Líneas en el mar, cruzan desafiantes sobre el horizonte
Desgarrando sueños.
Trazadas desde el infinito
Rompen la luz que desflora el día y agota la noche.
Mártires de la madrugada, los amantes intensifican deseos
Agobiados por el tiempo que escapa arrogante entre los dedos.
Tu y yo unidos bajo un mismo techo
Moldeado desde el interior de cada uno
Y protegidos por el espíritu del amor.
Sobre él, enmascaramos nuestros anhelos
Y disfrutamos del momento.
Como aves enjauladas, luchamos contra nuestro destino que nos mortifica.
Y en el intento, desplegamos las alas que nos liberan
Para determinar, en nuestra consciencia, que débil son los sueños
Cuando la realidad nos arrastra.
Y sin embargo, pereceremos tras la cárcel que nos atenaza
Mas, no descansaremos, si no es unidos al otro lado de la reja.
Libera tu alma, deja que acompañe a la mía
Sentirás el placer de volar
Cuando la brisa cálida de verano es tu soporte.
Amare el día que nos separa, pues en él
Comienza el camino hacia una nueva cita contigo.
Amare la noche que nos acoge
En ella deposito mis mas íntimos deseos
Y son los tuyos los que me doblegan.
Amare la luna, cuna inmóvil
Donde sobrevive nuestro destino.
Arropado, acunado, regado con la sabia enérgica que nos invade
Vivirá y crecerá.
Dulce el néctar que empapa tus labios
En los míos, la promesa de gozarlos.
Saludos
kuko