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General: La máquina de mentiras
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De: Quico º  (Mensaje original) Enviado: 09/09/2011 22:01
 
Medios de comunicación han sido "una máquina de mentiras" en Libia, según periodistas

El periodista y enviado especial de teleSUR a Trípoli, Jordán Rodríguez, se refirió al rol que desempeñan los medios de comunicación en Libia como una "máquina de mentiras". El papel de los medios puede ser "miserable" según la importancia que cobre determinada región del mundo para los intereses de las potencias afirmó el periodista este martes durante un foro sobre el tratamiento mediático de la situación en Libia.

El profesional de la comunicación recordó que horas antes de su llegada a la capital libia medios de comunicación reportaron que tropas fieles a Muammar Al Gaddafi estaban matando a los civiles en la céntrica Plaza Verde de Trípoli, versión desmentida por el equipo de la multiestatal, primeros periodistas extranjeros en llegar al país norafricano

"Nosotros nos imaginábamos que íbamos a ver por ejemplo a una mujer con su hijo que estaba siendo bombardeada por leales a Gaddafi y salimos a la Plaza Verde a constatar los hechos pero no vimos nada de eso", afirmó Rodríguez para dar cuenta de las mentiras fabricadas por medios de prensa extranjeros.

Recordó que él cuestionó sobre sus fuentes a un periodista británico que reportaba sobre supuestos bombardeos y asesinatos cometidos por tropas de Gaddafi, puesto que Rodríguez era testigo de que el "profesional" de la comunicación nunca salía del hotel. "Después de mucha insistencia, ya cansado me contestó aquí todos sabemos lo que venimos a hacer y sabemos cual es nuestro trabajo".

"Tomemos conciencia del papel de los medios de comunicación en la geopolítica del mundo, donde para Gobiernos como Francia e Inglaterra que se creen dueños del mundo, lo más importante es crear una maquinaria de mentiras que sabemos cómo opera y nos hace dudar muchas veces", observó Rodríguez.

Durante su intervención en el foro denominado "Artillería del pensamiento vs. Fábrica de mentiras" que desde el pasado domingo sesiona en el Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos, de Caracas, capital venezolana, el equipo periodístico de la multiestatal encabezado por Jordán Rodríguez y Rolando Segura, compartieron sus experiencias sobre la labor cumplida durante la invasión imperial en Libia.

El comunicador expresó que "la guerra es una heramienta para ganar" y está es una "guerra de cuarta generación donde primero llegan las cámaras y los periodistas y luego llegan las bombas".

Afirmó que tras la agresión colonialista, "estamos a las puertas de una crisis humanitaria en Libia".

Insistió en que el papel de los medios puede ser "miserable" según la importancia que cobre determinada región del mundo para los intereses de las potencias extranjeras.

"La noticia de Libia va a bajar y comenzará otra cuando tomen otro país", afirmó.

Expertos venezolanos y extranjeros cierran este martes en Caracas, el intercambio sobre el tratamiento mediático de la situación en Libia, nación norteafricana que fue víctima de una masacre por parte de las potencias occidentales aliadas y rebeldes al líder Muamar El Gaddafi.

En esta jornada, el tema central es: La ruptura del cerco mediático contra el pueblo de Libia, cuyos ponentes son los periodistas Walter Martínez, Rolando Segura y Jordán Rodríguez.

Nuestra orden fue reportar

El comunicador social venezolano, Jordán Rodríguez, dijo ante los asistentes al foro "Artillería del pensamiento vs. Fábrica de mentiras", que la indicación recibida por el equipo enviado a Libia fue reportar los sucesos.

"Nuestra orden fue: lleguen y reporten lo que pasa", señaló el periodista y agregó que "eso es lo que nos tiene aquí, llegamos, prendimos cámaras, micrófonos y comenzamos a grabar".

Sostuvo que "por no estar alineados a los medios en el resto del mundo somos diferentes, especiales o anormales".

Aclaró que la visión del multimedio teleSUR "es hacer visible las historias que para las grandes potencias no son visibles", en alusión a las preguntas sobre si el equipo habría recibido alguna "instrucción presidencial".

Finalmente, Jordán Rodríguez llamó a la conciencia y a estudiar las diversas informaciones que llegan a través de las agencias de noticias para poder formar un criterio sobre la realidad de los hechos que suceden en el mundo.

"No seamos tan inocentes, no creamos en todo lo que nos dicen los medios, tómense la molestia de estudiar los hechos que les presentan, pedimos que escuchen las versiones y saquen conclusiones propias", reflexionó.

Mentiras de medios desplegaron ola de racismo

El periodista Rolando Segura, enviado especial de teleSUR a Trípoli (capital libia), manifestó que medios de comunicación crearon “mitos y mentiras que desplegaron una ola de racismo” en Libia.

“En Libia había una cantidad de inmigrantes, negros, chinos (…) Los chinos tuvieron la oportunidad de que su país lo repatriaran, pero los africanos les quedó sólo la salida por tierra y la mayor parte tuvieron que salir por mar”, señaló Segura.

“Se habla de miles de muertos africanos que intentaron salir por mar”, agregó.

Asimismo, indicó que “muchas de las personas que se han visto en fotos asesinadas son personas negras (…) Es una ironía porque Libia hizo una lucha por la unidad africana y los pueblos de África”.

Segura enfatizó también que “hay otras grandes mentiras que han propagado los medios de comunicación y es hacer ver que el conflicto en Libia es interno entre los rebeldes y el gobierno (…) Todo parece indicar que esto no es cierto”.

“Mi primera impresión es que esto es una guerra de la OTAN (organización del Tratado del Atlántico Norte), de las grandes potencias internacionales”, comentó el periodista.

“Se habla que desde el 2005 la CIA (Agencia Central de Inteligencia) ya venía trabajando el Libia”, recalcó.

El reportero dijo que “hay varios informes que aseguran que desde noviembre de 2010 los servicios de inteligencia de Francia, Inglaterra y la misma CIA venían trabajando en la conspiración contra Libia”.

“Tengamos en cuenta la rapidez en la que se da esta situación y el trabajo activo de las potencias (…) Una manifestación pacífica terminó en una rebelión armada”, añadió.

Las víctimas fatales por los ataques imperialistas de la OTAN “podrían llegar a 50 mil”, dijo.

El objetivo del Foro es analizar el papel de las tecnologías de la información y la comunicación en la lucha por divulgar la verdad, a propósito de las agresiones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) contra la nación noroafricana.

Sus ataques dejaron miles de muertos, heridos y desplazados en ese territorio.

teleSUR / dg - kg / FC


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Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: albi Enviado: 10/09/2011 05:47
Una reflexión sobre los medios y la democracia
 
 
Intervención de Ignacio Ramonet en CIESPAL, Quito (Ecuador). Resumen de Silvia Arana.
 
En estos tiempos de globalización neoliberal, la información se ha convertido en uno de los problemas principales de la democracia. Se consideraba que en una democracia alguno de los tres poderes podía cometer abusos (la justicia puede condenar a un inocente, el poder legislativo puede sancionar leyes discriminatorias contra un sector de la población -como las leyes contra los inmigrantes en Estados Unidos o en Francia). La función de los medios es denunciar estos abusos. Los medios de comunicación de masas pueden influir en la opinión pública; esto es lo que constituye el cuarto poder, o contrapoder. El poder que puesto al servicio de los ciudadanos sirvió para oponerse a las iniquidades de la esclavitud, que era legal en la democracia más nueva, Estados Unidos, como en países europeos por ejemplo Francia e Inglaterra que practicaban el colonialismo, otro sistema injusto pero legal en las democracias. La prensa llevaba campañas de denuncia de ambos sistemas.

En los últimos 15 años, a medida que se fue afianzando el neoliberalismo y la globalización, el cuarto poder -como contrapoder- ha ido desapareciendo.

Se fue imponiendo lo privado sobre lo público, lo individual sobre lo colectivo, y los medios de comunicación en su mayoría han dejado de ser un contrapoder. Los medios pertenecen a grupos mediáticos (Murdoch, Google, Blackberry) que se expanden con la revolución digital, que rompen las barreras, con la espectacular expansión de internet. Se mezclan todas las esferas: la cultura de masas, la información, la comunicación y el internet. Los grupos mediáticos que manejan todas estas esferas son multinacionales, planetarios. Estos mega grupos, cuya existencia es posible por las suaves leyes anti trust, son actores centrales del poder globalizado. Ya no se proponen ser un contrapoder, son un cuarto poder sólo como una suma a los otros tres poderes; usan su poder para oprimir al ciudadano. La cuestión cívica es cómo oponerse; hay que crear un quinto poder, oponer la fuerza ciudadana para denunciar a los poderes que actúan contra el pueblo. Esta situación se vive en Ecuador, Bolivia, Venezuela, Argentina, Brasil. Cuando Chávez asumió el poder los grupos mediáticos se lanzaron en contra del gobierno elegido democráticamente. Uno puede tener diferentes opiniones del gobierno de Chávez, pero no se puede negar que los medios usan falsedades para defender sus privilegios y oponerse a los cambios sociales. Asumen su función de perros guardianes del orden económico, ideológico; son latifundistas mediáticos. El caso de Berlusconi en Italia es un ejemplo: primero construyó una gran fortuna, luego adquirió medios de comunicación y después ganó las elecciones.

Entre las guerras mediáticas contra gobernantes elegidos democráticamente podemos mencionar la guerra mediática contra Chávez para impedir que concrete reformas o en los setentas, la guerra del periódico El Mercurio contra el presidente chileno Salvador Allende, o la guerra en los ochentas del diario La Prensa contra el sandinismo en Nicaragua. O las guerras mediáticas contra los presidentes de Brasil, Argentina y Ecuador. Ya no sólo son los poderes tradicionales los que atacan sino también los medios que usan como fachada, como arma de combate, la defensa de la "libertad de expresión". La información difundida por estos medios está contaminada por toda clase de falsedades. La usan como una mercancía. Los medios se han convertido en el brazo, o aparato, ideológico de la globalización. Medios de comunicación y globalización son dos conceptos ligados. ¿Cómo exigir la verdad? Los medios están al servicio del poder económico y financiero, y por debajo está el poder político. Cada día aumenta el poder económico, financiero y mediático a expensas del poder político que es el único elegido democráticamente.

Los medios no respetan las leyes de la información sino que se manejan con las leyes del mercado, oferta y demanda. En apariencias la información por internet o televisión o radio es gratuita porque no es la información lo que se vende; sino que venden ciudadanos a los anunciantes. El periodismo ha cambiado parámetros fundamentales: el ritmo, que es instantáneo y lo instantáneo es difícil de verificar, se multiplican los errores, se vive un estado de inseguridad informativa; la espectacularidad, se privilegia el horror, la fascinación macabra con la violencia; lo visual, se basa en la falsa ecuación "ver es comprender", en realidad lo que se ve no es forzadamente lo que ha ocurrido. Se ha creado una tremenda simplificación, una lectura infantilizada.

Por otra parte, en la actualidad se confunde periodismo con comunicación; hay millones de usuarios de Facebook, de Twiter -que pueden tanto organizarse en campañas por causas comunitarias positivas como también ayudar a crear confusión informativa. Esta gran cantidad de comunicados crea un Muro de información que tapa la carencia de verdadera información y funciona como censura, una censura "democrática". En este hueco informativo aparece Wikileaks, que demuestra: uno, que en realidad no sabemos lo que ocurre ni en Irak ni en Afganistán ni el Departamento de Estado de Estados Unidos. Y dos, que los periodistas son incapaces de informar. Hay una crisis de identidad: qué es el periodista, qué es el periodismo, qué es noticia. Los medios actúan en función de las leyes del mercado: noticia es lo que puede interesar a un mayor número de personas. Han perdido la conciencia de su misión. ¿Qué es la verdad? ¿Qué es la mentira? Como Wikileaks lo ha demostrado, la verdad puede ser mentira. Repetir una cosa hasta el hartazgo es demostrar su veracidad; otra ecuación falsa. Tanto Wikileaks como las redes sociales -que son posibles por el internet- ayudan a resistir. En América Latina los movimientos sociales usaron históricamente las radios comunitarias como instrumentos de resistencia, ahora usan también el internet.

Se puede hacer un paralelismo con lo sucedido con la alimentación. Había escasez de alimentos -y sigue habiendo en algunos países- luego la revolución agraria permitió producir en abundancia. Hoy sabemos que muchos de los alimentos son tóxicos, pueden envenenarnos (el caso de la "vaca loca" por ejemplo). Lo mismo sucede con la información; está contaminada. Hay que crear una ecología de la información para limpiarla, para que se respete la verdad, para mejorar la calidad informativa y así mejorar la calidad de la democracia.

Ignacio Ramonet es Director de Le Monde Diplomatique, cofundador del movimiento Attac y de Media Watch Global, profesor de teoría de la comunicación en la Universidad Denis-Diderot, París VII)



 
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