Como una mirada en el espejo
brotando desde lo mas profundo del alma
Recojo cada día la ilusión y el deseo.
Una realidad perdida en la tenebrosa noche de la ignorancia
Que goza, con lamento, de la añoranza.
Caemos desde el sollozo de la noche
Hacia una verdad dormida
Que habita y se alimenta de las sombras
Y vive solo cuando despierta la utopia.
Y el sueño de la razón produce quimera.
Monstruos inanimados y deformes tras la batalla de la vida.
Sueños rotos por la fatiga y la lucha.
La impaciencia galopa sobre dorso mullido y acogedor de la inquietud.
Arrastra, sobre si, ríos de exaltación dosificando el ímpetu.
Día a día recupero la calma
Diosa de la alegría y la felicidad
Pues en ella, dibujo el perfil del amor.
Doy forma y origen amoldando cada línea de tu rostro
Sobre la luz tenue de la madrugada.
Y todo cambia el sentido de la vida
Planifica cada instante, cada momento
Conjugando nombre y verbo para alimentar el sueño.
Asumo mi destino
Viviré cada noche
Cada día moriré
Y en el transito
esperaré paciente
Y consumiré mi agonía.
Saludos
kuko