WASHINGTON -- Estados Unidos designó el jueves como narcotraficantes a cuatro funcionarios del gobierno venezolano, por su presunta colaboración con la guerrilla colombiana FARC en el tráfico de drogas y armas.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC por sus siglas en inglés), adscrita al departamento del Tesoro, identificó en un comunicado de prensa a los cuatro funcionarios como Amílcar Figueroa, representante de Venezuela en el Parlamento Latinoamericano; el general del ejército Antonio Alcalá Cordones; el congresista Freddy Bernal y el funcionario de inteligencia Ramón Madriz.
El documento señaló a Figueroa como un "proveedor principal de armas y un contacto principal para los líderes de FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) afincados en Venezuela", mientras que acusó a Alcalá de "usar su posición para establecer una ruta de armas por drogas".
A Bernal, quien además fungió como alcalde de la capital venezolana, lo señaló por "haber facilitado ventas de armas" entre el gobierno venezolano y las FARC; mientras que Madriz "ha coordinado seguridad" para la organización colombiana a la que Washington considera terrorista.
AP solicitó una reacción a la embajada venezolana en Washington sin obtener respuesta.
La designación está acompañada del congelamiento de bienes que estas personas puedan poseer en Estados Unidos, y prohibe a entes estadounidenses a realizar transacciones con los designados o sus bienes, tal como establece la ley de designación de cabecillas del narcotráfico extranjero (Foreign Narcotics Kingpin Designation Act), de diciembre de 1999, que declara quiénes o qué tipo de organizaciones son narcotraficantes en el extranjero para aplicar medidas financieras en su contra.
"La decisión de hoy expone a cuatro funcionarios del gobierno venezolano como colaboradores clave de armas, seguridad, entrenamiento y asistencia de otro tipo a las operaciones de FARC en Venezuela", dijo el director de OFAC Adam Szubin. "OFAC continuará concentrándose en las estructuras de apoyo a FARC en Venezuela y en la región".
En 2009, OFAC emitió una medida similar contra el ex ministro del Interior Ramón Rodríguez Chacín y los jefes de organismos de espionaje Hugo Carvajal Barrios y Henry Rangel Silva.
Las misiones diplomáticas de ambas naciones permanecen sin embajador desde que Caracas retirara en 2010 el plácet concedido a Larry Palmer, quien dijo durante su proceso de confirmación en el Senado que la inteligencia cubana había infiltrado a las fuerzas de seguridad venezolanas.
Acto seguido, Washington solicitó a Bernardo Alvarez que no volviera a la embajada cuando hubiera concluido la pausa decembrina.