Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

LA CUBA DEL GRAN PAPIYO
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 Conociendo Cuba 
 CANCION L..A 
 FIDEL CASTRO.. 
 Fotos de FIDEL 
 Los participantes más activos 
 PROCLAMA AL PUEBLO DE CUBA 
 
 
  Herramientas
 
General: El Conflicto hegeliano
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: residente  (Mensaje original) Enviado: 19/12/2009 22:28

El Conflicto hegeliano
como herramienta para construir
el Nuevo Orden Mundial
con un Gobierno Mundial esclavista

“Estamos agradecidos a The Washington Post, The New York Times, Time Magazine, y otras grandes publicaciones cuyos directores han asistido a nuestras reuniones y respetado sus promesas de discreción por casi cuarenta años.

Hubiera sido imposible para nosotros desarrollar nuestro plan para el mundo si hubiéramos estado bajo las brillantes luces de la publicidad durante esos años. Pero ahora, el mundo es más sofisticado y mejor preparado para marchar hacia un gobierno mundial.

La soberanía supranacional de una elite intelectual y los banqueros mundiales es seguramente preferible a la autodeterminación nacional practicada en los pasados siglos”

David Rockefeller, fundador de la Trilateral Commission, durante un discurso ante los popes de los Medios americanos, en Junio de 1991

****************

En nuestras series de notas en La Historia Paralela acerca del Nuevo Orden Mundial, y en la nota en la Edición anterior titulada “La trampa del Nuevo Orden Mundial y la complicidad de las izquierdas y derechas en el complot de dominio global esclavista”, que usted puede leer haciendo click en el hipervínculo “Sergio Graziano” al comienzo de esta nota al lado de mi foto, traté abundantemente el tema de la conspiración esclavista de una elite tecnocrática supranacional cuyo frente visible son las Naciones Unidas y su red de organismos y agencias asociadas y ONGs con “status consultivo” como lo son en la Argentina RED SOLIDARIA de Juan Carr y RED para el DESARME, entre muchas otras.

Su estrategia para lograr el gobierno mundial es producir gradualmente el “cambio social”, la “reingeniería social” y el control de la población y su táctica la co-optación e infiltración de todos los estratos de gobierno y de la sociedad civil, con el fin de introducir los conceptos subversivos generalmente agrupados en la AGENDA 21 de Naciones Unidas en las constituciones nacionales y provinciales, así como a nivel municipal y también, principalmente en los programas de estudio en las escuelas.

Esta conspiración tiene ya centurias y según John Robinson en su libro “Proof of Conspiracy” (1798):

“Su propósito es arrancar de raíz toda religión y la moral ordinaria, abolir las distinciones entre las naciones, disminuir el patriotismo y dominar el mundo”

Y de acuerdo al Presidente de la Universidad de Yale en 1798, el Dr. Timothy Dwight:

Pronto, los conspiradores, encabezados por los popes de la banca internacional y la industria descubrieron que mediante el conflicto hegeliano en política nacional y en política internacional no solo podían controlar a la población mundial y decidir el destino de los países sino que podían apoderarse de los recursos naturales esenciales como la minería y el petróleo.

Así, innumerables guerras fueron planeadas y causadas por esta elite esclavista, incluyendo a la Primera y Segunda Guerras Mundiales y en el mundo político actual, en un alarde de refinamiento esencial de sus tácticas, la elite supranacional ha logrado que las izquierdas y derechas, como armadas ignorantes, se enfrenten y destruyan en un conflicto dialéctico planificado y controlado, lo cual produce una y otra vez “síntesis” favorables a los propósitos globalistas.

El caso paradigmático de un agente de cambio a gran escala es el de Cuba.

Cuba representa el supremo éxito de la elite globalista supranacional al establecer en una isla “aislada y bloqueada” la factoría y el órgano de deconstrucción cultural y subversivo de los valores tradicionales como “producto de exportación” a Sud América y África, sin posibilidad (ni voluntad) de su neutralización por potencias occidentales, ya que Cuba, convenientemente financiada durante décadas por la URSS, fue el vehículo de exportación del virus revolucionario esencial en el contexto del sistema de oposición política hegeliano funcional a la elite tecnocrático-financiera y al complejo militar industrial y petrolero.

Por eso los Estados Unidos, dominados por esa elite supranacional, no aplastó al puñado de sucios guerrilleros de pacotilla que derrocó a Batista, un tirano también de pacotilla con un ejército de pacotilla.

Estados Unidos perdió adrede la oportunidad de hacer de Castro un aliado (al igual que rechazó todos los intentos de Ho Chi Min por recibir el apoyo de USA, haciendo que finalmente Vietnam cayera en poder de los chinos y rusos) y toleró e incluso alentó la acción revolucionaria, ayudando a establecer para el mundo ese mito ridículo de una “revolución triunfadora”.

La Elite Tecno-sociocrática esclavista necesitaba a Cuba como antagonista y la crisis de los misiles no fue más que un acto de una obra tragicómica, pero muy bien escrita.

Nunca hubo tales misiles ya que la crisis fue planeada y usada para que el mundo aceptara la “guerra fría”

Tal vez Castro haya intuido o tal vez le informaron que Cuba servía a las elites de las dos potencias.

¿Alguien puede creer que de haber sido “necesario” USA no podría haber liquidado a Castro o derrotado a su ejército en una semana?

Cuba fue solamente un títere necesario en el esquema elitista de dominio, que permitió subvertir Sudamerica para venderle armas, prestarle dinero e impedir su desarrollo. (Por eso me pregunto que hará la elite supranacional con Brasil, que amenaza con transformarse en potencia, y una potencia con ideas propias. ¿Hasta que punto la elite dejará despegar a Brasil? ¿Acaso Lula no constituyó una sorpresa al actuar “racionalmente” y apoyar al capital en su país en lugar de espantarlo? ¿Acaso esto estaba en los planes de la elite esclavista? ¿Acaso ellos no pensaban que Brasil retrocedería con un Lula izquierdista como lo hizo Argentina con el innombrable K, que destruyó hasta sus propias fuerzas armadas, su producción de carne, trigo y leche, entre otras cosas?)

En la actualidad, si bien Cuba sigue siendo la inspiración de miles de ideólogos y activistas de “izquierda” o “anti-imperialistas” y de nuestros propios “progres” que gustan de ir a la isla a fornicar sus bellas mulatas por centavos, representa más una molestia para el mundo o un chiste obsoleto.

Lo tragicómico es que los mismos revolucionarios ni siquiera sospechan que han sido horriblemente manipulados y que han servido al más peligroso imperialismo y elitismo supranacional, el que decían combatir.

Se puede decir que Castro, Che Guevara y Firmenich trabajaron para Rockefeller sin saberlo.

Pero de hecho, la semilla que sembraron los cubanos comunistas en Sud-América y en África se ha multiplicado, ha crecido y todavía, aunque morigerada y adecentada, actúa con eficacia como uno de los “bandos en contraposición” según el esquema hegeliano diseñado por la elite tecnocrático-financiera y del complejo militar-industrial, petrolero y farmacéutico transnacional.

Así, la izquierda inspirada en la revolución cubana y el Che Guevara actúa como permanente herramienta de deconstrucción cultural y la elite supranacional ha mantenido a este sub-continente en la pobreza y el subdesarrollo, con sus poblaciones ignorantes y manipulables así como con sus recursos naturales intactos para futuro uso.

En un clásico esquema hegeliano, ante el temor y protesta de la ciudadanía por el advenimiento de un gobierno revolucionario de izquierda (tesis) la elite supranacional apoyaba los golpes de estado de gobiernos militares anticomunistas apoyados por gran parte de la población (antítesis) hasta que su permanencia en el poder se tornaba insostenible por sus propias contradicciones, errores y corrupción y luego los traicionaba apoyando a políticos de izquierda “reciclados” con pasado guerrillero pero actualmente a las órdenes de la elite para aplicar la deconstrucción cultural y entrega de soberanía (síntesis) y este esquema se repetirá tantas veces como sea necesario.

Cuando el populista de izquierda fracase económicamente y sobrevenga el caos o peligro de guerra civil, la elite empujará al poder a un conservador o “progresista” disfrazado de conservador, como lo fue Menem y como lo es Macri en Argentina.

Esta síntesis siempre habrá erosionado los valores tradicionales y habrá dado otro paso hacia la pérdida de soberanía y tradiciones en el país de que se trate.

Veamos cómo funciona este sistema….

Sabemos, por su misma definición, que la dialéctica hegeliana contempla la confrontación de dos “entidades ideacionales” en una dinámica de contrarios.

Sabemos que ninguna de las entidades en confrontación, llamadas la tesis y la antítesis están relacionadas dicotómicamente (entendiendo dicotomía como la división en dos partes de una cosa).

Su conflicto es superficial y resultará en la síntesis de las dos en una nueva identidad ideacional.

Pero la síntesis amalgamará las peores características o condiciones de las entidades en la confrontación original.

Esto es astuta y diabólicamente usado por las autoridades políticas en cada país y por la elite globalista en una dimensión mundial y siempre, cuando este esquema es aplicado en política y gobierno, este gana poder y el ciudadano pierde valores, libertades, derechos y hasta la soberanía del país.

En nuestra nota “Entendiendo a la criminalidad como instrumento de deconstrucción cultural como parte del Complot Global de la UN” Parte 8 de la serie de notas en La Historia Paralela tituladas “Progresismo: veneno destructor de los valores morales, religiosos, tradiciones e independencia de las naciones con el fin de instaurar un Gobierno Mundial esclavista a través de las Naciones Unidas con la complicidad de políticos locales”, hemos visto como el conflicto hegeliano es usado por las autoridades para controlar a la población a través del uso de la criminalidad como objeto de deconstrucción cultural y control social.

Copio de mi nota:

“Y esta mis amigos, es la síntesis hegeliana hecha realidad:

Tesis: criminalidad, muerte y sufrimiento

Antítesis: reacción civil y pedido al gobierno de medidas más duras, un cambio en la ley penal.

Síntesis: las medidas del gobierno son en realidad un “cambio social” que afecta a los ciudadanos quitándoles sus derechos y libertad sin solucionar, desde ya, el problema del crimen.”

Así, el gobierno ha creado un conflicto con sus políticas públicas criminales y logra la “síntesis” funcional a sus intereses o metas.”

Mi pregunta es:

¿Porqué los comunicadores de la televisión y de las radios y diarios importantes no tratan este tema o es que ni siquiera entienden la dialéctica hegeliana?

Muchos pueden estar a las órdenes de multimedios funcionales a un Gobierno Global.

El apoyo de La Nación y Clarín a los programas de las Naciones Unidas así parece indicarlo.

¡Se equivocan!

¡El Gobierno Mundial será esclavista!

Lo primero que hará será tomar el control de los grandes medios.

No como el títere y mequetrefe K pretende hacerlo.

Ellos son realmente poderosos.

Amigos míos, quién tenga contactos en el mundo periodístico puede realizar una gran labor en beneficio de la humanidad defendiendo la causa de la libertad y alertando a los comunicadores respecto a lo que sucede y creo que en este momento, ese es el mayor servicio que se puede hacer a la sociedad libre.



Primer  Anterior  2 a 2 de 2  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: residente Enviado: 21/12/2009 05:54


 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados