Miguel Hernández/Corresponsal

La Habana, Cuba.- Autoridades deportivas locales denunciaron "una campaña bien organizada" para "posibilitar la salida ilegal" de deportistas cubanos, según el órgano principal del Partido Comunista, Granma, al hacerse eco de una reunión de una comisión parlamentaria que atiende esa esfera.

El rotativo reseñó que el presidente del Comité Olímpico Cubano (COC), José Ramón Fernández, acusó de ese plan a "enemigos de la revolución" dirigido "fundamentalmente" a la compra ilícita de beisbolistas y boxeadores.

El nuevo llamado sobre las deserciones, conectadas en buena parte con la llamada "industria anticastrista" en la Florida, se produce días después de conocerse por la prensa hispana de Miami la llegada a esa ciudad de otros nueve púgiles desde la isla, la mayoría ex miembros de la preselección nacional.

Unos 15 boxeadores de nivel, encabezados por el bicampeón olímpico Guillermo Rigondeaux -sancionado en Cuba luego de abandonar su delegación durante los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro junto a su colega Erislandy Lara, que un año después desertaría- llegaron este año al sur floridano, la mayoría, presuntamente a través de México.

Tanto Rigondeaux -que apareció en Miami en febrero último- como Lara habían negado hace más de dos años, a su regreso a La Habana desde Río, que no iban a desertar en la ciudad carioca donde protagonizaron el principal escándalo de esos Juegos y afirmaron que nunca habían firmado como profesionales.

Ayer la prensa floridana anunció que el promotor irlandés Gary Hyde ganó un arbitraje judicial en una corte de Miami que le confiere los derechos de conducir la carrera de Rigondeaux al demostrar que el gallo oriundo de Santiago de Cuba había firmado con él secretamente en marzo del 2007 -cuando aún competía con la selección nacional de la isla- un contrato de cinco años de validez. Rigondeaux es representado hasta ahora por el abogado cubano Tony González y la entidad Caribe Promotions.

Hay "un sistemático empeño de minar nuestra potencia deportiva" coincidieron los diputados, según Granma, que pasaron revista a los resultados deportivos de Cuba en el año que termina, evaluados como "aceptables" por la dirigencia deportiva.

Otros deportes como el voleibol, el futbol y el baloncesto, han registrado una importante sangría, un panorama del que, como regla, no ha escapado ninguna disciplina, con diversos matices: desde salidas legales para establecerse en otro país, partidas ilegales en redes de traficantes hasta abandonos de delegaciones oficiales, un peculiar desafío que ha sido enfrentado por el deporte cubano, ni siquiera indemnizado por fichajes "piratas" de clubes foráneos, y que pudiera estar obligado también a algunas fórmulas para atenuar estas fugas que las autoridades denuncian como "robo de talentos".

Fernández indicó, según Granma, al examinar la situación del deporte local y de sus protagonistas, que se trata de "dar respuesta, dentro de las posibilidades, a las necesidades existentes.

"Tenemos deficiencias y necesidades, reconoció, pero luchamos por erradicarlas y por conseguir recursos" y dijo que este año "se aprobó una inversión importante para el deporte. No duden que Cuba continuará siendo una potencia deportiva", afirmó.

En un análisis sobre el asunto de las deserciones, el sitio digital oficial Cuba debate reveló que el gobierno entrega por año, y desde el pasado ciclo olímpico, casi millón y medio de dólares destinado a premios en metálico a sus medallistas olímpicos y mundiales, una tarifa regulada y vitalicia, según el color de la presea, al margen de la inversión en la formación de sus atletas en el sistema del alto rendimiento.

El titular del COC hizo referencia a opiniones del ex presidente Fidel Castro en una de sus "reflexiones" de que "a pesar de las circunstancias adversas, nuestros atletas brillan por su calidad humana y patriótica. No llega siquiera a uno de cada diez los que sucumben moralmente a la lluvia de ofertas en un mundo plagado de mercachiflismo, vicios, drogas, doping y consumismo, en el cual nuestra patria brilla como un ejemplo difícil de imitar".