El Ministerio del Medio Ambiente chino ha admitido la existencia de los llamadas ‘pueblos de cáncer’: poblados donde las tasas de la enfermedad maligna se disparan a causa de las fábricas contaminantes.
El reconocimiento se expresa, en las primeras menciones del término, en un documento oficial. El anuncio llega años después de que se desatara, primero dentro del país y luego a nivel mundial, la polémica por la alarmante incidencia de los casos oncológicos en algunas regiones.
“Los desechos venenosos y perjudiciales para la salud caen en el medio ambiente”, reseña el informe ministerial. “Un alto nivel de contaminación se registra en las aguas. Por eso crece el número de casos de enfermedades entre la población. Algunos distritos incluso se vieron sometidos a la definición de los pueblos del cáncer”.
Los funcionarios admitieron también que China sigue empleando sustancias tóxicas en la producción, a pesar de estar prohibidas. Uno de los juristas del Ministerio, Vang Kanfa, confirmó que el término de “pueblos del cáncer” ha aparecido en el lenguaje oficial recién este viernes.
“El informe revela que el nivel de contaminación en algunos sitios del territorio de la República Popular de China, conduce directamente a enfermedades oncológicas entre la población”, recalcó el funcionario. “Es de importancia vital que el Gobierno preste atención a este problema”.