El deseo es como el tiempo
Agotando la magia en cada momento.
Muere, poco a poco
Envenenado en la fuente del delirio.
Pero el mío es inagotable
Se nutre en las entrañas de la vida.
Donde nace la dulzura de tu vitalidad.
Esa fuente dorada protegida del mal y la ausencia
Emanando, a cada instante, el principio de la efervescencia.
Ella, humilla mi saciedad
Que angosta y ceñida ahoga mi vanidad.
Es por ello que jamás dejare de amarte
Y en mis sueños me entregare.
Ellos serán quien manejen esta necesidad
Y sobre ellos teñiré de lamento mi saciedad.
Meros portadores de este sollozo
Acompañan mi llanto.
Esta lluvia denigrante que me cala
Y desde lo mas profundo del alma clama.
Es el sonido del tiempo…
Caminado erguido a través del destierro
Sobre la senda de un amor que me domina
Y bajo el destino de una pasión que me atrapa.
Entre sus acordes morare eternamente
Tarareando la melodía del valiente
Y pereciendo en las fauces del demente.
Este es mi sino…
Mas, mojare mis sabanas tras tu camino
Vagando perenne y efímero
Pero tenaz y austero sin descanso.
18/05/2011
Saludos
kuko