10 de enero de 2012, 01:31Por Yamilé Luguera González*
La Habana (PL) Ubicada en el Golfo de Batabanó, aproximadamente a 50 kilómetros de la isla de Cuba y a 162 kilómetros de La Habana, se abre a nuestros ojos como primera visión Nueva Gerona, enriquecida por el arte y los sitios increíbles.
El territorio, integrado por los 672 cayos e islotes que conforman el archipiélago de los Canarreos, muestra a los visitantes una accidentada costa con vegetación exuberante y relieve de mogotes.
A bordo de las embarcaciones El Iris, Río Las Casas y Río Júcaro, tres confortables catamaranes que vencen a diario la travesía entre la Isla y Batabanó, se accede a este enigmático lugar.
La vía aérea también es una opción, con un viaje muy breve hasta el aeropuerto, en las afueras de Nueva Gerona.
Municipio Especial de la nación desde 1976, sus principales asentamientos poblacionales son Nueva Gerona, cabecera municipal; Santa Fé y La Demajagua.
Estos, rodeados por el encanto de Sierra Las Casas y Sierra Caballo, brindan al espectador una vista increíble de las elevaciones desde la ciudad.
La mayor elevación de la isla es la Sierra de La Cañada, con 303 metros de altura, y los ríos más importantes son Las Nuevas, San Pedro, Las Casas y Júcaro.
Hay poblados menores, como los repartos Delio Chacón, José Martí, Patria, La Victoria y Los Conyugales.
Con variadas ofertas de alojamiento, para vacacionar existen los hoteles Gaviota, La Cubana, La villa Isla de la Juventud, El Colony, Isla Azul Rancho del Tesoro, y El Campismo Arenas Negras y otros.
La Isla de la Juventud es llamada por muchos la tierra de los mil nombres, luego de que el almirante Cristóbal Colón la descubriera el 13 de junio de 1494, en su segundo viaje a la región, y la llamara San Juan Evangelista.
Isla de las Cotorras y del Tesoro están entre sus primeros nombres, en la época en que sirvió de refugio a piratas y corsarios entre los siglos XVI y XVIII.
Para los aborígenes, Siguanea, Camaraco o Guanaja; mientras que la denominación de Isla de Pinos fue la más duradera, con su origen en los bosques de pinos de la especie Caribbean, que cubrían sus espacios.
En el siglo XIX la metrópoli española decidió su colonización y se fundó su capital, Nueva Gerona, el 17 de diciembre de 1830.
Además, recibió el nombre de Isla de los 500 Asesinatos, conferido por el escritor revolucionario cubano Pablo de la Torriente Brau, con motivo de los crímenes cometidos en el otrora Presidio Modelo, hoy Palacio de los Pioneros del Municipio.
Su último topónimo, Isla de la Juventud, se debe a los miles de jóvenes de distintas partes del mundo que vinieron a superarse y de varias provincias de Cuba que asistieron a escuelas en el campo y colaboraban en las plantaciones de cítricos.
Unos dos mil 300 estudiantes de cuatro continentes se encuentran en la isla, entre ellos los que participaron del Nuevo Programa de Formación de Médicos Latinoamericanos y alumnos de pedagogía.
Su actividad económica fundamental es la agricultura, principalmente en cítricos, y también la extracción de mármol, pesca y cerámica, tanto utilitaria como artística.
Bajo su capa vegetal, las elevaciones encierran un tesoro de mármol en diversas variedades, como verde, rosado, negro y blanco, entre otros.
Existe en ella el Parque Nacional Ciénaga de Lanier, gran reserva natural y catalogada entre sus tesoros naturales.
Cuenta con una zona protegida por sus elementos naturales y arqueológicos, espesos bosques tropicales que camuflan a iguanas, cotorras, jutías, palomas, caimanes y puercos cimarrones.
El Parque Nacional Marino de Punta Francés, en el litoral sudoeste de la Isla, figura como un sitio de obligada estancia para el turismo de cruceros que visita el archipiélago cubano.
Las habituales paradas en el lugar permiten a los visitantes el disfrute de excelentes áreas de playas, ofertas náuticas y excursiones por tierra a puntos de interés en la geografía de la isla.
La selección del lugar tiene su origen en una virgen y rica naturaleza, la transparencia de sus aguas y la belleza de los fondos marinos, los que cuentan con una de las barreras coralinas mejor conservadas del planeta.
En esta área se ubica la zona de buceo vinculada al Hotel El Colony, Centro Internacional de buceo en Cuba, con un tramo de costa de seis kilómetros de extensión, entre Punta Pedestales y Punta Francés, en general con 56 sitios para esta disciplina.
Las inmersiones en la Pared de Coral Negro, el Túnel del Amor, la Cueva Azul, El Pasaje Escondido, Cueva de los Sábalos, Piedra de Coral, EL Salto, Ancla del Pirata, Paraíso de las Levisas y Pequeño Reino deleitan la vista de los buceadores.
Desde la Isla se accede al cercano Cayo Largo del Sur, con su maravillosa marina y sus bellas playas, su delfinario y sus centros de buceo.
Playa Bibijagua, famosa por sus arenas negras, debido a la acción erosiva del mar sobre las rocas de mármol, brinda un espectáculo diferente a la vista, adaptada a la arena fina y clara que cubre las del resto de Cuba.
A unos tres kilómetros está el Presidio Modelo. En 1925 se colocó la primera piedra de esta monumental construcción, similar a otro construido en Illinois, Estados Unidos, llamado Joliet. De ahí que solo dos en el mundo ostenten su particular forma circular.
Con capacidad para cinco mil hombres distribuidos, dos por celda, se encarcelaba a presos comunes, pero a partir de 1931 se le habilitó para presos políticos. Pablo de la Torriente Brau fue uno de ellos.
En 1939, durante la segunda guerra mundial, dos de los edificios se utilizaron como campos de concentración, solo para hombres mayores.
Después del asalto al Cuartel Moncada, en 1953, el grupo de revolucionarios capturados fue traído a estos edificios, en los cuales Fidel Castro y sus compañeros fueron encarcelados hasta mayo de 1955.
La finca El Abra, donde fue confinado el joven José Martí, es hoy un sitio histórico, museo y fue declarada Monumento Nacional.
Las Cuevas de Punta del Este, ubicadas al Sur de la Isla, se conocen como la Capilla Sixtina del arte rupestre cubano, por el gran valor histórico arqueológico de sus pictografías aborígenes en rojo y negro.
Se encuentra también el Centro experimental de Artes Aplicadas (CEAA), fundado en 1979 por el ceramista y escultor Carlos Finalés Hernández y por un grupo inicial de colaboradores, tales como: Amelia Carballo, Ángel Norniella y Walfrido Morales.
Se llamó originalmente Taller Experimental de Artes Aplicadas (TEAA) y, desde sus inicios, fue orientado al desarrollo de la cerámica.
Partiendo del CEAA, se realizaron cursos de cerámica para niños, jóvenes y adultos; se creó la primera revista de esa especialidad en Cuba y lse distribuyó nacionalmente.
La segunda edición de la Feria nacional de la cerámica tuvo participación internacional y fue presidida por Carlos Finalés Hernández.
La Experiencia de conocer la isla de Juventud es incomparable, distinta y privilegiada para los que hemos tenido esa posibilidad.
* Arqueóloga, Espeleóloga, Buzo Especialista y colaboradora de Prensa Latina.
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