cubanas de no permitirle a la voleibolista nacionalizada italiana Taismary Agüero Leiva viajar de urgencia a la isla para visitar a su madre enferma.
Agüero, de 31 años, se reincorporará a la selección italiana que compite en Pekín después que Cuba rechazara su petición de visa para viajar a su país natal, donde su madre se halla en estado grave.
La deportista es natural del poblado de Mayajigua, pero su familia reside desde hace años en la ciudad de Yaguajay, provincia de Sancti Spíritus, en el centro de la isla.
La jugadora abandonó Pekín la noche del miércoles junto al entrenador italiano Stefano Sciascia, con la intención de gestionar un visado de emergencia ante las autoridades cubanas, pero tras dos días de intensas negociaciones la respuesta fue negativa. Agüero había permanecido en Alemania en espera de la autorización que nunca fue emitida.
Los cubanos son los únicos ciudadanos del hemisferio occidental a quienes las autoridades nacionales les exigen un permiso para poder entrar y salir de su país de origen, ya sea con carácter temporal o definitivo.
Una fuente vinculada al Instituto Nacional de Deportes y Recreación (INDER) en La Habana dijo ayer a El Nuevo Herald que la institución tenía conocimiento del caso, pero que la decisión se tomó "al más alto nivel'' gubernamental.
"La dirección del INDER fue informada del asunto, pero la decisión se tomó al más alto nivel'', dijo la fuente bajo condición de anonimato. ‘‘Como se sabe es un caso muy delicado, muy sensible''.
La negativa de entrada a Agüero se produce apenas un mes después de que el ex gobernante Fidel Castro publicara un artículo afirmando que a los atletas desertores no se les debía permitir nunca el retorno al país.
"No permitamos jamás que los traidores visiten después el país para exhibir los lujos obtenidos con la infamia. Culpémonos también a nosotros mismos'', aseveró Castro en una "reflexión'' del pasado 16 de julio sobre el equipo olímpico de béisbol.
Tres días después, en un mensaje de despedida a la delegación olímpica, Castro pidió a los atletas "no olvidar nunca que en el pecho llevan el honor de su pueblo'' y les recordó que la consigna en Pekín debe ser igual que la de los antiguos espartanos: ‘‘¡Con el escudo o sobre el escudo!''.
Agüero, que desertó durante un torneo de Montreaux, Suiza, en el 2001, no ha regresado desde entonces a la isla. Actualmente juega con el equipo profesional turco Turk Telekom Ankara y se nacionalizó italiana en el 2006 tras casarse con el ciudadano italiano Alessio Botteghi, fisioterapeuta del club Perugia.
Rematadora de excepcionales condiciones, Agüero ganó 12 medallas con la selección cubana entre 1995 y el 2000, incluidas las preseas de oro en las Olimpiadas de Atlanta'96 y Sydney 2000.
Fue durante una estancia como jugadora del Perugia, entre 1998 y el 2000, que comenzó su relación con Botteghi.
Desde el pasado año pasó a formar parte de la selección nacional de Italia, equipo con el que intervino en el Campeonato Europeo 2007 y se llevó el trofeo de Jugadora Más Valiosa.
Pero la verdadera prueba de fuego de Agüero se produjo en noviembre del 2007, cuando brilló en la victoria 3-0 de Italia frente a Cuba en la semifinal de la Copa Mundial de Voleibol en Japón, arrollando a sus ex compañeras de la selección caribeña.
En esa ocasión, la estelar voleibolista dijo que prefirió ‘‘quitarse el peso'' de enfrentar a su antiguo equipo en la Copa Mundial antes de llegar a la Olimpiada.
Según su testimonio, las jugadoras de la selección de Cuba fueron instruidas de que no la saludaran o habla- ran con ella durante la competencia en Japón.
"Yo creo que me he comportado bien'', declaró Agüero a la prensa italiana después del juego contra Cuba. "Sabía que sería duro y lo ha sido; sólo espero que esta decisión no tenga consecuencias para mí''.
Pero el rechazo del visado humanitario es una consecuencia tácita de su decisión de rivalizar con la escuadra cubana.
"Eso cayó muy mal aquí, fue un trago amargo que el INDER y el gobierno tuvieron que aceptar, pero que iban a cobrársela [a Agüero] en la primera oportunidad'', comentó un periodista deportivo desde La Habana.
La selección italiana enfrentará hoy a Rusia en el comienzo del torneo olímpico de voleibol (grupo B) , aunque es poco probable que Agüero pueda llegar a tiempo para el partido. Cuba jugará con Polonia (grupo A).
Agüero podría volver a enfrentarse al equipo cubano en la etapa final de la competencia.