El terrorista Posada Carriles viajará a El Paso en el avión de un traficante vinculado a la CIA
No
sólo el terrorista Luis Posada Carriles podrá viajar en avión a El
Paso, Texas, en febrero, para presentarse ante la jueza Kathleen
Cardone que lo autorizó a violar las reglamentaciones antiterroristas,
sino que el viaje está patrocinado por un traficante de droga y armas
vinculado al escándalo Irán-Contra.
Todas las fuentes consultadas
concuerdan en decir que Alberto “Al” Pardo Herreros, 82 años, quien
provee el jet privado que transportará a Posada es el mismo individuo
cuyo nombre aparece en los archivos en relación con el trafico de armas
contra cocaína manejado por el terrorista cubano-venezolano.
Bajo
el nombre de Ramón Medina y con papeles falsos, el agente de la CIA
Luis Posada Carriles, prófugo de la justicia venezolana, fue jefe de
logística en la base de la fuerza aérea salvadoreña de Ilopango en la
operación de tráfico a favor de la Contra nicaragüense.
Son los
propios defensores de Posada que revelaron el nombre de Herreros al
pedir a la jueza Cardone que autorizara al terrorista usar un avión
privado para trasladarse a El Paso por no poder subir en un vuelo
comercial. Indicaron entonces que Herreros asumiría los gastos
de transporte.
UNO DE LOS MÁS ACTIVOS “CONTRATISTAS” DE LA CIA
En
los archivos desclasificados de la CIA, el nombre de Herreros se
publica en relación con Pedro Luis Díaz cuando esté traicionó después
de su destitución como Jefe de la Fuerza Aérea cubana.
Díaz Lanz
se sumó luego a la CIA y realizó, desde EE.UU., bombardeos a Cuba que
causaron varios muertos. Lanz se suicidió el 26 de junio del 2008, en
Miami, al dispararse una bala en el pecho.
Herreros reaparece en
los años 70 en Africa Central donde se convierte en un conocido
traficante de armas, abasteciendo a distintas bandas armadas cuyos
intereses corresponden a los de la Agencia Central de Inteligencia.
Manejó sus operaciones bajo la cobertura de la firma Lomax International Inc., basada en Miami, Florida.
A
mediados de los años 80, según un informe del Inspector General de la
CIA, Herreros ha sido uno de los más activos “contratistas” de la
operación de abastecimiento de la Contra nicaragüense. Era socio de un
tal Michael Palmer, a través de dos empresas, Vortex Air International
y Universal Air Equipment Leasing.
Ambas empresas llevan huellas de la Compañía.
El
mismo informe señala que fuentes de las aduanas norteamericanas
caracterizan a Herreros como narcotraficante, una actividad que
desarrolló bajo el nombre comercial de Vortex Sales and Leasing.
El socio de Posada, Michael Palmer, es un connotado narcotraficante que la agencia antidroga norteamericana usó como informante.
El
14 de noviembre de 1986, un cable de la agencia AP, redactado desde
Washington, identifica a Herreros como un individuo que el Departamento
de Estado señala como dueño de la firma Vortex y contratado para
abastecer a la Contra.
A finales de los años 90, Herreros fundó
Vortex II, dedicándose a vender fusiles de asalto AK-47 de fabricación
búlgara, desde sus oficinas de Miami, con la protección de politiqueros
asociados a la mafia cubanoamericana.
Se dedica ahora a proveer transporte en jet privado a cualquier parte del mundo.
Fuente: http://www.cubadebate.cu/opinion/2010/01/20/posada-viajara-a-el-paso-en-el-avion-de-un-traficante/