Diez ciudadanos estadounidenses fueron detenidos en la frontera haitiana bajo la sospecha de
haber "robado" 31 niños en el marco de una red de tráfico humano, anunció el sábado un ministro del
gobierno en Puerto Príncipe.
Cinco hombres y cinco mujeres con pasaportes estadounidenses fueron detenidos el viernes en la
noche en la frontera con República Dominicana con niños de entre dos meses de nacidos hasta 12
años, anunció el ministro de Asuntos Sociales y del Trabajo, Yves Christallin.
La portavoz de la embajada de Estados Unidos no respondió para reaccionar a la información al
ser contactada por la AFP. Los adultos íban acompañados por dos ciudadanos haitianos y según el
ministro Christallin también están implicados dos pastores, uno en Haití y otro en Atlanta, sureste
de Estados Unidos.
"Este es un robo, no una adopción", recalcó el ministro haitiano. Christallin dijo
que los ciudadanos estadounidenses no tenían los papeles apropiados para sacar a los niños
legalmente del país, tampoco cartas de autorización de los padres. Según el funcionario los niños
provenían de distintos lugares.
"Lo que es importante para nosotros en Haití es que un niño necesita tener una autorización de
este ministerio para abandonar el país", dijo el ministro. Las autoridades haitianas habían
advertido sobre sus temores de que traficantes de niños se aprovechen del caos que que reina en el
país después que el 12 de enero un terremoto arrasó con Puerto Príncipe, ciudad sobrepoblada donde
murieron unas 170.000 personas.
También levantaron sus preocupaciones sobre agencias legitimadas en asuntos de adopción, de las
cuales se teme que han acelerado los trámites para sacar del país rápidamente a huérfanos. Los
estadounidenses fueron identicados como miembros de un grupo caritativo de Idaho llamado "New Life
Children's Refuge" (Refugio para la Nueva Vida de los Niños).