Directivos de entidades agrícolas estatales en Villa Clara seleccionan desde inicios de este mes campesinos para enviarlos a trabajar a Venezuela, según reportes de la agencia independiente Cubanacán Press.
De acuerdo con un despacho del periodista Guillermo Fariñas, fuentes disidentes en la provincia Villa Clara, en el centro de la isla, informaron que funcionarios del Ministerio de la Agricultura (MINAGRI) y la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) abrieron una convocatoria para seleccionar trabajadores.
Las solicitudes son recibidas por una comisión conjunta del MINAGRI y la ANAP, que es supervisada por el Departamento de Seguridad del Estado del Ministerio del Interior, para confirmar el grado de confiabilidad política de los candidatos a viajar al país sudamericano.
Hasta el momento la prensa oficial cubana no ha hecho ninguna mención sobre el asunto.
Entre los presuntos solicitantes se encuentran cultivadores, tractoristas, turbineros, mecánicos agrícolas y otros obreros calificados de las empresas de cultivos varios estatales, así como miembros de las cooperativas agrícolas de Villa Clara. Todos deben pasar un chequeo médico obligatorio en el hospital universitario Arnaldo Milián Castro.
Los seleccionados serán destinados a desarrollar las llanuras fértiles de la Cuenca del Orinoco, donde se cultivarán frutas, tubérculos y granos, que serán distribuidos al 50 por ciento entre Cuba y Venezuela, según se les informó en una reunión con el delegado provincial del MINAGRI.
La noticia se produce justamente en momentos en que el gobierno de Raúl Castro impulsa una transformación del sector agrícola, interesado en recuperar las tierras ociosas y sustituir las elevadas importaciones de alimentos.
Cuba importa el 85 por ciento de los productos destinados a la canasta familiar, lo que implicó un gasto de $2,600 millones el pasado año, unos $900 millones más que en el año 2007.
El gobierno cubano entregó más de 45,518 terrenos ociosos en usufructo en los últimos cinco meses de un total de 96,419 solicitudes presentadas, de acuerdo con el viceministro de Agricultura, Alcides López. El monto solicitado asciende a 657,896 hectáreas.
Las tierras se entregan a particulares por plazos de diez años prorrogables, en un máximo de 13.42 hectáreas y, para el caso de quienes ya posean tierras en propiedad o usufructo, no pueden exceder las 40.26 hectáreas.
Recientemente también se ha autorizado a las granjas estatales a explotar tierras ociosas, al igual que a las cooperativas y entidades no agropecuarias, por un término de 25 años renovable, sin límites de extensión.
Uno de los problemas fundamentales de la producción agrícola ha sido el éxodo de mano de obra hacia otras actividades urbanas, debido a los bajos salarios y los excesivos controles estatales.