Pàgina principal  |  Contacte  

Correu electrònic:

Contrasenya:

Inscriviu-vos ara!

Heu oblidat la vostra contrasenya?

LA CUBA DEL GRAN PAPIYO
Per molts anys, Tatisverde !                                                                                           Per molts anys, TATIS-7 !
 
Novetats
  Afegeix-te ara
  Plafó de missatges 
  Galeria d’imatges 
 Arxius i documents 
 Enquestes i Tests 
  Llistat de Participants
 Conociendo Cuba 
 CANCION L..A 
 FIDEL CASTRO.. 
 Fotos de FIDEL 
 Los participantes más activos 
 PROCLAMA AL PUEBLO DE CUBA 
 
 
  Eines
 
General: PUNTADA SIN DEDAL...
Triar un altre plafó de missatges
Tema anterior  Tema següent
Resposta  Missatge 1 de 1 del tema 
De: ♥ SuaveQuel ♥  (Missatge original) Enviat: 24/02/2012 22:05
Imagen19.jpg

Cuando regalamos algo de nosotros a otras personas,
no necesariamente estamos esperando algo a cambio,
de ahí que muchas veces haya más placer en dar que en recibir.

Sin embargo, muy a menudo aparece una enfermedad destructiva que

nos azota a todos los seres humanos: el orgullo.

Alguien reclamando acerca de su ex, a quien aún amaba me preguntaba:

“¿Acaso tú crees que yo me voy a poner a mandarle un mensaje,

así por así, sabiendo que él no me ha dado ni una sola llamada

ni se ha dignado a mandarme un solo mensaje?”

Y mi respuesta fue SÍ y...? ¿Hay algún problema en ello?

¿Es un delito de lesa humanidad? ¿Qué no es más contraproducente,

que te muerdas la lengua para no decir lo que sientes?

Siempre hay que poner unos límites, nadie lo niega.

Sin embargo esos límites no pueden caer en el error del encierro.

Es normal que quieras apartarte de alguien,

pero hay algo que debemos recordar: todas las personas con sus

buenas o malas acciones, han estado en nuestras vidas y de cualquier

forma han sido nuestros maestros.

El día que dejamos de expresar un sentimiento es porque

ya no lo sentimos, no hay un antes ni un después.

Mientras en nuestro corazón haya un pedacito de la otra persona,

ahí estará presente por más que queramos negarlo.

Contradecirnos, aparte de ser una locura,

es una estrategia macabra para nuestra alma,

de esta forma lo que hacemos es inflarnos como globos

con las cosas que no queremos decir y el problema es que tarde

o temprano ese globo se estalla y quizá no sea de la manera más adecuada…

¿no es preferible evitar dicha explosión?

¿Acaso no resulta más sencillo decir lo que sentimos en lugar

de guardárnoslo en el corazón bajo llave?

Debemos dejar de dar “puntadas sin dedal”,

es decir, debemos dar sin esperar que todo lo que

entreguemos regrese multiplicado por inercia.

Con dar, ya estamos ganando, pues estamos repartiendo

nuestra riqueza y no la estamos avasallando cuan

terratenientes tacaños y despiadados.

Tenemos una obligación con el mundo: devolverle aunque sea en una mínima

parte alguna de las bendiciones que nos regala,

ya que si miramos bien, el universo nos brinda hermosos

atardeceres, cielos multicolores, paisajes deslumbrantes,

amaneceres preciosos y una infinita gama de sensaciones…

¿Y nos pide algo a cambio? No. Hay un amor infinitamente desinteresado

para con nosotras, entonces ¿por qué no podemos imitarle?

No debemos seguir siendo recipientes dispuestas sólo a recibir.

El amor que tienes es el que das. Y si no das nada…

¿entonces, qué es lo que tienes? Debes reconocer que eres inmensamente

rica y que tu fortuna humana es absolutamente incalculable.

Sólo compartiendo tu riqueza contigo misma y con los demás,

aprenderás a saborear cada soplo de vida.

Date cuenta que sólo recibirás si tú das primero.

Recuerda: Hay que dar sin esperar recibir.

Y hay que recibir como si nunca hubieses dado.


jajajajajajajajaja

lapintora.jpg


Primer  Anterior  Sense resposta  Següent   Darrer  

 
©2025 - Gabitos - Tots els drets reservats