El compositor francés Henri Dutilleux, ha muerto hoy miércoles a los 97 años en París, según ha comunicado su familia. Dutilleux, famoso por sus obras tan audaces como accesibles era uno de los músicos contemporáneos más interpretado en el mundo. Sus piezas lograron conquistar a un público a menudo reticente ante la música moderna.
Dutilleux, en el 2005, en su casa de París. AFP/JEAN-PIERRE MULLER
El pasado enero, con motivo de su cumpleaños, su mejor regalo fue la primera grabación en CD de su obra 'Correspondances', creada en el 2003. Este ciclo de canciones fue grabado por la Orquesta Filarmónica de Radio France y las voces de Barbara Hannigan y Anssi Karttunen, dirigidos por el maestro finlandés Esa-Pekka Salonen, que calificó entonces a Dutilleux como "el compositor vivo más grande".
Más interpretado que Pierre Boulez y mucho menos radical que este último, Henri Dutilleux fue una personalidad que marcó la escuela francesa de la postguerra, como Olivier Messiaen. El crítico musical Claude Glayman le calificó de 'clásico moderno' o de 'clásico de vanguardia'. Su música, muy accesible, sedujo a un público amplio sin que ello le apartara en sus investigaciones sobre sonoridades raras y las emisiones de los sonidos.
Heredero de la estética impresionista, Dutilleux ejerció de puente entre el enriquecimiento armónico de Debussy y Ravel y la música espectral de la década de 1970 de Tristan Murail y Gérard Grisey. "Es uno de los pocos compositores contemporáneos que entró en el repertorio en vida. Tenía eso en común con Olivier Messiaen", destacó el director de orquesta Laurent Petitgirard.
Triunfo en EEUU
Boulez le dio la espalda tras la creación de su primera sinfonía en 1951, por considerarlo una forma anticuada, y le marginó de la sociedad de conciertos 'Domaine musical' que Boulez lanzó con el actor Jean-Louis Barrault en 1954.
Pero Dutilleux, que se mantuvo al margen de modas y etiquetas, triunfó en Estados Unidos donde apreciaron su invención de un mundo sonoro diferente. Entre los años 1980 y 1990, su reputación alcanza una dimensión mundial. Las instituciones musicales más prestigiosas le solicitan partituras. Entre ellas figuran orquestas de Boston, Washington, San Francisco, la Filarmonía de Berlín y destacados intérpretes como los directores Charles Munch, George Szell, Seiji Ozawa y el violonchelista Mstislav Rostropovitch y la soprano Renée Fleming.
El catálogo de Dutilleux incluye entre otros dos sinfonías, un ballet, diversos conciertos para orquesta y música de cámara. Entre sus obras más interpretadas figura su concierto para violonchelo 'Tout un monde lointain', estrenada en 1970 en el Festival de Aix-en-Provence. Después crearía 'Timbre, espace et mouvement' (1976-78), una interesante pieza para orquesta con registros sonoros extremos inspirada en el cuadro 'La nuit étoilée', de Vincent Van Gogh.