Diario oficialista de la dictadura cubana dice criticar al burocratismo imperante
El diario oficial Granma, órgano del partido comunista cubano, único permitido en la isla, arremetió contra el “lastre” de la burocracia en la nación y reiteró la importancia de un “cambio de mentalidad” que ha pedido el presidente Raúl Castro, como parte de las reformas económicas que impulsa su Gobierno.
Granma publica un artículo con el título de “Burocratismo, de regla a excepción”, que se suma al llamamiento del Gobierno y varios medios oficiales desde hace meses para eliminar las “trabas” en el nuevo escenario económico de la isla, lo que es percibido como un esfuerzo por tratar de justificar e imponer los cambios económicos enarbolados por el régimen, los que en la práctica no se corresponden con el discurso oficial de “justicia social” e “igualitarismo”.
“Todavía hay quienes se hacen de la vista gorda ante el nuevo escenario que se construye para la economía y la sociedad cubanas”, afirma el rotativo.
El diario considera que en Cuba hay quienes llevan “la burocracia puesta en vena, inoculada como un virus mortal”, mientras que a otros no les conviene que cambie “el sistema de enredo, dilación, impunidad y la ‘multa’ o ‘mordida’” para que un trámite cualquiera llegue a feliz término”. Granma no precisa que las conductas que hoy tanto critica son prácticas engendradas y heredadas por el ineficiente sistema social que rige en la isla desde hace ya más de medio siglo.
El artículo lamenta el daño que hacen ciertos burócratas “al obstaculizar, enrarecer y complicar” una serie de medidas que forman parte es que se implementan como parte de la actualización del modelo económico cubano”, subraya.
Las medidas más importantes consisten en la ampliación del trabajo privado bajo las condiciones regulatorias del régimen, la supresión de medio millón de empleos en el sector estatal este año, la eliminación de subsidios que alguna vez fueron presentados por la propaganda oficialista como las joyas del sistema, y la aplicación de un nuevo régimen tributario, entre otros.
“Por más que se ha dicho, todavía existen muchos que no entienden que ese proceso debe ir acompañado de un cambio de mentalidad, de estilos y de visión a todos los niveles, desde quienes dirigen una actividad hasta la funcionaria que da la cara en un buró o una ventanilla”, indica Granma, sin precisar que dicho cambio de mentalidad está sensitivamente más cercano a una concepción capitalista de la sociedad que al espíritu de comunitarismo enarbolado por el castrismo casi desde que llegó al poder.