La Brigada Especializada de la Policía arresta a jóvenes que se dedican a la prostitución y la venta de drogas en el malecón habanero y sitios de la capital.
Los popularmente llamados "Jineteros", son fichados con Actas de Advertencia y enviados a su lugar de origen-algunos proceden de otras provincias- con una fuerte multa. Si reinciden, pueden ser juzgados y condenados a cuatro años de privación de libertad.
Estos muchachos, dicen estar buscando un "PEPE" (español) o algún "Amichi" (italiano), solicitando por los servicios sexuales unos 10 "Fulas" (pesos convertibles); y con un poco de suerte, lograr una visa de turismo, o casarse con un "Yuma" para salir de Cuba… "brincar el charco".
Los que trafican con drogas, son llevados para la unidad del Departamento Técnico de Investigación (DTI), ubicada en calle 100 y Aldabó. Allí son procesados y condenados a 20 años de prisión, en dependencia de su colaboración y esclarecimiento de la procedencia de las drogas.
En el malecón hay niñas de 13 años que están "luchando el Dólar", con el consentimiento de sus padres. Algunos extranjeros se dedican a tomarles fotos desnudas, les ofrecen drogas o hacen videos pornográficos, algunos de cuyos títulos son: "Formadoras de Maestros", "Chicas de la Escuela Salvador Allende" o "La Universidad de Ciencias Informáticas". Estos conocidos "pellejos" se venden a cincuenta pesos moneda nacional.
En la Habana Vieja hay zonas delimitadas, como "El Solar de las Holguineras", el parque de las "Tuneras" o la famosa esquina de "Monte y Cienfuegos", donde "trabajan" mujeres que realizan sexo por cinco pesos convertibles o un "lavado de cabeza",( sexo oral ) por un peso, contando con la protección de policías corruptos.
Las de provincias viven hacinadas en pequeños cuartos, ninguna quiere volver a su pueblo. Casi todas tienen un proxeneta (chulo) que las "cuida" y les quita la mitad del dinero ganado. Además de pagarle al dueño del cuarto un peso por cliente.
El Comandante Fidel Castro dijo en una ocasión, que las prostitutas cubanas son las mejores del mundo, porque tienen "buena presencia y alta formación académica", por lo tanto son seguras y cultas; inclusive puedes encontrar alguna militante de la Unión de Jóvenes Comunistas, frustrada y agobiada por las necesidades.
Las personas mayores dicen que estamos viviendo en los años 50 cuando proliferaban las zonas de tolerancia, como el muy famoso Barrio de Colon,o el Barrio de San Isidro, donde en una época vivió el famoso chulo cubano Alberto Yarini "EL GUAYABITO".
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