Estos días viví sensaciones extrañas....me dije "no soy yo"-----¿no soy yo?....

rompí las promesas de control y silencio....¿ era yo?....¿quién soy yo?...

No soy afecta a ver los partidos de fútbol me molestan en la radio mientras viajo, intento luchar cada día contra el enano triunfalista que llevo dentro, sé que eso no soy yo, sé que eso me vino de afuera como los prejuicios que aún tengo e intento no tener más....porque no soy yo. A la vez me siento fuerte y a cada paso me pregunto, cómo seguir siendo fuerte sin ser agresivo?...intento cuidar eso y es un ejercicio  que vengo realizando desde hace algún tiempo atrás. Uso la cabeza, pero esta cosa irracional me sobreviene a veces como un animal salvaje e indomable, en el momento sin poder en el momento exacto poder controlarlo, no es ira, no soy irascible, es ansiedad es miedo....sí es miedo....miedo a qué me pregunto?, miedo a que un jugador profesional patee y no acierte el gol?....me pasa con el tango....pero son sensaciones diferentes, ver bailar bien un tango me energiza y me produce sensaciones indescriptibles, llenas de libido, quizá porque el tango lleve en sí toda una historia de inmigrantes y orillas, márgenes de los que también vengo...es parte de mi biografía y de alguna manera forman parte de mi....

Quizá con el fútbol suceda lo mismo, también soy yo esa parte de mi que no me gusta tanto como aquella otra que me  saca lágrimas de emoción.

Me pregunto entonces cuánta fuerza "mental", que  sí es ajena, pongo a cada momento para no reaccionar agresivamente ( que no es ira, sino firmeza), para controlar eso que también  soy  yo que se me escapa frente a cosas que en algunos momentos desestimo y en otros exagero?.

No soy amante del fútbol, pero me pongo loca en los mundiales, soy amante del tango pero no me animo a bailarlo y así transcurro la vida, entre la lucha de ser yo y de no ser yo: supongo que nos pasa a todos o no? ....no lo sé , para saberlo habría que estar dentro de cada uno y eso no se puede , como tampoco se puede no ser agresivo a veces en un mundo que está lleno de violencia, de la simbólica ( que es la peor porque apaña y discrimina entre blanco y negro, entre bueno y malo, entre lindo y feo, entre mejor y peor de la cual ni siquiera somos concientes).

Los seres humanos somos complejos, vaya si lo somos!, pero si el mundo fuera un lugar "vivible" donde cada quien fuera aceptado en sus virtudes y miserias, una pelota de fútbol. sería nada más que una pelota de fútbol y el tango sería un baile más lleno de pasión.

Lo que nos aglutina a los argentínos tras esos símbolos, creo yo, es nuestra condición general de marginales, porque descendamos de quien descendamos ( indios, europeos o asiáticos) en esta tercera generación, venimos de la injusticia esencial de este sistema que en mi parecer, es bastante esquizofrénico.

 

la seguiré otro día

besos

ALBI