|
General: El lavado de Cerebro.
Elegir otro panel de mensajes |
|
De: ELSANTANECO (Mensaje original) |
Enviado: 19/08/2010 09:40 |
El lavado de Cerebro.
¿Cuántos de ustedes han pensado, “cavilado o filosofado” sobre lo que significa el “lavado de cerebro”.
Una vez, dos religiosos, mozos de mi padre, que discutían por la religión, uno católico y el otro protestante, el primero le dice al segundo: “Vos no me vas a Lavar el cerebro”. Regularmente, la fuerza armada salvadoreña usaba, tanto en sus panfletos como en su táctica de tortura psicológica, la expresión: “Los comunistas te lavaron el Cerebro”.
Hemos también, para no ir muy lejos, acá en este foro escuchado, a los señores cubanos anticastristas decir: “A ustedes los castristas les han lavado el cerebro”. Nosotros podemos decir lo mismo de ellos. ¿Pero “a ciencia cierta” quienes tienen lavado el cerebro, ellos o nosotros? ¿Quién tiene el cerebro lavado, quién es de derecha o quién es de Izquierda?
Si no investigamos los orígenes psicológicos y hasta neurológicos de esta palabra podemos caer en un círculo vicioso, como los religiosos, a saber, que todos y cada uno de ellos procesa la religión correcta, sin poderlo demostrar.
¿Tiene el Cerebro lavado la derecha o la Izquierda?
¡La respuesta, si bien es cierto que es simple, pero no es fácil de simplificar! Un millonario, rico capitalistas que vive de la plusvalía de la clase trabajadora, no tiene el cerebro lavado por ser de derecha, porque él defiende sus privilegios e intereses cómo capitalistas.
Mientras tanto, un obrero trabajador que vive del sudor de su frente, y que apenas llega a fin de mes con lo poco que gana, y sí es de derecha, es porque tiene el cerebro lavado. Los cubanos balseros, que siendo originarios de la clase trabajadora, y que gracias a las plusvalías de la inmensa mayoría de la clase trabajadora de CUBA ellos o ellas pudieron estudiar en CUBA, y hoy son de derecha, en verdad les lavaron el cerebro.
¿Qué es el lavado de cerebro, pues?
Según la definición, tanto psicológica como neurológica, es el lavado de cerebro, hacer que una persona siga ciegamente la decisión de otros, sin ser conciente de ello. Es una persona manipulada sin voluntad propia, sino la de quién la manda o la da ordenes.
Nuestro cerebro está complejamente regido por una cantidad enorme de conexiones “eléctricas” entre células cuyas señales son transformadas en sustancias químicas. En la parte frontal (Lóbulo frontal) es donde guardamos nuestra personalidad cómo también nuestra conciencia. (De qué somos concientes) Pero también acá tenemos nuestra intuición, y la información que acá se procesa, puede trasformase para nosotros en actos concientes o solo emotivos (inconcientes). O sea, actuamos movidos por nuestras emociones sin haber desarrollado plana conciencia.
René Descartes decía: “Yo pienso, por eso soy Yo”.Podemos ser movidos por nuestras emociones sin pensar, lo cual significa que nos mueve el mundo exterior y no nuestro interior: no somos nosotros. No somos nosotros porque otros piensas por nosotros lo cual es un lavado de cerebro, porque otros manejan a su antojo nuestra conciencia a través de nuestras emociones.
Este es el caso de los Soldados americanos, que van a morir a tierra extrañas sin saber el porque, solo saben que deben de obedecer ordenes. (Lavado de cerebro) |
|
|
Primer
Anterior
2 a 14 de 14
Siguiente
Último
|
|
Me Pregunto, Don Ignacio, sí usted no tiene lavado el cerebro. Bueno si usted es un médico capitalista, dueño de una o de varias clínicas de donde extrae plusvalía de sus trabajadores o subyugados, entonces comprendo, no solo que sea de derecha, sino enemigo de CUBA Revolucionaria.
Mire, Don Ignacio, en el canal 24 horas, que a veces pasan documentos muy interesantes, estuve mirando uno, sobre especialistas en política de “convencimiento”. Son expertos que ayudan a los políticos a usar palabras y freses adecuados para convencer a la gente. `
Estos expertos que no usan a la conciencia de la gente como “motor de causa” sino sus emociones, igual que la religión, su fin es hacer actuar a la gente sin pensar. La gente apoya a un líder porque cree que es bueno o solo porque creen que es lo “correcto para la patria”, pero sin saber más y sin pensar. Usando la filosófica de: actuar y después pensar.
¿Pero como funciona esto?
¡Hoy la televisión, el Internet, etc., son medios que mueven, como el más perfecto lavado de cerebro, las voluntades de la gete! Y la idea inicial, la cual nace con la idea empresarial de los anuncios comerciales, es hacer que la gente actué sin pensar. Ejemplo, una mujer mira, un bello vestido, en un anuncio comercial; lo ve tan bello en la foto, que no piensa, si su dinero le alcanzara, o si es de buena calidad, sino que simplemente corre a comprarlo.
Lo mismo pasa con los políticos. Venden una idea para que la gente la compre sin saber si será buena o mala. Y son los politólogos y otros expertos en el lenguaje que están detrás, inventando y analizando cada palabra y cada frase que será más fácil para convencer a la gente.
En concreto, es así, como los poderosos medios, con sus verdades a medias, y mentiras “hechas” verdades “eternas, se conviertes en modernas maquinas para lavar cerebros. ¿Don Ignacio, no estará lavado su pobre cerebro? |
|
|
|
Don Ignacio está sentadito jejejeje |
|
|
|
Los cubanos del "exilio" historico le lavan el cerebro a los nuevos Balseros, y nuevas generaciones de emigrados desde CUBA.
A Don Ignacio la guste ver todos los días la TELE.
|
|
|
|
Magnetoestrella pone en duda teoría de formación de agujeros negros
Un superimán cósmico, conocido como magnetoestrella, desconcierta a los astrónomos y pone en duda la teoría actual de la formación de agujeros negros, ya que se formó a partir de una estrella muy masiva.
Astrónomos encabezados por Ben Ritchie de la Universidad Abierta en Milton Keynes, en Reino Unido, analizaron con la ayuda del "Very Large Telescope" (VLT) del Observatorio Europeo Austral (ESO) en Cerro Paranal, Chile, el cúmulo estelar Westerlund 1, localizado en la constelación austral de Ara a unos 16.000 años-luz, donde además de cientos de soles gigantes, este cúmulo contiene un objeto muy raro: una magnetoestrella.
Cadáveres estelares
Las magnetoestrellas son cadáveres estelares que poseen un campo magnético extremadamente fuerte y forman parte de una nueva clase de objetos astronómicos, que fueron descubiertos hace pocos años. El campo magnético es alrededor de 1.000 millones de veces más fuerte que el de la Tierra.
Las magnetoestrellas forman parte de las estrellas de neutrones, que son los remanentes estelares de una estrella gigante. Sin embargo, en cuanto a su creación no existe aún una teoría de aceptación general. En la Vía Láctea, la galaxia a la que pertenece la Tierra, se conocen sólo unas pocas magnetoestrellas.
La vida de una estrella
Los astrónomos encabezados por Ritchie querían determinar cuán masiva tiene que ser realmente una estrella para convertirse en un agujero negro y cuán masiva era la estrella precursora de la magnetoestrella del cúmulo Westerlund 1.
Debido a que las estrellas gigantes del supercúmulo estelar se formaron todas al mismo tiempo, el precursor de la magnetoestrella debe de haber poseído más masa que las estrellas que aún brillan allí. "Como el tiempo de vida de una estrella está directamente relacionado a su masa, mientras más masiva sea una estrella, más corta será su vida-, si podemos medir la masa de cualquier estrella sobreviviente sabremos con seguridad que la estrella de vida más corta que se convirtió en el magnetar debió ser incluso más masiva", dijo el coautor y líder del equipo Simon Clark, según un comunicado de la ESO. "Esto tiene gran importancia pues no existe una teoría aceptada sobre cómo se formaron estos objetos extremadamente magnéticos", añadió.
Incógnitas pendientes
Los astrónomos estiman que los precursores tienen una masa entre 35 y 40 veces mayor que el Sol del Sistema Solar al que pertenece la Tierra. Según la teoría actual, las estrellas que tienen una masa equivalente a 25 masas solares deberían finalizar su existencia colapsando en un agujero negro.
El precursor de la magnetoestrella debería perder de alguna manera alrededor del 90 por ciento de su masa antes de explotar como supernova. Esto es muy difícil de explicar con los modelos vigentes del desarrollo estelar.
"Por lo tanto, se formula la difícil pregunta de cuánta masa tiene que tener una estrella para colapsar finalmente en un agujero negro, cuando esto no lo logran estrellas con más de 40 masas solares", subrayó el coautor Norbert Langer de la Universidad de Bonn, Alemania. (dpa)
Editora: Emilia Rojas
http://www.diariocolatino.com/
|
|
|
|
De: Picaro |
Enviado: 20/08/2010 19:39 |
Yo todavia estoy trabajando en entender Socialismo Cientifico, para ponerme a explorar si existe o no los Labao de Celebos, Limpiesa Ionica, terapia usando imanes, pulseras magnetica y los dose pasos de alcolicos anonymos. Es mucho trabajo en Ingles se llama
Quackery como el sonido de los patos. Quack Quack Quack. power to the people |
|
|
|
La complejidad de la ciencia es igual a la complejidad de la lógica. Es como decir, 1+ 1= 1 Tan compleja es la ciencia, como su mismo campo de Estudio. Se nos ha dicho que la fantasía no tiene límites. ¿Pero quién ha dicho que la ciencia lo tenga? La mente es capaz de agregar fantasías sin limites decía Federico Engels, pero la ciencia, nos ha demostrado que es capaz de descubrir cosas sin limite; y mientras más se descubre, se nota que más falta por descubrir.
Hay dos campos ampliamente complejos para la ciencia, que es el universo estelar y el cerebro humano. Y a pesar que se ha tratado de minimizar, el complejo tejido cerebral, los neurólogos, psiquiatras y demás investigadores en la materia, hay cosas de nuestro cerebro para las cuales aún no tienen respuesta. Lo mismo podemos decir de nuestro universo, que mientras una teoría está por consolidarse aparece otra que la pone en duda, como es el caso que vemos en este artículo, de las “Magnetoestrellas”.
Nuestro Universo está compuesto por millares de estrella. Lo mismo es nuestro cerebro que está compuesto por cerca de 10 y 100 millares de células nerviosas. Nuestro cerebro además está repartido como un edificio de dos plantas, entre el “gran cerebro” y el “pequeño cerebro”. Ambos están divididos por varias y diferentes secciones o “departamentos”. Como una especie de “gran Biblioteca” en donde cada sección almacena sus propios datos y utilidades que hacen que todo el sistema funcione bien (La vida). Podría aburrir a los lectores del Papiyo, en una larga explicación de anatomía cerebral, pero no es mi intención.
Si nos metemos a otra ciencia, no menos compleja pero más “elástica”, (la economía, y las ciencia sociales) vemos una basta complejidad con descubrimientos hasta hoy “en pañales” o poco avanzados. Sí leemos los economistas clásicos, desde Adam Smith, pasando por Marx y otros, notaremos que a casi todos les gusta comparar a una nación con el cuerpo humano. ¿Nos podemos preguntar el porque?
¡La vida, pero sobre todo la vida animal, según la ciencia, ha evolucionado y con dicho evolución se ha ido, tal vez no perfeccionando, pero sí asiéndose más compleja! El Cerebro para que haga su trabajo de procesarlo todo, de ahorrar, aprender, ser y sentir debe realizar una compleja labor cooperativa. El cerebro humano es una realidad gracias a los millares de células que tiene, las cuales deben de trabajador muy bien coordinadamente para ser un hecho lo que conocemos como (Vida)
En este sentido el cerebro humano solo puede ser tal, (Humano), es decir, evolucionar de los demás animales, gracias a la comunicación entre los grupos primitivos.
Ahora bien, acá vemos concretamente la respuesta del porque los economistas, comparan al cuerpo humano con una nación. A saber, una nación debe de estar muy bien organizada para poderse desarrollar. Cada ciudadano de una nación es una célula, la cual compone dicho cuerpo nacional.
Las instituciones de una nación deben de funcionar coordinantemente entre ellas, pero asimismo con el resto de la sociedad y con todo el pueblo. Una institución no es una célula, pero sí una sección del cuerpo nacional. No obstante, el principio anatómico, que acá estamos analizando es el trabajo conjunto entre las células, entre millares de células trabajando conjuntamente y bien coordinadas.
Pero así como el “campo” cerebral tiene un sistema, “El sistema nervioso”, así una nación tiene un sistema: (El sistema Capitalista). Marx fue el genio que descubrió, (ciencia en mano) las contradicciones del sistema capitalista. Y una de las más grandes contracciones del sistema capitalista, es la necesidad de socializar a la sociedad para su mejor desarrollo, pero adoctrinar a los mismos, con el egoísmo. El capitalismo se ha convertido, y no nos hemos dado cuenta, en la Doctrina del egoísmo. El capitalismo predica una doctrina, enseña una doctrina, la impone a los pueblos, como regla única y valida (El Egoísmo).
El Egoísmo, como la demencia vascular, el Alzheimers, u otro tipo de demencia cerebral, enferma a las naciones.
Un paciente, que tenia 35 años de casado, su espesa testificada que cada uno de esos años, el paciente había sido el hombre más tolerante, pasivo y amable que ella había conocido. Después de un lamentable Accidente el paciente sufrió daños en el lóbulo frontal, habiendo cambiado totalmente de personalidad, y quedando malhumorado y altamente agresivo. La Esposa se vio en la obligación de abandonarlo. 2 años más tarde muere el paciente, por el consumo excesivo de alcohol. Y es cuando por una desgracia u otra cosa, se “des –coordina” (se interrumpe el colectivismo) el trabajo entre las células y sus “respectivas secciones” se producen enfermedades.
No es de extrañar que el capitalismo, pues, según este principio sea un sistema enfermo, dado que no existe una buena coordinación entre “células”, (la gente y la s instituciones) La contradicción capitalista está pues entre una necedad “biológicamente” natural y el interés de un pequeño grupo de la sociedad llamados capitalistas que hacen el papel, real de parásitos, que enferman el todo el cuerpo nacional. |
|
|
|
Bueno, Picaro, sin saber te respondí. El Colectivismo es tan natural, como el mismo trabajo de las células u otros microorganismos en su habita natural. La misma madre naturaleza es una colectividad compleja. He ahí, la inspiración del socialismo científico.
La complejidad de la ciencia es igual a la complejidad de la lógica. Es como decir, 1+ 1= 1 Tan compleja es la ciencia, como su mismo campo de Estudio. Se nos ha dicho que la fantasía no tiene límites. ¿Pero quién ha dicho que la ciencia lo tenga? La mente es capaz de agregar fantasías sin limites decía Federico Engels, pero la ciencia, nos ha demostrado que es capaz de descubrir cosas sin limite; y mientras más se descubre, se nota que más falta por descubrir.
Hay dos campos ampliamente complejos para la ciencia, que es el universo estelar y el cerebro humano. Y a pesar que se ha tratado de minimizar, el complejo tejido cerebral, los neurólogos, psiquiatras y demás investigadores en la materia, hay cosas de nuestro cerebro para las cuales aún no tienen respuesta. Lo mismo podemos decir de nuestro universo, que mientras una teoría está por consolidarse aparece otra que la pone en duda, como es el caso que vemos en este artículo, de las “Magnetoestrellas”.
Nuestro Universo está compuesto por millares de estrella. Lo mismo es nuestro cerebro que está compuesto por cerca de 10 y 100 millares de células nerviosas. Nuestro cerebro además está repartido como un edificio de dos plantas, entre el “gran cerebro” y el “pequeño cerebro”. Ambos están divididos por varias y diferentes secciones o “departamentos”. Como una especie de “gran Biblioteca” en donde cada sección almacena sus propios datos y utilidades que hacen que todo el sistema funcione bien (La vida). Podría aburrir a los lectores del Papiyo, en una larga explicación de anatomía cerebral, pero no es mi intención.
Si nos metemos a otra ciencia, no menos compleja pero más “elástica”, (la economía, y las ciencia sociales) vemos una basta complejidad con descubrimientos hasta hoy “en pañales” o poco avanzados. Sí leemos los economistas clásicos, desde Adam Smith, pasando por Marx y otros, notaremos que a casi todos les gusta comparar a una nación con el cuerpo humano. ¿Nos podemos preguntar el porque?
¡La vida, pero sobre todo la vida animal, según la ciencia, ha evolucionado y con dicho evolución se ha ido, tal vez no perfeccionando, pero sí asiéndose más compleja! El Cerebro para que haga su trabajo de procesarlo todo, de ahorrar, aprender, ser y sentir debe realizar una compleja labor cooperativa. El cerebro humano es una realidad gracias a los millares de células que tiene, las cuales deben de trabajador muy bien coordinadamente para ser un hecho lo que conocemos como (Vida)
En este sentido el cerebro humano solo puede ser tal, (Humano), es decir, evolucionar de los demás animales, gracias a la comunicación entre los grupos primitivos.
Ahora bien, acá vemos concretamente la respuesta del porque los economistas, comparan al cuerpo humano con una nación. A saber, una nación debe de estar muy bien organizada para poderse desarrollar. Cada ciudadano de una nación es una célula, la cual compone dicho cuerpo nacional.
Las instituciones de una nación deben de funcionar coordinantemente entre ellas, pero asimismo con el resto de la sociedad y con todo el pueblo. Una institución no es una célula, pero sí una sección del cuerpo nacional. No obstante, el principio anatómico, que acá estamos analizando es el trabajo conjunto entre las células, entre millares de células trabajando conjuntamente y bien coordinadas.
Pero así como el “campo” cerebral tiene un sistema, “El sistema nervioso”, así una nación tiene un sistema: (El sistema Capitalista). Marx fue el genio que descubrió, (ciencia en mano) las contradicciones del sistema capitalista. Y una de las más grandes contracciones del sistema capitalista, es la necesidad de socializar a la sociedad para su mejor desarrollo, pero adoctrinar a los mismos, con el egoísmo. El capitalismo se ha convertido, y no nos hemos dado cuenta, en la Doctrina del egoísmo. El capitalismo predica una doctrina, enseña una doctrina, la impone a los pueblos, como regla única y valida (El Egoísmo).
El Egoísmo, como la demencia vascular, el Alzheimers, u otro tipo de demencia cerebral, enferma a las naciones.
Un paciente, que tenia 35 años de casado, su espesa testificada que cada uno de esos años, el paciente había sido el hombre más tolerante, pasivo y amable que ella había conocido. Después de un lamentable Accidente el paciente sufrió daños en el lóbulo frontal, habiendo cambiado totalmente de personalidad, y quedando malhumorado y altamente agresivo. La Esposa se vio en la obligación de abandonarlo. 2 años más tarde muere el paciente, por el consumo excesivo de alcohol. Y es cuando por una desgracia u otra cosa, se “des –coordina” (se interrumpe el colectivismo) el trabajo entre las células y sus “respectivas secciones” se producen enfermedades.
No es de extrañar que el capitalismo, pues, según este principio sea un sistema enfermo, dado que no existe una buena coordinación entre “células”, (la gente y la s instituciones) La contradicción capitalista está pues entre una necedad “biológicamente” natural y el interés de un pequeño grupo de la sociedad llamados capitalistas que hacen el papel, real de parásitos, que enferman el todo el cuerpo nacional. |
|
|
|
Los imbéciles
Que me perdonen mis conocidos, amigos y/o camaradas con los que hace cincuenta años compartí la utopía marxista y practicamos el leninismo militando en organizaciones de la izquierda comunista o revolucionaria, pero para seguir siéndolo hoy por hoy, tras estos cincuenta años de historia transcurrida, o hay que ser muy estrecho de entendederas o encontrarse moralmente muy deteriorado.
opinan los foristas
Hace cincuenta años gobernaba en Chile Arturo Alessandro Rodríguez. Acababa de triunfar la revolución cubana, de la que sólo sabíamos que se había impuesto gracias al coraje y la sabiduría de un puñado de idealistas – una docena, para ser más exactos – que habían logrado la proeza de vencer a un ejército entero. Y a la dictadura que prohijara.
En la región no se veían otras perspectivas que las favorecidas por la llamada Alianza para el Progreso, impulsada por el imperialismo norteamericano, o la toma del poder por las fuerzas populares: capitalismo colonial o socialismo liberador. En la Unión Soviética se fortalecía la lucha contra el burocratismo tras la catalepsia estalinista y en China se despertaba un gigante dormido. Se vivía el fin del colonialismo y uno tras otros caerían los bastiones del imperialismo inglés y francés.
Hace cincuenta años, apostar al comunismo y poner la propia vida en juego por la apuesta era no sólo plausible, sino racional. El espeso velo de ingenuidad, fanatismo, mentiras y calumnias levantado por el comunismo internacional disfrazado de pacifismo para responder a la metáfora de la cortina de hierro seguía protegiendo de la indiscreción periodística los horrendos crímenes de Lenin y Stalin. Y en la dialéctica del amor y el odio, la culpabilidad y la inocencia, la bondad y la maldad, toda la atención de la condena internacional, con su feroz peso mediático, caía sobre Hitler y el nazismo. En la arquetípica historia de buenos y malos, el comunismo seguía disfrutando del papel reivindicador y heroico del deshacedor de entuertos.
¡Cuántas razones para adscribirse a las corrientes del comunismo internacional y sumarse al feroz combate por liquidar el capitalismo!
Pero basta una escueta mirada a los acontecimientos sucedidos desde entonces para comprender cuánta falsedad e hipocresía, cuánto engaño y cuánta mentira, impedían entonces optar por alternativas verdaderamente viables y verdaderas, ciertas y legítimas. Sobre todo si se tenía veinte años. Que como dicen que bien decía Churchill, a quien por desgracia no escucháramos, quien a los veinte no era comunista, no tenía corazón. Y quien a los cuarenta seguía siéndolo, no tenía cerebro. Es el mejor diagnóstico aplicable a mis ex camaradas: sólo un descerebrado, un resentido impenitente o un perdedor de oficio preñado de odios y miopía puede hoy ser comunista – en cualquiera de sus vertientes –sin que se le caiga la cara de vergüenza.
Para regresar al punto de partida: en estos cincuenta años Chile pasó de Jorge Alessandri a Eduardo Frei y a Salvador Allende. Probó el socialismo y cosechó el más rotundo fracaso. Debido a nuestros errores, delirios e incompetencias. No por culpa del imperialismo norteamericano o la maldad de la burguesía. ¿O esperábamos que nuestros adversarios, convertidos en enemigos por nuestra propia ceguera, nos permitieran acuchillarlos sin que ofrecieran la menor resistencia? ¿Que los Estados Unidos dejarían de lado la guerra fría para ceder graciosamente el segundo de los países de su esfera de influencias a la penetración soviética chupándose el dedo? Ni Lenin ni Stalin hubieran permitido lo mismo en la suya: véase Budapest, véase Berlín, véase Praga.
De Allende se pasó a Pinochet y la tragedia dictatorial. De la que se sobrevivió con un país relativamente recuperado institucional y materialmente, vuelto del envés a punta de bayonetazos, para probar cuatro gobiernos de centro izquierda y terminar en manos de un gobierno de centro derecha, de la que uno de mis amigos y camaradas de entonces, el dirigente histórico del Partido Socialista de Chile Ricardo Núñez, ha dicho recientemente que es una nueva derecha que hace las cosas con mayor coraje y osadía que la izquierda.
¿Y Cuba? Cincuenta años de dictadura, de totalitarismo, de represión y despotismo, de miseria y pobreza. ¿Quién cambia hoy Chile por Cuba? ¿Quiénes de los dirigentes del comunismo chileno cambiarían el sistema en que viven – con sus terremotos y sus océanos de congelamiento, sus inviernos y temporales, sus empanadas y su vino tinto – por el que impera en Cuba – con sus aguas color esmeraldas y sus playas nacaradas, sus eternos veranos y sus tardes de ensueño – mano a mano, llave en mano, sin quitarle ni agregarle nada? Un imbécil, un resentido o un fanático. Hagan la apuesta y sométanlo a plebiscito para ver qué porcentaje de votantes obtendría el compañero Tellier o los camaradas del MIR. ¿Alcanzarán el 1%?
Compare las dos Coreas y lo que les ha sucedido en este medio siglo. Moscú de 1960 con Moscú del 2010. Pekín de la revolución cultural y el Beijing del neo capitalismo chino. Vaya al otro extremo y compare el Nueva York de John F. Kennedy con el de Barak Obama, el Paris de Pompidou con el Zarkozy, la España de Franco con la de Rodríguez Zapatero. Progreso puro, prosperidad ininterrumpida, paz y concordia. Compare en cambio la Caracas de Rómulo Betancourt con la de Hugo Cháve y verá los efectos del delirio comunista.
Los ejemplos son interminables. Cuba es un basurero. Y Caracas está en trance de convertirse en otro. Por una sencilla razón: porque en Cuba siguen mandando quienes confiaron en el comunismo hace cincuenta años. Y en Venezuela mandan quienes siguen creyendo en él, tras medio siglo de fracasos. Para ello se requiere ser un imbécil, un resentido o un fanático. Sálvense los pillos, que se enriquecen en el esfuerzo. Como dice el refrán, y pensando en la nomenklatura chavista, la Sra. Morales, la Sra. Cilia Flores y todos los fiscales, jueces, generales, ministros, viceministros y asambleistas: al que le venga el sayo, que se lo ponga.
Si Usted sigue apostando a los Castro o es seguidor de Hugo Chávez, escoja la casilla que más prefiera. Otras no encontrará a su disposición.
http://www.noticierodigital.com/2010/08/los-imbeciles/
|
|
|
|
Izquierdas y derechas Antonio Sánchez García
Martes, 17 de agosto de 2010
La encrucijada en que se encuentran los pueblos latinoamericanos, y que se ha hecho crucial en nuestro país, no pasa por izquierdas o derechas. Pasa por aquel punto que divide a los ciudadanos y los lleva a optar por soluciones autocráticas y dictatoriales – de cualquier signo ideológico – o por opciones estrictamente liberales y democráticas. "El socialismo es el comunismo"
Fidel Castro
1.- La desaparición de la Unión Soviética, y con ello de la Europa del Este y del polo de aglutinación del comunismo a nivel planetario, han terminado por asestarle un golpe mortal al socialismo y, tras suyo, a la nomenclatura tradicional en que se dividían los campos políticos, según los cuales las agrupaciones de fuerzas se encuadraban en las izquierdas o las derechas. Siendo estas últimas el campo de gravitación del conservadurismo y la defensa del statu quo mientras que aquellas lo eran de la contestación y el progresismo. Hasta entonces, 9 de noviembre de 1989, en el imaginario colectivo, la diferencia entre izquierdas y derechas fue siempre un sucedáneo de la divisoria entre “buenos” y “malos”. Desde la caída del muro, y con él la del auto de fe de que el progresismo y el futuro descansaban en las izquierdas en todas sus variantes – desde el bolchevismo hasta el reformismo – y el estancamiento y la regresión en el campo de las derechas, el eje de gravitación política se ha desplazado al enfrentamiento entre demócratas y autócratas. Polos de aglutinación que pueden perfectamente atraer hacia sí a derechistas e izquierdistas de todos los colores. Y efectuar con su muy amplia delimitación un corte transversal que atraviesa todas las gamas del espectro político. ¿Qué permite al día de hoy la coincidencia de derechistas e izquierdistas? La lucha contra las dictaduras. La defensa de las libertades democráticas. El enfrentamiento contra el totalitarismo. ¿Qué las une? El liberalismo, en su más amplia acepción. Y la consiguiente defensa de la propiedad privada. Las diferencias que restan hacen a matices en el rol del Estado, el acento en lo social sobre lo particular, la defensa de los más desfavorecidos y el esfuerzo por lograr la igualdad de oportunidades y la prosperidad para todos. Con una conciencia común: el progreso y el bienestar son incompatibles con los totalitarismos. Sólo son verdaderamente posibles en democracia y bajo el irrestricto respeto a la propiedad privada y al libre mercado. Dos aspectos de un mismo fenómeno. ¿Quién puede afirmar hoy en día que el más que semi centenario régimen cubano representa la contestación y el progresismo y el gobierno de Sebastián Piñera el del conservadurismo y la regresión? Obviando los fanatismo de viejo cuño que siguen imperando como una rémora en sectores sociales anclados en el pasado, carentes de toda auténtica incidencia en los destinos de sus respectivos países, nadie con dos dedos de frente puede salir a defender al uno porque representa el futuro – tras medio siglo de fracasos y una feroz dictadura totalitaria – y el otro el conservadurismo – cuando intenta una reforma en profundidad que permita que su país de el salto definitivo hacia la prosperidad y el desarrollo propios del primer Mundo. La encrucijada en que se encuentran los pueblos latinoamericanos, y que se ha hecho crucial en nuestro país, no pasa por izquierdas o derechas. Pasa por aquel punto que divide a los ciudadanos y los lleva a optar por soluciones autocráticas y dictatoriales – de cualquier signo ideológico – o por opciones estrictamente liberales y democráticas. Ni en Brasil ni en Colombia ni en Chile, las opciones autocráticas capitalizan más de un diez o un quince por ciento del electorado. Y los partidos que los representan, principalmente los de ascendencia marxista-leninista o castrista, no superan el 5% de los votantes. 2 Ciertamente: esa preponderancia de las fuerzas liberales y democráticas depende de cuán estabilizadas se encuentren las sociedades respectivas. A mayor estabilidad de los sistemas políticos y a menor extensión de sus aspectos críticos – particularmente en los ámbitos de la economía y la sociedad – mayor es la fortaleza de los demócratas y menor el de los autócratas. En Venezuela, durante cuarenta años de democracia, las fuerzas del marxismo anti sistema – en todo su espectro – no llegaron jamás a superar el 5%. Que se convertiría en una barrera histórica. Vivimos actualmente las resultantes de la crisis de esa situación histórica. Un grave tropiezo, que hizo que ese 5% se convirtiera en mayoría nacional. Los resultados, once años después, están a la vista. Es preciso que se produzca una crisis estructural, reproducida en el ámbito político, para que dicha realidad se vea cuestionada y atropellada por los hechos. Basta una herida de cierta envergadura en el tejido socio-político, exactamente como las que permiten a la mosca productora de las miasis atacar los tejidos sanos de un ser vivo y provocar las temibles gusaneras, para que se precipite una crisis en el sistema político de dominación y se trastruequen los términos de la ecuación entre demócratas y autócratas. El fracaso – aparente o real – de las democracias permite la inmediata resurgencia de los genes autocráticos y dictatoriales que reposaban en lo profundo de la genética política. La crisis de la democracia invoca de inmediato el llamado de auxilio al sustrato monárquico y autoritario, siempre al acecho de las democracias. Que puede ser revivido por la izquierda o por la derecha, por el castrismo o el pinochetismo. Ante el caos, espontáneo o inducido, provocado por las crisis de los sistemas de dominación, aparece de inmediato la tentación totalitaria: es el momento de las dictaduras. En el caso de la crisis venezolana actual, fueron sectores golpistas de las fuerzas armadas – siempre en estado latente y al acecho del Poder desde la derrota del perezjimenizmo en 1958 –, en conjunción con el golpismo civil de izquierdas y derechas, los que provocaron la herida de la subversión, agusanando el frágil sistema de equilibrios en que se asentaba la democracia venezolana. El llamado “Caracazo” no fue el origen de la crisis, pero abrió una profunda herida en el tejido político nacional permitiendo la inoculación de la miasis. Los golpes de estado de febrero y noviembre de 1992 impidieron la sanación de la herida y precipitaron la extensión del daño ocasionado a la democracia. Con la consciente o inconsciente, voluntaria o involuntaria colaboración de algunos de sus propios gestores. La mesa estaba servida para el asalto al Poder. En países de más sólida conformación estatal, como es el caso chileno, argentino o uruguayo, la respuesta provino de las fuerzas armadas tras un proyecto conservador, profundamente restaurador. Política, social y económicamente de derechas. En sólida alianza con las restantes instituciones del establecimiento – el sistema político y el judicial – las fuerzas dictatoriales se hicieron de inmediato a la tarea de recomponer el sistema de dominación y anular por generaciones el virus de la contestación revolucionaria. En países de formas estatales más endebles y gelatinosas, la respuesta provino del autoritarismo caudillesco tras un proyecto plebiscitario de masas. Teniendo como antecedentes el peronismo y los distintos caudillismos latinoamericanos del siglo XX. Incluso el castrismo. Aquellas condujeron a formas corporativas y represoras de gobierno. Éstas, a formas populistas y fascistoides. Es el caso de la Venezuela chavista. 3 La pretensión de instaurar el comunismo en Venezuela se inserta en la segunda oleada por lograr su instauración a nivel continental desde el asalto al Poder por el castrismo en Cuba. La primera, articulada desde la Habana desde comienzos de los sesenta y que se expresara en la intervención armada de Cuba en Venezuela entre los años 64 y 67, en Bolivia en los años 66 y 67 y en los restantes países de la región en que se estructuran movimientos guerrilleros durante toda la década de los sesenta, culmina con el desastre del allendismo en Chile y las violentas reacciones militares de los setenta y ochenta en el Cono Sur. La segunda oleada se estructuraría luego de la caída del Muro de Berlín y la debacle de la Unión Soviética y el comunismo mundial en noviembre de 1989 y encontraría su foco de articulación en el llamado Foro de Sao Paulo, que a partir de 1992 reorganiza y orienta las luchas violentas – a través de las narcoguerrillas - y electorales – a través del ataque a las instituciones, el quebrantamiento de sus sistemas de dominación, los golpes de estado y las victorias electorales – hacia el triunfo de su estrategia en Venezuela, Ecuador y Bolivia. Actualmente vivimos la crisis de este proyecto estratégico y la debacle del castrismo y del chavismo bolivariano, tanto en Cuba y Venezuela como en toda la región. Los graves problemas suscitados en todos los países del ALBA y la crisis terminal que vive el castrismo en Cuba, que implican un golpe mortal a las pretensiones del comunismo en todos esos países, replantean la problemática política de América Latina. El siglo XXI, que se iniciara bajo la feroz ofensiva del bolivarianismo y el llamado socialismo del nuevo siglo, vuelve a los cauces de la disyuntiva entre democracia o dictadura, progreso o regresión, aislamiento internacional o inserción de la globalización de las sociedades y sus economías. Es un corte transversal que pone de manifiesto el nuevo sentido de la historia. El espantoso fracaso del castrismo en Cuba y del chavismo en Venezuela, que arrastra consigo el fracaso del comunismo, reinserta la política en los cánones de la sensatez y la cordura. No se trata de asaltar el cielo: se trata de poner pie en tierra, de vencer el caos, la pobreza y la violencia. De aunar esfuerzos para combatir las taras ancestrales del subdesarrollo – el analfabetismo, la miseria, la desigualdad – y organizar nuestras sociedades para permitirles la productividad y la riqueza que hagan posible la distribución equitativa y la reproducción permanente de la prosperidad. No son objetivos propios de derechas o de izquierdas. Son objetivos de demócratas progresistas, conscientes de que sólo la propiedad privada – derecho natural de la especie - y la concurrencia en términos de igualdad en el mercado de oportunidades, pueden garantizar el progreso de nuestras sociedades. Es lo que dicta la racionalidad de los hombres sensatos, ese atributo que tanto reclamara el libertador cuando veía desmoronarse sus esfuerzos en aras de la locura del caos y los enfrentamientos fratricidas.
sanchezgarciacaracas@gmail.com
http://www.analitica.com/va/politica/opinion/1507359.asp
|
|
|
|
Atención médica
USA es mas socialista que Cuba, un jubilado en USA recibe mejor atención médica que un jubilado cubano
|
|
|
|
Creo que calo, no. jejejje
CUBA está Bloqueada, y los lavados de cerebro apoyan tal criminal Bloqueo. |
|
|
|
TODOS LOS DIAS INTENTAN LAVARME EL CEREBRO CON LAS BONDADES DEL MARXISMO Y CON EL SOCIALISMO COMUNISTA DE FIDEL Y SUS SIERVOS .
barriendo la basura |
|
|
|
Don Ignacio, ustedes por lo menos hacen el intento. Pero lamentablemente la gente de la “Extrema izquierda Ignorante” solo saben ofender, y descalificar.
Mire usted, como me han tratado, como si fueron ELLOS los “reyes de las verdades absolutas”. Pero acá y cuando se habla de ciencia brillan por su ausencia.
Bueno, solo falta que me digan “gusano” a mi también.
SEÑORES DE LA EXTREMA IZQUIERDA, PARA QUE MÁS LES DUELA Y LES ARDA LES DIRÉ……..
VIVA LA REVOLUCIÓN CUBANA, QUE VIVA ESE MARABILLOSO PUEBLO QUE LUCHA POR CONSTRUIR SU SOCIALISMO.
VIVA CUBA LIBRE DE CAPITALISMO
VIVA ISRAEL. |
|
|
Primer
Anterior
2 a 14 de 14
Siguiente
Último
|
|
|
|
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados | |
|
|