1. Hoy se ha publicado que cientos de policías antimotines comenzaron a desmantelar el campamento del movimiento anti Wall Street en el centro de Los Ángeles en la madrugada del miércoles, donde los manifestantes los aguardaban con barricadas dos días después de vencido su plazo para irse. Unos mil 500 policías con cascos invadieron el campamento situado ante la alcaldía de la ciudad, mientras cerca de otros estaban apostados en torno al lugar y bloquearon las calles, donde al parecer al menos 10 personas fueron arrestadas sin incidentes violentos. Cerca de 500 manifestantes se habían congregado en el parque vecino al City Hall (alcaldía), donde desde el 1 de octubre se ha instalado un campamento en protesta contra el saqueo y la codicia de las corporaciones y las desigualdades económicas. El canal KTLA5, que mostraba imágenes de personas sentadas en la calle, señaló que el ambiente era tenso, pero pacífico.
2. Los jóvenes norteamericanos (que no yanquis porque éstos son los multimillonarios que gobiernan, bombardean, fabrican armas y hacen las guerras) están ya cansados de los gobiernos y la injusticia en su país y han comenzado a salir a la calle a protestar. Primero se plantaron al frente de la bolsa de valores de Nueva York, en la calle de Wall Street, donde fueron desalojados con violencia; pero ese acampamiento fue el modelo para que en otras ciudades de EEUU se extendiera el movimiento. El gobierno de Obama, empujado por la Clinton y otros miembros halcones del gobierno, se ha lanzado contra los indignados. Se publica que el gobierno fascista del tal Raigoza de Los Ángeles es el que ordenó la represión. A los jóvenes norteamericanos se han unido trabajadores latinos con conciencia que ven que también ellos son víctimas del desempleo, de salarios de hambre, de viviendas y vida cara.
3. Los pobres mexicanos, ante los funestos gobiernos de su país (Salinas, Zedillo, Fox y Calderón) que no han tenido la capacidad ni la intención de resolver el terrible desempleo en el país, poniendo en peligro sus vidas se trasladan por millones a los EEUU a mendigar trabajo. En EEUU los miran y los tratan como esclavos, con un racismo exagerado, pero les pagan en dólares: uno, dos, tres o cuatro dólares la hora de trabajo despreciado por los trabajadores norteamericanos. Éstos con dignidad desprecian ese tipo de empleo de lo más bajo y más ruin; además ellos cobran de ocho a 12 dólares la hora. Los empresarios yanquis se hacen millonarios contratando y explotando a los mexicanos y centroamericanos. ¿Cómo no van a ver bonito a EEUU si ese país, aunque los trate con la punta del pie, les soluciona su hambre? Me dice mi amigo: “yo tengo que vivir escondido en el mismo departamento que rentan mi hijo y otros más”.
4. Los gobernantes yanquis fueron modelo de democracia a fines del siglo XVIII y principios del XIX porque su pensamiento era más avanzado que el de la vieja Europa infestada de monarquía y continuidad hereditaria. Fue el país más avanzado –como fue el cristianismo en sus inicios- cuando apenas estaba en proceso de construcción. Pero después de su expansión agresiva territorial y la primera guerra (1914-19), sobre todo de la segunda (1939-45), se transformó en el país imperialista por excelencia. Después de arrojar sus dos bombas atómicas asesinas en 1945 sobre dos ciudades japonesas con el fin de demostrar su poderío, los gobiernos yanquis se transformaron en imperialistas y, al mismo tiempo, en el enemigo principal de todos los pueblos del mundo. El justo odio contra ellos ha crecido por sus invasiones asesinas, su racismo, la represión contra las protestas y por la venta de armas que realiza en todo el mundo.
5. La peor gente de México: empresarios, políticos, medios de información, la derecha, han sido los ideólogos del imperialismo gringo llamándole “democracia”. Durante todo el siglo XX en el hogar, la escuela, la iglesia, la empresa, se ha engañado al pueblo mexicano diciendo que EEUU es el país más democrático del mundo porque cada cuatro u ocho años elige a sus gobernantes. De manera cínica silencian que EEUU robó a México más de la mitad de su territorio original, que con un golpe de Estado asesinó al primer presidente de la Revolución Mexicana, que se hizo una nación imperial invadiendo y saqueando países, y que en los mismo EEUU persiguió y asesinó a la raza negra. Sin embargo, por el hecho de elegir a sus gobernantes de dos partidos al servicio de multimillonarios que se turnan la Presidencia, presentan a ese país como el más democrático del mundo. Ahora sólo los muy imbéciles creen en esa patraña.
6. El problema es que los yanquis han logrado imponer como muestra los permanentes desalojos contra los plantones de los indignados. Así como en EEUU, en España, Chile, Grecia, Italia, también los gobiernos se han dedicado a golpear, arrojar agua y gases lacrimógenos contra los plantados. Los movimientos de esos países suelen sobrepasar los dos o cinco mil jóvenes, pero cuando se citan acciones masivas suelen sobrepasar a los 20 mil. En México, a pesar de que los problemas que sufrimos son 10 veces peores (más de 52 mil muertos, gigantesco desempleo, salarios de hambre y abandono total de los servicios de salud y educación) nuestros plantones de indignados son muy débiles y el movimiento estudiantil desde hace 11 años está jodidísimo. Pero hay que esperar, hay que trabajar mucho más, debemos vivir con mucha esperanza pensando en que en los próximos meses, empujados por la corrupción institucionalizada, el movimiento se reiniciará.
7. En México se han multiplicado los movimientos de descontento y de protesta en la ciudad de México y en el resto del país; pareciera que ya nadie se traga los mil un discursos del presidente ilegítimo Calderón y de la clase política; pero parecen aún débiles porque el número de sus participantes es aún poco numeroso. Para que Calderón asista a un acto político se deben tender cientos de rejas resguardadas por miles de elementos militares y policíacos. Espero que se repita el permanente boicot que la ciudadanía practicó contra el gobierno de Fox –sobre todo en el período del desafuero contra López Obrador, que donde abría la boca siempre recibía una respuesta como protesta. ¿Cuándo crecerán en México los plantones de indignados frente a la bolsa de valores del Paseo de la Reforma y en la plaza de Coyoacán? Todos los movimientos de masas son válidos si ayudan a la transformación social.