Las Tunas.— A pesar de la paciente labor de información y de persuasión que realizan especialistas de la empresa eléctrica, todavía falta receptividad, conciencia y seriedad en numerosos clientes del sector residencial, quienes siguen incurriendo o reincidiendo en el fraude (hurto) de energía.
Ese fenómeno aflora mes por mes, cuando los inspectores vuelven a detectar recurrentes violaciones de lo dispuesto en la ley y, conforme al Decreto 260, les aplican multas de 500 pesos a los que incurren en tales indisciplinas que habitualmente rondan el centenar de clientes.
Según estudios, como promedio, cada estafador le "succiona" a la red y a la economía alrededor de 810 kW/h: "mordisco" que suma millones en el contexto de una praxis que involucra a no pocos indolentes aquí y en otras zonas del archipiélago.
Ya comenzó la instalación de nuevos metros contadores electrónicos para sustituir progresivamente los de inducción: obsoletos y mucho más vulnerables a la manipulación, fraude o delito.
De acuerdo con información ofrecida por José Antonio Pino, especialista encargado de pérdidas eléctricas en la empresa provincial, hasta la fecha se han situado 9 000 aparatos, 3 355 de ellos en la cabecera provincial.
Entre otras ventajas, el nuevo equipo sobresale por una mayor precisión en sus mediciones, más comodidad para la lectura, no es tan propenso a la alteración consciente, tiene sello más seguro y mide bajo cualquier condición.
En su empeño por reducir pérdidas y hacer un uso correcto y más eficiente de la energía, la empresa tunera ha iniciado también un programa encaminado a instalar metros multifunción en panaderías y otras unidades de alto consumo, a la vez que progresa el cambio de controladores en entidades pertenecientes a los Órganos Locales del Poder Popular.
A ese noble propósito también debe contribuir gradualmente la normalización del servicio en núcleos o bateyes que durante décadas se han alimentado mediante antiguas líneas de centrales azucareros: labor que ya concluyó en 12 asentamientos y prosigue en otros tres.