Estocolmo.

El Premio Nobel de Literatura peruano Mario Vargas Llosa consideró “magnífica” la atribución del Nobel de la Paz al disidente chino Liu Xiaobo, que lucha, dijo, contra una “dictadura” que “castiga con gran ferocidad toda forma de crítica o disidencia”.

El galardonado con el Nobel de la Paz es un “gran luchador” por la democracia en su país, afirmó Vargas Llosa en una conferencia de prensa en un salón de la Academia sueca, donde el miércoles por la tarde pronunciará su discurso de recepción del Premio Nobel de Literatura 2010.

“Me parece magnífico que hayan premiado a un gran luchador chino, que lucha por la democracia en su país”, dijo el novelista, que recibirá el viernes la máxima distinción a la que puede aspirar un escritor, en su caso por "su cartografía de las estructuras del poder y su reflejo agudo de la resistencia del individuo, de su revuelta y de su fracaso".

"China es un país que ha alcanzado extraordinarios éxitos económicos, lo que hace olvidar a mucha gente, particularmente en Europa, que sigue siendo una dictadura, un sistema totalitario que castiga con gran ferocidad toda forma de crítica o disidencia", afirmó.

El autor de "La fiesta del chivo" y "La ciudad y los perros", de 74 años, recibirá el Nobel el viernes de manos del rey Carlos Gustavo de Suecia.

En cambio, una silla vacía simbolizará al encarcelado disidente chino y premio Nobel de la Paz 2010 en la ceremonia de entrega del premio en Oslo, a menos que Pekín deje viajar a su esposa, según indicó un amigo de ambos.