El 6 de junio de 1972, los tribunales de California, Estados Unidos, concedieron la libertad bajo fianza a Angela Davis, luchadora por la igualdad racial y defensora de los derechos de los trabajadores, también tuvo una amplia participación en la lucha por la igualdad de la mujer.
Angela Davis, como miles de ciudadanos estadounidenses, fue víctima durante los años sesenta y setenta de una brutal persecusión por sus ideas políticas. Antes de ser enviada a prisión, Angela Davis había sido destituida de su cargo como profesora de la Universidad de California.
Angela Davis se convirtió en un símbolo de la resistencia contra la discriminación política y social durante muchos años.