El enviado especial de las Naciones Unidas (ONU) para Libia, Ian Martin, denunció este viernes que varios prisioneros que eran partidarios del ex líder libio, Muamar Al Gaddafi, fueron torturados hasta la muerte, en una clara violación de sus derechos humanos.
“El maltrato y las torturas a los detenidos continúan. La misión de la ONU en Libia expresa su profunda inquietud por la muerte de tres personas en el centro de detención en Misurata” al noroeste del país, destacó Martin en un informe dirigido al Consejo de Seguridad de la ONU.
El funcionario de la ONU sostiene que su organización ya había ventilado, de antemano, que a los partidarios de Gaddafi se les torturaba en “la nueva Libia”, y por ello comenzaron a indagar sobre la realidad de los presos en el país.
“Las muertes tuvieron lugar el 13 de abril y tenemos información confiable de haberse producido como resultado directo de torturas. Además, otros informes revelan que al menos siete personas han sido torturadas hasta la muerte en el mismo centro”, manifestó.
Informó que esta instalación penitenciaria está bajo la administración del Ministerio del Interior, que a su vez depende del Consejo Nacional de Transición (CNT).
En ese sentido, denunció la doble moral del CNT, que por un lado se comprometió a no llevar a cabo estas prácticas y a respetar los derechos humanos de la población, y por el otro sigue torturando a los privados de libertad.
“Hemos podido constatar también que aunque el gobierno se compromete a garantizar el acceso de los ciudadanos a la justicia, siguen existiendo serios obstáculos”, apuntó.
De igual manera, agregó que existen indicios de torturas en otras partes de Libia, incluso en ciudades como Trípoli, Zawiya y Zintan; además de cárceles clandestinas.
Según el Ministerio del Interior, unos tres mil detenidos se encuentran bajo su control, pero Martin refirió que otros cuatro siguen estando en manos de ex rebeldes que combatieron contra Gadafi.
“Eliminar estas prácticas debe ser la mayor prioridad gubernamental para alcanzar una nueva cultura de los Derechos Humanos y una nueva legalidad en Libia”, concluyó.