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General: El antiyanquismo
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De: comocomo (Mensaje original) |
Enviado: 09/05/2009 21:40 |
El antiyanquismo es contagioso, pero el antiyanquismo es envidia, asi como se odia al rico del pueblo, asi tambien se odia al pais mas poderoso, si en verdad Estados Unidos fuera un pais dictatorial no existiria gente de todo el mundo viviendo en USA, en cambio Cuba es un pais muy controversial, pues es de todos sabido que Cuba es una cárcel y que no permite que nadie vea esa carcel, es que alli se ocultan muchas cosas que no son buenas, los medios de comunicacion cubana son del gobierno, eso es malo, eso se llama monopolio y manipulacion |
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che Papiyo que hiciste con tu poder de síntesis ???? (SalmonellaColi)
Si todas aquellas personas que se consideran "neófitas" en el tema y se dejan embaucar por las mentiras sistemáticas que derraman Rene Gomes y Comocomo, se dedicaran a leer estos textos que expongo, se darían cuenta de muchas cosas.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS  
(Gran Papiyo) |
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Bahía Cochinos.
Victoriosa en 1959, la Revolución cubana provocó un terremoto en todo el continente. A sólo algunos kilómetros de las costas estadounidenses se instalaba un gobierno revolucionario que iba a ser la pesadilla de nueve presidentes norteamericanos.
Rápidamente, luego que el gobierno cubano decretó la reforma agraria y que EEUU como medida de retorsión se negó a refinar el petróleo soviético, suspendiendo a su vez las compras de azúcar cubano, ocurrieron las primeras provocaciones y agresiones.
El conflicto alcanzó su punto de no retorno el 17 de abril de 1961, cuando la C.I.A., debidamente autorizada por el presidente Kennedy, organizó la invasión de la isla tratando de establecer una cabeza de playa en Bahía Cochinos.
Utilizando a los anticastristas cubanos y centroamericanos, la C.I.A. pensaba que la noticia del desembarco iba a provocar una insurreción en laisla. Pero esta vez el hermano menor de Foster Dulles, Allen, se equivocaba.
El intento de invasión fue repelido en pocos días por los milicianos cubanos y más de 1000 "gusanos" fueron tomados prisioneros.
Kennedy desmintió la participación yanqui, pero cuando las pruebas de ésta llegaron a ser irrefutables -- pilotos yanquis abatidos por la DCA cubana -- y aún cuando el proyecto de invasión le había sido legado por su predecesor Dwight Eisenhower, asumió en estos términos la responsabilidad del fracaso:
"Si alguna vez la doctrina interamericana de no intervención oculta o excusa una política de pasividad, si las naciones de este hemiferio fracasan en cumplir con su cometido contra la penetración comunista, entonces quiero que quede completamente claro que este gobierno no dudará en hacer frente a sus obligaciones ...si alguna vez llega ese momento, no está en nuestra intención recibir lecciones sobre no intervención"(43)
Desde entonces la historia de Cuba es la historia de una resistencia permanente por oponerse a los planes de intervención e injerencia tramadas por los EEUU.
Aparte de la ayuda aportada a los grupos de opositores cubanos, los EEUU idearon varios intentos de asesinato contra los dirigentes cubanos.
Obligada a resistir a la potencia más grande de la historia, Cuba no tuvo otra alternativa que defenderse con uñas y dientes. De esta manera, al azúcar y al ron se agregó otro producto "no tradicional de exportación": la revolución.
Las últimas intervenciones e injerencias tendientes a hacer todavía más difícil la situación en la que se encuentra Cuba (leyes Torricelli, Helms-Burton), prevén sanciones económicas en contra de los países que le prestaren asistencia, así como la prohibición de comerciar con Cuba a las filiales de las empresas norteamericanas en terceros países y la interdicción de atracar en puertos de EEUU a los barcos que hubiesen fondeado descargando mercaderías en puertos cubanos en los últimos seis meses.
Estas leyes fueron condenadas ampliamente por la comunidad internacional. Su carácter de extraterritorialidad viola el derecho internacional y trata de desalentar a las demás naciones en sus relaciones comerciales con Cuba, que soporta desde hace treinta años un despiadado embargo.
Los Estados Unidos se habían encargado desde 1945 de la tarea de formar a los oficiales de los ejércitos de América Latina. Estos fueron formados en la lucha contra el comunismo, al que creían ver en cada protesta social o en las numerosas luchas por mejores condiciones de vida que tuvieron lugar en el continente durante los años sesenta.
Ante el prestigio creciente de la revolución cubana, Kennedy lanzó en 1961 la idea de un vasto programa de ayuda económica y social, la "Alianza para el Progreso".
Este pequeño "plan Marshall" fue abandonado por Johnson algunos años después, cuando el esfuerzo en la lucha contra el comunismo se tradujo en la colusión abierta entre Washington y los militares latinoamericanos.
El golpe de estado en Brasil.
El golpe de estado en Brasil contra el presidente Joao Goulart inauguró una serie de golpes en los cuales los Estados Unidos aparecieron directamente implicados.
El gobierno de Goulart había manifestado su voluntad por erradicar las miserables condiciones en las que se encontraban miles de sus compatriotas. Anunció el voto para los analfabetos y su intención de promulgar una ley de reforma agraria.
El 31 de marzo de 1964 las fuerzas armadas derrocaban a Goulart asumiendo el control total del país. El presidente Johnson se apresuró dos días más tarde, el 2 de abril, a enviar a los militares "sus más calurosos deseos", agregando que el pueblo norteamericano "había observado con ansiedad las dificultades políticas y económicas atravesadas por vuestra gran nación... Admiramos la voluntad decidida de la comunidad brasileña por resolver estas dificultades en el marco de la democracia constitucional...(¡sic!)".
Las convicciones democráticas de los militares brasileños se expresaron en el curso de los años siguientes, desencadenando una brutal represión contra los movimientos y partidos antidictatoriales.
Sólo en 1979 se darían los primeros pasos de retorno a un régimen civil.
A comienzos de los años sesenta, el miedo al contagio y al ejemplo cubano habían llevado a los EEUU a apoyar todos los golpes militares a lo largo y ancho del continente. Era el retorno del Big Stick.
En El Salvador una junta militar se apoderó del poder en 1961. En Guatemala el presidente Idígoras Fuentes fue tumbado por los militares en marzo de 1963 y en Honduras el presidente Villeda, acusado de poca firmeza frente a la subversión comunista, fue derrocado en octubre de ese mismo año.
En América del Sur los militares se apoderaban del poder en Perú en julio de 1962 y el presidente ecuatoriano Otto Arosemena era derrocado a su vez en julio de 1963, por "complacencia ante el castrismo". El ejército boliviano se tomó el poder en noviembre de 1964 y en Argentina, el general Onganía en junio de 1966.
La intervención en la República Dominicana.
Estados Unidos había ocupado la República Dominicana de 1916 a 1924.
Rafael Leonidas Trujillo, hombre de confianza de Washington se había apoderado del poder en 1930. Así comenzó la "era Trujillo" con su secuela de torturas y crímenes.
"El Benefactor", dictador megalómano sólo comparable en su truculencia a Somoza, otro protegido de EEUU, permaneció en el poder más de treinta años con el beneplácito norteamericano. En 1961 murió asesinado y uno de sus acólitos, Joaquín Balaguer, transformado rápidamente en ardiente demócrata accedió a la presidencia.
Una serie de golpes y contragolpes finalizó por la convocación a las primeras elecciones realmente democráticas para diciembre de 1962.
Juan Bosch, un demócrata que había estado exiliado más de veinticinco años obtuvo la mayoría. Aún cuando se trataba de un liberal, su elección no entraba en los planes de EEUU que desconfiaban de él. En septiembre de 1963 fue derrocado por un grupo de militares quienes nombraron como nuevo ejecutivo a un triunvirato presidido por un civil, Donald Reid Cabral, hombre de confianza del Departamento de estado. Sin embargo, algunos oficiales constitucionalistas encabezados por el coronel Francisco Caamaño, derrocaron a su vez al triunvirato en abril de 1965, proclamando apoyados por gran parte de la población, su voluntad de restablecer en sus funciones al presidente legalmente elegido, Juan Bosch.
Las fuerzas armadas se dividieron, estallando numerosos enfrentamientos. Los constitucionalistas de Caamaño parecían alcanzar la victoria cuando Lyndon Johnson decidió el envío de los marines, una vez que el embajador Tapley Bennet anunció que EEUU protegería a los ciudadanos estadounidenses residentes.
El mundo asistió boquiabierto entonces a una opereta en la cual Johnson se esforzaba en negar la violación flagrante de la propia Carta de la O.E.A., debiendo disfrazar después de tergiversaciones y mentiras -- y ante la ola de indignación particularmente fuerte en América Latina, donde varias embajadas y empresas yanquis fueron saqueadas -- la intervención de EEUU con el aporte de tropas de cuatro dictaduras militares, las únicas naciones que aceptaron de colaborar con Washington en la invasión a un país soberano: los golpistas brasileños, el dictador Somoza (hijo) de Nicaragua, el Paraguay de Stroessner y Honduras.
Para los norteamericanos se trataba de impedir lo que a sus ojos sería un nuevo foco de contagio revolucionario, otra Cuba en el continente. Lo que justificaba por cierto todas las excepciones a las reglas prescritas en la Carta de la O.E.A.: "Comprendí que no había tiempo para hablar, consultar o demorarse...La naciones americanas no pueden ni deben y no permitirán el establecimiento de otro gobierno comunista en el hemisferio occidental..."(44)
En septiembre del mismo año, una resolución de la Cámara de representantes (resolución Selden) declaraba que ante la sola amenaza de peligro comunista, las naciones americanas podían y debían prestarse mutua asistencia.
Balaguer, el hombre de Washington, antiguo y fiel amigo del dictador Trujillo, fue reinstalado poco después por sus amos en la presidencia de la república. El coronel Caamaño aureolado de un inmenso prestigio morirá años más tarde en un postrer intento por desencadenar la lucha armada en la República Dominicana.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)
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Los mil días de la Unidad Popular.
El fantasma del comunismo, obsesión de Washington, pareció transformarse en realidad cuando el médico socialista chileno Salvador Allende, apoyado por una coalición de partidos de izquierda, la Unidad Popular, venció en la elección presidencial de septiembre de 1970.
Chile estaba de fiesta y desde el balcón del historico edificio de la Federación de Estudiantes de Chile, en el centro de Santiago, Salvador Allende,visiblemente emocionado se comprometió
a llevar a término el programa prometido a los electores. Luego, pidió a sus partidarios que se retirasen a sus casas en calma y tranquilidad sin responder a las provocaciones.
Ni desórdenes ni actos de violencia se produjeron esa noche y el pueblo chileno festejó sobriamente su victoria.
Pero en los barrios burgueses, en las grandes mansiones y detrás de los espesos muros de la embajada de EEUU, aquellos que siempre habían acusado a la izquierda de ser la portadora de la barbarie, afilaban sus cuchillos.
La intervención yanqui en Chile es ampliamente conocida gracias a los documentos secretos de la ITT, al informe Covert Action presentado al Senado estadounidense por la Comisión Church (1975) y diversos documentos recientemente desclasificados.
La injerencia de Estados Unidos en Chile data de mucho tiempo atrás. En 1965 la CIA implementó una operación a gran escala destinada a detectar "las potencialidades revolucionarias" en el país. Se trataba de la "Operación Camelot". La clase política chilena casi unánime condenó lainjerencia y los EEUU prudentemente optaron por bajar su perfil.
Después del 4 de septiembre de 1970, el gobierno yanqui movilizó a todos sus agentes, colaboradores e influencias conspirando contra el futuro presidente chileno, quien acababa de ganar en las urnas.
El propietario del principal órgano de prensa chileno El Mercurio y vicepresidente también de la Pepsi Cola, se reunió el 15 de septiembre de 1970 en Washington con el director de la CIA Richard Helms. Por la noche, Henry Kissinger, Helms y Nixon coordinaron un plan de acción, Track I y un segundo plan, Track II, destinados a impedir que el Congreso chileno proclamara Presidente de la República a Salvador Allende.
Según la Comisón Church, las instrucciones de Nixon al jefe de la CIA fueron precisas, escritas con su propia mano: "Salve a Chile... no hay que preocuparse por los riesgos, no comprometer a la embajada, 10 millones si es necesario... trabajo a tiempo completo... plan de acción en 48 horas..."(46)
El plan Track II tenía varias fases, desde el soborno de diputados, generales y almirantes, hasta el asesinato del comandante en jefe del ejército, que rehusó colaborar con los golpistas, cayendo en una emboscada en octubre de ese año.
Las instrucciones de Nixon indicaban que todo debía ser intentado para atajar a Allende, salvo una acción como la realizada en Santo Domingo. Nathaniel Davis, embajador de EEUU en Chile, se plantea algunas dudas acerca del proyecto de asesinato de Salvador Allende por la CIA.
Sin embargo, a pesar de todos los complots y conspiraciones Allende fue designado por el Congreso, gobernando durante tres años y aplicando el programa prometido: reforma agraria, nacionalización del cobre, de la banca, del nitrato, teléfonos, seguros,etc.
Pero Chile hacía frente a un complot invisible, "un Vietnam silencioso" dijo el poeta Pablo Neruda, quien tomando su arma, la pluma, escribió: "Incitación al Nixonicidio..."
Un plan apoyado del extranjero desestabilizó al país y desencadenó el golpe de estado el 11 de septiembre de 1973. Navíos de la marina yanqui, el Ricardo Turner, el Tattersall, el Vesol y el submarino Clamagor, se encontraban oportunamente frente a las costas chilenas ese día, supuestamente para participar en las maniobras navales "Unitas".
En pocas horas, los militares derribaron la delgada pared que separa la civilización de la barbarie, mientras Allende se inmolaba en su palacio en llamas.
La contrarrevolución victoriosa pudo entonces restaurar el capitalismo sobre nuevas bases, hundiendo a Chile durante diecisiete años en una sangrienta dictadura militar que se propuso "extirpar para siempre el cáncer marxista". Miles de opositores fueron detenidos, torturados, asesinados o hechos desaparecer.
Un proceso de transición democrática se inició en 1989 cuando el dictador Pinochet fue obligado a llamar a un plebiscito. Fue vencido y debió entregar el mando en 1990 a un gobierno elegido democráticamente, manteniendo el cargo de comandante en jefe del ejército hasta 1998, cuando aceptó retirarse... al Senado, el mismo Senado que había clausurado en 1973.
En octubre de 1998, Pinochet de visita en Gran Bretaña fue detenido en virtud de una orden emitida por el juez español Baltazar Garzón.
La actitud de los jueces ingleses y españoles desconcertó en un primer momento a todo el mundo. Algunos minutos luego de haber conocido la noticia, Fidel Castro presente en la Cumbre de los países hispanoamericanos que se efectuaba en Portugal declaró: "Pinochet no actuó solo. Los documentos norteamericanos desclasificados demuestran la participación del gobierno de Estados Unidos para derrocar a Allende. Ellos conocían el plan del golpe hasta en el menor detalle. Tienen por lo tanto una responsabilidad tan grande como Pinochet. Creo que sería legítimo que todos aquellos que elaboraron este plan, los que ayudaron a su realización y que lo apoyaron deben ser juzgados... Los padrinos de Pinochet (EEUU) han sido los responsables de 30 000 desaparecidos en Argentina; 3000 en Chile; 150 000 en Guatemala desde la invasión "liberadora" organizada por la CIA en 1954 contra Arbenz... Llevaron a cabo la "guerra sucia" contra Nicaragua que causó miles de víctimas; la sangrienta guerra contra El Salvador, país hacia el cual los EEUU enviaron un río continuado de armas, recursos, instructores militares, dinero... Estaría muy feliz si se pudiera juzgar actualmente a los responsables yanquis, que además, son más jóvenes que Pinochet".
La intervención en Nicaragua.
El 19 de julio de 1979 las tropas del F.S.L.N. entraban en Managua liberada. Dos días antes, Anastasio Somoza Debayle, heredero de una dinastía fundada por su padre en 1936, se había fugado.
El gobierno sandinista se encontró ante la enorme tarea de tener que reconstruir un país devastado. Aplicó la reforma agraria, distribuyó la tierra, desarrolló una gran campaña de alfabetización, combatiendo desde el primer día contra los ex guardias somocistas que se concentraban en la frontera hondureña.
Reagan, quien durante la carrera a la presidencia había denunciado a los sandinistas como agentes de Moscú, desató una gigantesca campaña internacional acusando al gobierno de Managua de querer apoderarse de toda América Central.
La invasión silenciosa de Nicaragua comenzó a inicios de los años ochenta. Reagan prohibió los créditos, alentó a los partidos de oposición a la vez que los financiaba, mientras armaba a los "contras" en Honduras.
En la campaña de prensa desatada, la administración Reagan ponía énfasis en el "sobre armamento" sandinista, que desestabilizaba decía Reagan, a los gobiernos "libres" de la región.
El "Irangate" demostró la intervención yanqui en Nicaragua como proveedor de fondos y de armas de los "contras", quienes utilizaban el territorio de Honduras como base principal de operaciones.
Nicaragua se desangró con la guerra decidida por Reagan, guerra llevada a cabo por "contras" interpuestos. Y el gobierno de EEUU fue condenado por la Corte Internacional de Justicia por su participación en actos terroristas tales como el minaje del puerto nicaragüense de Corinto, pero los ardientes defensores de la libertad en todas partes del mundo, es decir la mayoría de la prensa "libre" de los países occidentales no se sintó concernida.
En esta "cintura de América" como la llamó Pablo Neruda, se jugó en los años ochenta la dignidad de América Latina. Carlos Fuentes, el famoso escritor mexicano lo decía a su manera en una manifestación de apoyo a Nicaragua en México: "La guerra del tiempo, la guerra que nos concierne a todos, es llevada a cabo en estos momentos por los nicaragüenses en nombre de todos. La guerra contra Nicaragua se viste de pretextos ideológicos. Los que quieren restaurar o crear la democracia son aquellos que durante un siglo y medio no se han preocupado nada más que de sus privilegios. Se exige de Nicaragua que sea lo que ninguna nación de América Latina puede ser: una democracia como Estados Unidos, cosa que jamás se le pidió a Somoza y que no se le pedirá a los contras en el poder".
La guerra de "baja intensidad", los atentados, la violencia generalizada, la muerte de jóvenes reclutas asesinados en emboscadas tendidas por los contras, terminaron por cansar a una parte de la población. En 1990, el gobierno sandinista -- descrito como un régimen totalitario -- perdió las elecciones. La candidata de la oposición unida Violeta Chamorro, obtuvo la victoria en un país devastado por años de guerra.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)
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La invasión de Granada.
La invasión de la minúscula isla de Granada se inscribe en el marco de la nueva guerra fría que tuvo lugar en la primera mitad de los años ochenta.
Estados Unidos, que habían sido maltratados en el plano internacional -- en Vietnam, Irán, Nicaragua, Africa, Afganistán y el Líbano -- quisieron hacer saber al mundo y particularmente a la URSS y sus aliados que "América había vuelto por sus fueros".
Reagan trataba de repeler los movimientos revolucionarios en América Central y en su cruzada contra el "imperio del mal", apoyó la escalada militar de los "contras" en Nicaragua, alentando al gobierno hondureño y salvadoreño en su lucha contra la guerrilla.
Es en este contexto que EEUU invadió el 25 de octubre de 1983 la pequeña isla de Granada de Grenada (110 000 habitantes).
Un conflicto entre dos campos que se disputaban elpoder y que habría puesto "en peligro la vida de ciudadanos norteamericanos", fue el pretexto esgrimido por Reagan. Enseguida agregó para efectos de propaganda, que los cubanos construían una pista de aterrizaje en el aeropuerto de Puerto Salinas, con el objetivo de poder hacer aterrizar aviones soviéticos... Y la histeria intervencionista se apoderó de millones de ciudadanos estadounidenses.
Sin temor al ridículo, Reagan fue hasta a decir lo más serio del mundo, que la intervención había sido decidida "después de una demanda urgente" de cinco países del Caribe, cuyo peso es realmente inexistente en la escena internacional: Antigua, Barbade, Dominique, Santa Lucía y San Vicente...
La "victoria" de Granada -- más de 6 000 marines armados hasta los dientes contra obreros de la construcción cubanos -- iba a ser utilizada por Reagan durante la campaña para su reelección al año siguiente.
Por otra parte, para la administración Reagan se trataba de hacer olvidar el fiasco en el Líbano, donde algunas semanas antes, más de cincuenta soldados yanquis habían perecido en un atentado.
La operación que "liberó" a Granada de una dictadura marxista", tenía un objetivo electoral, pero al mismo tiempo, quería mostrar al mundo la determinación de Reagan en su lucha contra el comunismo.
La pequeña isla de Granada -- paraíso hoy en día de la nuez moscada y de los norteamericanos de la tercera edad -- pagó los platos rotos puesto que Reagan había decidido recomenzar una nueva guerra fría.
La operación "Causa Justa".
El 2 de octubre de 1977 un referéndum ratificó en Panamaá el nuevo tratado Torrijos-Carter. El pueblo panameño abrogaba así el leonino tratado Hay-Bunau Varilla, "jamás firmado por un panameño", como acostumbraba a decir el general Omar Torrijos.
Mediante este nuevo tratado, Panamá obtendría en el año 2000 la soberanía plena sobre el canal y sus instalaciones.
Torrijos debió vencer numerosos obstáculos y trabas que los senadores yanquis encabezados por nuestro conocido Jesse Helms habían opuesto a la firma de éste.
Una enmienda del senador De Concini agregaba una cláusula que garantizaba a EEUU el derecho a intervenir militarmente en el canal: "Si el canal fuera cerrado o sus operaciones no se pudieren efectuar... los EEUU tendrán el derecho de tomar las medidas necesaria... incluyendo el uso de la fuerza militar..."(47)
Torrijos escribió entonces a Carter quien se comprometió a "no utilizar esta enmienda como justificación legal para una eventual intervención en Panamá".
Catorce bases militares y más de diez mil soldados se encontraban en la zona del canal. Esta presencia tenía la misión -- aparte aquella de la seguridad del canal -- de proyectar el poder de fuego de EEUU sobre el continente: "Durante décadas, bajo el pretexto de proteger esta vía fluvial, esas instalaciones sirvieron como centros de entrenamiento para realizar pruebas de armamento y de tecnología militar; como bases de apoyo logístico a golpes de estado y operaciones de contrainsurreción o, para efectuar intervenciones secretas o no en Colombia, Bolivia, Granada y América Central..."(47a)
Torrijos murió en 1981 en un misterioso accidente de aviación. Los panameños le reconocen el mérito de haber, en condiciones extremadamente difíciles, logrado hacer firmar a los EEUU un nuevo acuerdo sobre el canal.
El general Noriega sucedió a Torrijos como jefe de la Guardia Nacional. Era considerado como un hombre al servicio de EEUU, trabajando después de muchos años para la CIA.
Como se sabe, Bush, que había sido jefe de la central yanqui, no se embarazó en 1989 con sutilezas jurídicas ni supuestos derechos de antiguedad en el trabajo. Ese año se había llevado a cabo la elección presidencial en Panamá. La oposición se agrupó en torno a Guillermo Endara, quien afirmó al término del escrutinio ser el vencedor. Pero bajo presión de la Guardia Nacional, Francisco Rodríguez fue designado como presidente de la república.
Una prueba de fuerza comenzó entre la oposición apoyada por EEUU y la Guardia Nacional. Noriega, que al parecer había trabajado algunos años antes para la CIA y por ello era un ex empleado de Bush, fue acusado por éste de participar en el tráfico de estupefacientes y un juez norteamericano emitió una orden de detención en su contra. Al mismo tiempo, las tropas yanquis estacionadas en el canal realizaron provocaciones tratando de intimidar a la población panameña, que en parte, apoyaba a Noriega.
El 20 de diciembre de 1989, Bush -después de haber copiosamente brindado en Malta con Gorbachev celebrando el fin de la guerra fría -- lanzó la "operación Causa Justa".
Y las tropas yanquis, sin preocuparse de justificaciones de tipo legal, invadieron una vez más Panamá, utilizando miles de soldados, la aviación y helicópteros artillados.
Pero la Guardia resistió e igual cosa ocurrió en los barrios populares donde algunas armas habían sido distribuidas. Entonces las tropas invasoras de la "Causa Justa" los bombardearon como única manera de poner fin a la resistencia. Más de 2000 muertos quedaron entre los escombros de los barrios populares calcinados.
En cuanto al líder de la oposición Guillermo Endara, éste prefirió el confortable aire acondicionado de una base militar yanqui -- prueba de la tranquilidad que reinaba en el país y de la adhesión popular con que contaba la invasión norteamericana -- para jurar como presidente de la república...
Georges Bush imponía un presidente que en los años setenta había creado una empresa domiciliada en Panamá, cuyo socio no era otro que el general Manuel Contreras, jefe de la policía secreta del general Pinochet...
Noriega fue detenido por sus ex patrones el 3 de enero de 1990 y llevado a EEUU, donde fue condenado a de 40 años de cárcel.
En mayo de 1994, Ernesto Pérez Valladares del PRD (Partido Revolucionario Democrático), el partido de Noriega, triunfó en las elecciones.
Los panameños esperan expectantes el año 2000, fecha según el tratado en la que adquirirán la soberanía total sobre esta codiciada vía fluvial. Pero el Pentágono quisiera conservar algunas instalaciones en la zona. Ello podría facilitar las operaciones de control e intervención en el Caribe y América del Sur. Más hoy en día, cuando dos otros focos de tensión considerados como peligrosos existen en la región: Colombia, gangrenada por una violencia endémica desde hace más de cuarenta años y que los norteamericanos vigilan de muy cerca debido -- dicen -- al tráfico de drogas, y Venezuela, donde el presidente Chávez, nacionalista e independiente, quiere aplicar una política que se aparta de la línea deseada por EEUU.
En todo caso, desde 1995, en abierta violación del reciente tratado Torrijos-Carter, EEUU trató de obtener del gobierno panameño su acuerdo para que algunas de sus bases militares -- Howard, Sherman, Rodman y una en la isla de Galeta -- permanecieran indefinidamente en la zona del canal.
El pretexto esgrimido por Washington fue que se crearía un Centro Multilateral Antidrogas (CMA) . Un centro supuestamente civil compuesto por 2000 militares... Los panameños fieles a la memoria del general Torrijos, se negaron a aceptar, al igual que los países contactados para formar parte del CMA, como México, Brasil y Colombia. Las negociaciones entabladas con la máxima discreción, fueron interrumpidas en septiembre de 1998.
En mayo de 1999, Mireya Moscoso una fiel aliada de EEUU, fue elegida como presidente de la república. Curiosamente, el general Charles Wilheilm del Southern Command, expresó públicamente al mismo momento sus dudas acerca de la capacidad de Panamá para mantener la seguridad del canal. Meses después, el mismo general explicaba ante la comisión de relaciones exteriores del Senado norteamericano, que el ejército panameño no estaba en condiciones de enfrentar una eventual incursión de guerrilleros colombianos. Pero fueron los propios EEUU los que disolvieron y desarmaron al ejército panameño durante la invasión de 1989.
Al Tratado Torrijos-Carter se le agregó un "Tratado de Neutralidad", según el cual, los EEUU quedan autorizados para intervenir unilateralmente desde el año 2000 si estimaran que la neutralidad del canal estuviera en peligro...
Una nueva intervención humanitaria en Haití.
Contrariamente a una idea muy expandida, la intervención norteamericana en los años noventa en Haití, no data de septiembre de 1994 ("operación humanitaria") sino de septiembre 1991, cuando el presidente Aristide fue derrocado por un golpe organizado por militares haitianos quienes contaron con la colaboración de la CIA y de la embajada norteamericana.
En 1971, Jean Claude Duvalier -- Baby Doc -- sucedió a su padre -- François Duvalier, papa Doc -- quien controlaba el poder desde 1957. Baby Doc fue derrocado en 1986, instalándose en Francia, una vez que el gobierno del primer ministro Laurent Fabius le acordó una autorización de residencia, encontrando luego un cómodo y agradable refugio en la Costa Azul donde vive en un retiro dorado.
El general Raúl Cedras, jefe de la Junta qu derrocó al padre Aristide en septiembre de 1991, había perpetrado el 172* golpe de estado desde que Haití accediera a la independencia en 1804, hace casi dos siglos.
Christophe Wargny escribió con Pierre Mouterde en 1996 un libro que lleva como sugestivo título: Apre bal tambou lou: cinq ans de duplicité américaine en Haïti, 1991-1996 (49), donde muestra la acción combinada contra Aristide -no exenta de contradicciones -- entre EEUU, los militares y la oligarquía haitiana y el Vaticano. Este último se habría popuesto a Aristide debido a su compromiso personal con la teología de la liberación.
El padre Aristide, "Titid" como lo llaman los pobres de las ciudades, había obtenido un gran triunfo en la elección presidencial de febrero de 1991. Siete meses después será derrocado.
"Titid" concentró contra sí desde el primer momento la hostilidad de cuatro grandes instituciones y centros de poder: el ejército, la oligarquía, EEUU y la jerarquía eclesiástica, siendo el Vaticano uno de los primeros en reconocer al gobierno del general golpista Raúl Cedras.
La represión desencadenada por la junta y la miseria escalofriante de la mayoría de los habitantes, empujaron a una parte de la población a buscar su salvación, atravesando las peligrosas aguas caribeñas en pequeñas embarcaciones que trataban de atracar en las costas norteamericanas. Los boat people haitianos habían hecho su aparición
Ante las dificultades para poner coto a tal éxodo, Clinton decidió -- luego de la autorización del Consejo de Seguridad de las NU -- lanzar una operación militar "humanitaria". Las tropas yanquis entraron luego a Puerto Príncipe y "Titid" pudo así volver a su país, en los barcos de la misma potencia que anteriormente había contribuido a su caída. Los marines pronto fueron reemplazados por 7 000 soldados de la Minuha (Misión de las Naciones Unidas para Haití).
Pero el padre Aristide había tenido que aceptar previamente una serie de acuerdos que le fueron impuestos por EEUU: los acuerdos de París (financieros) y de Washington (políticos y militares), firmados en agosto y septiembre de 1994.
Aristide, en el corto período constitucional que le quedaba, trató de canalizar y de responder favorablemente a las reivindicaciones populares. Al mismo tiempo que exigía que la oligarquía y la elite financiera y militar aceptara las reglas del juego de un estado de derecho.
Debió ceder en numerosos puntos. Pero Aristide era el "presidente de los pobres" y se opuso a las medidas preconizadas por el FMI y a la amnistía e impunidad que EEUU quería otorgarle a los militares culpables de crímenes.
Obtuvo luego (junio de 1995) una resonante victoria en las elecciones legislativas, pero las relaciones con Washington, que ejercía una estrecha vigilancia sobre la política llevada a cabo por Aristide, siguieron degradándose. EEUU comenzó a intervenir cada vez más abiertamente a nivel del ejército y de la policía, tratando de obligar al gobierno haitiano a que aceptara que la formación de los oficiales de estas dos instituciones armadas se realizara en Fort Leonard, en Missouri.
Luego, pusieron trabas sistemáticamente a la prosecución de procesos contra los responsables de torturas y otros crímenes, confiscando los archivos del Fraph (Frente Revolucionarios por el Avance y el Progreso de Haití). Se trataba de 160 000 páginas relatando crímenes y otras sevicias cometidas por los militares, documentos que por otra parte, implicaban directamente a la CIA y a otros servicios yanquis, tales como el DIA.
EEUU intentó imponer a Aristide la aplicación de una política neoliberal, pero "Titid" era más que reticente al respecto. Un general yanqui de la Minhua, Hugues Shelton, escribió entonces en un informe confidencial: "Las políticas populistas podrían asustar a los inversionistas potenciales y dañar la economía, alienándose de paso a la elite económica".(50)
"Titid", no pudiendo postular nuevamente a otro mandato presidencial, fue reemplazado por su amigo René Preval. Desde entonces Haití se debate entre la amenaza, el miedo y el hambre, que
golpean a un gran número de sus habitantes.
A pesar de ello, el senador republicano yanqui Jess Helms -- celoso guardián de la libertad y de la libre empresa -- tuvo la impudicia de encabezar a un grupo de legisladores norteamericanos, quienes decidieron congelar los créditos estadounidenses destinados a Haití, con el pretexto de que la búsqueda e investigaciones relativas al asesinato en 1995 de tres personalidades cercanas a los golpistas no daban los resultados esperados.
"La inmensa esperanza provocada por el presidente Aristide aparece hoy en día bastante lejana. El FMI excluyó de sus prioridades a la enseñaza, al sistema sanitario, al desarrollo rural y la reforma agraria...la delincuencia se desarrolla peligrosamente. Como si se quisiera sembrar la duda en los haitianos sobre el valor de la democracia, llevando hasta el paroxismo las frustraciones acumuladas y probar, que la lucha contra el fatalismo inspirada por la teología de la liberación desde los años setenta, conduce a una callejón sin salida."(51)
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)
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Papiyo NO SUBESTIMES a la gente
no quieras ser el maestro ciruela
porque cada uno sabra si creer
o no
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El intervencionismo norteamericano en América Latina contribuyó a forjar en esta región del mundo un vigoroso sentimiento antiyanqui. Durante casi dos siglos, el poderío de la potencia hoy en día dominante, actuó a su antojo en su "patio trasero". Estas intervenciones se acentuaron desde 1945, favorecidas por la existencia de un mundo bipolar y por la guerra fría.
El imperio no habría podido actuar impunemente, si no hubiese contado con la preciosa ayuda de los "Quislings" nativos: Castelo Branco y Costa e Silva en Brasil; Stroessner en Paraguay; Somoza, Trujillo, Castillo Armas y d'Aubuisson en América Central; Pinochet en Chile; Onganía y Videla en Argentina; Balaguer, Wessin y Duvalier en el Caribe; Fujimori en Perú, etc.
Todos, cabezas visibles de una estructura de poder en el continente que perpetúa su existencia gracias al "hermano mayor" del Norte.
Es el "hermano mayor" quien creó para sus creaturas, diversas instituciones en defensa de sus intereses comunes. Es el "hermano mayor" el que impuso la doctrina de seguridad nacional con su corolario de muerte y terror. Es el imperio dirigido por este generoso "hermano" el que decretó que la libertad no era otra cosa que la libertad de empresa, estableciendo una identidad entre la libertad y el american way of life.
La alianza entre las oligarquías latinoamericanas y Washington estaba destinada a luchar contra el enemigo interno común: la subversión comunista -- que los EEUU siempre consideraron como el largo brazo de Moscú -- y los sectores populares, que disputaban a estas mismas oligarquías un espacio político, planteando a su vez reivindicaciones de carácter social y económico.
Este statu quo imperial-oligárquico pudo ser garantizado sólo por fuerzas armadas sumisas y fieles al "hermano mayor".! Cuántos crímenes y atrocidades se cometieron para preservar el orden que el amo deseaba! Todas las causas infames, fueron apoyadas por los EEUU en el continente, aún si años después Clinton hiciera un tardío mea culpa : "Es importante que yo declare que el apoyo a los militares implicados en actos de violencia y de represión extensiva, es un error que no debemos repetir". (52)
Fueron los EEUU quienes crearon las escuelas militares -- laflor y nata de ellas era "The School of the Americas" -- donde fueron formados más de 58 000 militares latinoamericanos. Si el Pentágono organizara una reunión con sus antiguos alumnos, se darían cita seguramente los facinerosos más repugnantes de todo el hemisferio...
A partir de los años sesenta -después del triunfo de la revolución cubana -- el Pentágono asignó una tarea bien específica a los ejércitos latinoamericanos: debían cesar desde ahora de participar en la defensa continental debiendo encargarse de su "seguridad interna".
En esta trabajo sucio, EEUU utilizó los métodos de los escuadrones de exterminación de Himmler. Como se sabe, numerosos especialistas nazis se instalaron en EEUU después de la última guerra. Son ellos quienes ayudaron a la elaboración y aplicación de las técnicas de la lucha antisubversiva adoptada por los militares latinoamericanos.
Pero esta pléyade de criminales, surgida de lo más profundo del bestiario del continente, tuvo que hacer siempre frente a la encarnizada y heroica resistencia de los pobres y excluidos. No ha habido un sólo día en que esta resistencia no se manifestara.
Desde los patriotas mexicanos que combatían contra el invasor yanqui, pasando por los "mambises" cubanos, los "cacos" de Charlemagne Peralte en las montañas haitianas y los exhaustos soldados del "pequeño ejército loco" de Sandino; los combatientes guatemaltecos y los miles de indios y campesinos víctimas de la guerra antisubversiva que durante treinta años llevó a cabo el ejército de Guatemala con la bendición de EEUU, hasta los dominicanos y panameños que defendieron la soberanía de sus patrias en 1965 y 1989 contra las tropas yanquis.
Esta resistencia se manifestó también bajo otra forma en diciembre de 1998, cuando la mayoría de los puertorriqueños rechazó por segunda vez en cinco años la asimilación pura y simple a los EEUU (53). Al mismo tiempo, un poderoso movimiento por la preservación de la lengua española y de la cultura puertorriqueña sentó sus reales en la isla caribeña, sometida desde un siglo al predominio norteamericano: "Hace cien años que Puerto Rico es una colonia yanqui. Pero no han podido destruir ni su lengua ni su cultura, ¡es admirable! El imperialismo dispone de medios poderosos para destruir culturas e imponer la suya. Puerto Rico es un ejemplo. Demuestra la capacidad de los pueblos para resistir y el alto valor de la cultura. Los privaron de la soberanía y a pesar de todo resisten..."(54)
Durante los últimos años los militares han perdido aparentemente mucho poder en América Latina, pero en casi todos los países han continuado a controlar la vida política, presentándose -- como en Chile -- como los garantes de la constitucionalidad de los actos del gobierno.
Es la nueva función que el imperio les ha asignado. En el curso de la década de los años ochenta, Washington propagó la idea según la cual habrían en el continente instituciones "permanentes" y "transitorias". Estas últimas estarían compuestas por los gobiernos y parlamentos, es decir, instituciones electas mediante el sufragio universal. Junto a éstas, las instituciones "permanentes", garantizarían la reproducción del modelo de dominación imperial. Curiosamente, estas instituciones "permanentes" no son elegidas mediante el sufragio universal: el ejército, el poder judicial, los bancos centrales... todos, acérrimos defensores del modelo neoliberal en vigor.
Aún cuando Cuba sigue siendo en la actualidad el blanco predilecto de EEUU en el Nuevo Mundo, otros países, que han cometido el delito de "lesa independencia", están también en su mira: la ingobernable Colombia -- donde la guerrilla controla una buena parte del territorio y contra la cual Washington quisiera emplear métodos expeditivos con el pretexto de luchar contra el narcotráfico -- y Venezuela, cuyo presidente Hugo Chávez no goza con la simpatía del amo del mundo.
Sugestivamente, después de la victoria de Hugo Chávez en la elección presidencial última, comenzaron a aparecer artículos en la prensa "libre", alertando sobre el peligro que representaría un ex militar, que además, cometió el indecoro de ganar la elección con casi el 60 % de los votos. La "prensa libre" retuvo como circunstancia agravante contra Chávez su convocatoria a una Asamblea Constituyente en abril 1999, encargada de redactar una nueva constitución, proyecto que los venezolanos tuvieron la impudicia de aprobar con cerca del 88 % de sus sufragios. Esto era más de lo que los vigilantes celotes del orden imperial podían tolerar.
Entonces han comenzado a hablar de "jacobinismo autoritario" y de "deriva autocrática", acusando al presidente venezolano de haber puesto en práctica una "forma moderna de golpe de estado"".(55)
Después de haber inaugurado -- con la guerra del Golfo y la reciente agresión contra Yugoslavia -- una nueva era en las relaciones internacionales, los EEUU, se proponen continuar ejerciendo su predominio en América Latina y en el resto del mundo. La resistencia contra el imperio es entonces, no sólo un imperativo moral , sino que debe ir acompañada del necesario odio contra la potencia hegemónica:
"Que me sea permitido rememorar el `odio a los tiranos` que animaba antaño a los revolucionarios de 1789 y `el odio de clase` que no desdeñaban expresar antiguamente los trabajadores. Deber de odio. Sí, no tengamos vergüenza. Hoy en día la aversión prioritaria absoluta al imperialismo norteamericano ...representa para las víctimas de toda dominación, la propedéutica de una determinación lúcida y de un compromiso solidaridario activo".(56)
Javier Peña.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)
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Notas.
1. Vermont en 1791; Kentucky en 1792; Tennessee en 1796. Estos dos últimos territorios así como Mississippi, Alabama, Illinois, Indiana y Ohio, fueron adquiridos por la Unión gracias al Tratado de París de 1783. Otros territorios situados más al oeste, fueron comprados a Bonaparte en 1803.
2. Carlos Machado, Documentos, Estados Unidos y América Latina, Editorial Patria Grande, Montevideo, 1968, página 11.
3. Machado Carlos, op.cit., página 13.
4. Idem, página 15.
5. Machado C., página 18.
6. Idem, página 19.
7. Ibidem, página 23.
8. Leopoldo Martínez Caroza, La intervención norteamericana en México, 1846-1848, Panorama Editorial, México, 1985, página 19.
9. Idem, página 27.
10. Carlos Machado, op.cit., p'agina 32.
11. Carlos Antonio López, 1790-1862, presidente de Paraguay entre 1840 y 1862.
12. Ynsfran Pablo Max, La expedición norteamericana contra el Paraguay, 1858-1859, Editorial Guaranía, México-Buenos Aires, 1954, 2 vol., página 208.
13. Idem, vol. II, página 42.
14. Lemaitre Eduardo, Panamá y su separación de Colombia, Ediciones Corralito de Piedra, Bogotá, 1972, página 42.
15. Existe una historia de este episodio, La guerra de Nicaragua, obra traducida del inglés por Ricardo Fernández Guardia, Ediciones Universidad Centroamericana, San José, Costa Rica, 1970.
16. Carlos Machado, op.cit., página 41.
17. Idem, página 43.
18. Jingoísmo: "Término inglés sinónimo de chovinismo patriótico". Universalis.
19. Vial Gonzalo, Historia de Chile, vol. II (1891-1920), ediciones Santillana, Santiago de Chile, 1983.
20. Gonzalo Vial, op.cit., página 165.
21. Carlos Machado, op.cit., página 53.
22. Idem, página 55.
23. Idem, página 64.
24. Ibidem, página 66.
25. Eduardo Lemaitre, op.cit., página 75.
26. Idem, página 95.
27. Ibidem, página 128.
28. Machado C., op.cit., página 57.
29. Buneau Varilla Philippe, De Panama à Verdun, página 162 y siguientes.
30. Castor Sucy, La ocupación norteamericana de Haití y sus consecuencias, Casa de las Américas, La Habana, 1974, página 22.
31. Cardoso F.H. y E. Faletto, Dependencia y desarrollo en América Latina, PUF, 1983, página 83.
31a. Jesús Silva Herzog en "La revolución mexicana", Maspero, página 164, transcribe la requisitoria de un diputado mexicano contra el embajador Wilson:"Acuso a mister Henry Lane Wilson...de ser responsable de la muerte del presidente Francisco Madero...Acuso al embajador Wilson de haber puesto en la balanza del destino de México, todo el peso de su influencia como representante del gobierno de Washington...Lo acuso de haber amenazado con una intervención armada inminente por parte de EEUU, lo acuso de haber estado informado del golpe de estado y de haber sido parcial en favor de la reacción..".
32.Carlos Machado, op.cit., página 75.
32a Adolfo Gilly, La revolución interrumpida, ediciones El caballito, 1977, página 218.
33. Sucy Castor, op.cit., página 85.
34. Idem, página 35.
35.Carlos Machado, op.cit., página 85.
36.Du rêve à la Révolution, Solidarité Nicaragua N*3, París 1982, página 218.
37. Carlos Machado, op.cit., página 87.
38. Idem, página 89.
38a. Tulio Halpering, Historia contemporaine de l'Amérique Latine, Payot 1972, página 186.
38b A propósito del "fascismo" de Perón, es interesante la anécdota contada en sus memorias por Pablo Neruda. Vittorio Codovila, secretario general del Partido Comunista Argentino, le encargó al poeta la tarea de convencer al legendario jefe comunista brasileño Luis Carlos Prestes, que Perón era un fascista de tomo y lomo:"Pensaba que Perón y su movimiento eran una prolongación del fascismo europeo...Después de una manifestación en el estadio de Pacaembú, conversé largo con Prestes quien me dijo:'No hay fascismo en Argentina; Perón es un caudillo, pero no un jefe fascista...?dónde están las camisas pardas?...Codovila se equivoca..". Pablo Neruda, "Confieso que he vivido", memorias, capítulo consagrado a Vittorio Codovila.
39. Machado C., op.cit., página 90.
40. Ibidem, página 91.
41. Idem.
42. Idem, página 96.
43. Idem, página 101.
44. Ibidem, página 109.
45. Nathaniel Davis, Los dos últimos años de Salvador Allende, Plaza y Janes editores, Barcelona, 1986, página 18.
46. Idem, página 19.
47. Conte Porras Jorge, Del Tratado Hay-Buneau Varilla al Tratado Torrijos-Carter, Impresora Panamá, 1982, página 144.
47a Lemoine Maurice, Panama recupère son canal, Le Monde Diplomatique, agosto de 1999.
48. Wargny Christophe, Manière de voir N*33, febrero de 1997, Le Monde Diplomatique, página 68-c.
49. Editions Austral, 1996.
50. Christophe Wargny, Manière de voir N*31, Le Monde Diplomatique, página 30.
51. Idem.
52. Henri Madelin, Guatemala après l'enfer, Le Monde Diplomatique, mayo de 1999, página 21.
53. Con ocasión del referéndum del 31 de diciembre de 1998, la mayoría de los puertorriqueños (53 %) se pronunció contra la asimilación a EEUU. En el referéndum de 1993, el porcentaje de opositores a la asimilación había sido de 52,9 %.
54. Discurso de Fidel Castro en La Habana, el 11 de junio de 1999, con ocasión del I Congreso Internacional de la Cultura y el Desarrollo.
55. Ignacio Ramonet, Le Monde Diplomatique, octubre de 1999.
56. Georges Labica, Le devoir de haine, en "Maîtres du monde?", ediciones Le Temps des Cerises, página 233.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo) |
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Papiyo NO SUBESTIMES a la gente
no quieras ser el maestro ciruela
porque cada uno sabra si creer
o no (SalmonellaColi)
A nadie subestimo. NO es cuestión de "creer o no creer". Lo importante es SABER. Y para saber, hace falta informarse previamente.
Yo no oficio de maestro, ni mucho menos. Sólo me limito a facilitarles las cosas y acercarles documentación.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS  
(Gran Papiyo) |
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ahhhh te gusta jugar con las palabras ????
Estabamos hablando si la gente creería o no lo que dicen Rene, ComoComo & Cia.
asique no me digas que no es cuestión de
"creer o no creer" (me estas subestimando nuevamente).
Sabes bien que nadie va a leer todo lo que pusiste porque es larguísimo. Cada uno que discuta el tema sabra una parte o conocerá el todo, pero no podes imponerle la información que a vos te parezca. Dejá que cada uno busque lo que le interesa saber. Al que habla en el aire, sin saber, inventando cosas o situaciones perdé cuidado que se le nota la hilacha.
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Sabes bien que nadie va a leer todo lo que pusiste porque es larguísimo. (SalmonellaColi)
Estás subestimando a los participantes. 
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo) |
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jajajajajaja bueno dale Papiyo
esperemos a ver cuantos leen semejante testamento para dejarte contento
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Al final voy a tener que creer que lo unico que quieren uds
es adoctrinarnos che !
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no podes imponerle la información que a vos te parezca. (SalmonellaColi)
Yo no impongo.
Expongo. 
Qué te pasa ????? Te molesta que denuncie los atropellos de EEUU ??????
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)
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No ¿como me va a molestar eso?
Cada uno cuenta segun como le fue en el circo.
Y como ya dije vez pasada habra dias en que este de acuerdo con unos y otros dias en que me interese más lo que expongan otros.
No me gustan las imposiciones tipo "lee esto para que aprendas vos que sos de nabolandia"
No me gustan las imposiciones imperialistas.
No me gustan las imposiciones en general
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