La Asociación Memoria Abierta de Argentina ha digitalizado 530 horas de imágenes del juicio seguido en 1985 contra las juntas militares que gobernaron el país durante la dictadura (1976-1983), para preservarlas y permitir su acceso público.
El archivo audiovisual, en cuyo proceso de digitalización ha participado la Universidad española de Salamanca, donde se conserva una copia, fue presentado en el auditorio David Viñas del Museo del Libro y de la Lengua de Buenos Aires.
"Desde hace muchos años sentíamos la necesidad de que ese material estuviera preservado y al acceso del público, pero era un proceso bastante caro y no disponíamos de los medios, así que fue una suma de voluntades", explicó a Efe Alejandra Oberti, coordinadora del Archivo Oral de Memoria Abierta.
Oberti indicó que el material original estaba conservado en el tribunal donde se realizó el juicio, la Corte Suprema de Justicia de la Nación, "pero sin prácticamente posibilidades de consultarse".
"Había algunas copias muy fragmentadas de algunas partes, pero de muy difícil acceso, dos cintas que se perdieron y tres que están irrecuperables. El resto se ha podido recuperar todo", añadió.
Cuando se celebró el juicio contra las juntas militares en 1985, el tribunal tomó la decisión de filmar íntegramente el proceso.
"Fue un filmación de 530 horas realizada por la televisión pública en un sistema que era el que se usaba por esos años, el "umatic", que es muy estable, pero que rápidamente cayó en desuso", señaló Oberti.
La digitalización de las imágenes permitirá no sólo preservar una importante parte de la historia de Argentina, sino también darle acceso a investigadores, periodistas, profesores o a cualquier persona interesada.
"Tenemos un reglamento interno, las personas se comprometen a hacer un uso responsable y respetuoso de aquello que ven y de las notas que toman. No se pueden copiar salvo que se necesite para alguna producción o material en particular, y en ese caso el tribunal tiene que dar autorización", explicó Oberti.
Para la coordinadora del Archivo Oral de Memoria Abierta, "realizar un trabajo serio en el cuidado de los archivos y dar un acceso público a los materiales es fundamental".
"Argentina tiene mucha política de memoria y un movimiento de derechos humanos que fue muy activo desde el momento de la dictadura y no se mantuvo al margen de ninguno de los procesos", dijo.
"Sin embargo, -añadió- tenemos una política de archivos débil y trabajos como este son un pilar sumamente importante".
La Asociación mantiene la idea de grabar y archivar los numerosos juicios relacionados con los crímenes cometidos durante la dictadura que se celebran en la actualidad.
El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales está realizando un registro de ellos, "pero con algunas dificultades", precisa Oberti, "porque los juicios son en distintos lugares del país y no siempre están los mismos recursos disponibles".