Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

LA CUBA DEL GRAN PAPIYO
¡ Feliz Cumpleaños cudeiro amoeiro !                                                                                           ¡ Feliz Cumpleaños Lobotrol !
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 Conociendo Cuba 
 CANCION L..A 
 FIDEL CASTRO.. 
 Fotos de FIDEL 
 Los participantes más activos 
 PROCLAMA AL PUEBLO DE CUBA 
 
 
  Herramientas
 
General: Vilma decía " Nuestras putas cubanas " .... yo digo nuestro Papa ...
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: Ruben1919  (Mensaje original) Enviado: 11/06/2013 12:18
 

Una respuesta a matilda que dice que Bergoglio  fué cómplice de la dictadura militar .....

 

 
Enviado: 10/05/2013 07:31
Sea más concreta troska maluca y culipronta matiburra ... siempre he tomado a Bergoglio como un  todo y con historia , lógico .- Y en ninguna parte he dicho que nuestro Papa , porque es nuestro ...  bueno o malo ... porque es sudaca .... sea un revolucionario o que llene las expectativas del marxismo leninismo ... o que vaya a ordenar la entrega de millones de condones o de pildoras por toda la tierra ...o que vaya a permitir  que sean ordenadas sacerdotisas las mujeres .. o que vaya a permitir el matrimonio gay ....o que vaya a condenar a eeuu o a israel por los genocidios .... pero si puedo esperar que se interese por los hombres y pueblos que sufren la miseria física y moral y que haga oir su voz que tiene peso en el concierto mundial  en tal sentido .- He dicho y lo repito ... nadie que se diga revolucionario puede desconocer el hecho de que en América Latina la inmensa mayoría de la población es católica y que para acabar con el capitalismo y con la explotación del hombre por el hombre ...y con la del imperio contra los paises pobres ....  tiene que contar con esas masas católicas con las cuales habrá que andar el camino hombro a hombro .- Y es por eso que me he confesado chavista ... y convencido de la vigencia de la teología de la liberación ... por más que yo sea ateo , para poder lograr la liberación verdadera de Nuestra América .- Y si miro cada paso que está dando Francisco con la mayor atención es para orientarme en qué sentido es que va a ir su pontificado ... porque es de interés nuestro y mundial ...   .- Empiece por mostrar una prueba fehaciente bobalicona de que él fué responsable del genocidio , como autor o cómplice ...porque lo que yo he visto es que solo hay indicios ... que han ido desapareciendo con los días .-
 
-----------------------------------
 
Y una defensa de Vilma a las putas de Cuba ..
 

Rosa Miriam Elizalde*

Una mujer en nuestra Iliada

Mi más temprano recuerdo de Vilma Espín está asociado a una tarde de mi escuela primaria en Sancti Spíritus, una de las primeras villas fundada por los españoles en Cuba, que a no ser porque en 1977 se hizo una nueva división político administrativa de la isla, seguiría siendo una suerte de aldea de Bernarda Alba y no la capital de la provincia que hoy es. Allí, como en todas partes de mi país en la década de los años 70, las historias de la Sierra Maestra y de la lucha clandestina en La Habana y Santiago contra la tiranía de Batista eran nuestra Iliada y la maestra nos la contaba por iniciativa propia como si la estuviera viviendo otra vez, en cierto modo espectral.

Un día llevó una foto de una mujer bellísima, vestida de guerrillera y sonriendo a la cámara. La había arrancado de una revista, creo. Clavó la imagen en la pizarra y nos habló de esta muchacha que antes del triunfo de la revolución llegaría a ser la jefa del Movimiento 26 de Julio en todo Oriente, se había enamorado en la Sierra Maestra de Raúl Castro y era en ese momento la presidenta de la Federación de Mujeres Cubanas, organización particularmente querida en los pueblecitos rurales de Cuba porque significaba círculos infantiles -a los que yo asistí-, empleos, leyes de protección familiar y las escuelas para campesinas Ana Betancourt, que llegaron a graduar cada año a 10 mil mujeres -entre las que se encontraban casi todas las de mi familia-, por primera vez tenidas en cuenta institucionalmente en un país de visceral tradición machista.

No logro recordar ahora todos los detalles de las palabras de la maestra Juana Morera. Sin embargo, jamás olvidé la anécdota en la que Vilma, buscada con saña por los esbirros de la dictadura batistiana, se salvó de una emboscada en plena ciudad de Santiago de Cuba. La casa donde estaba escondida fue identificada y cuando ya los policías registraban el lugar, ella saltó al tejado de la casa contigua, en camisón de dormir y con el pelo suelto, que entonces le llegaba hasta la cintura. El techo era de dos aguas y como su figura iba emergiendo lentamente ante la visión de una señora que estaba tendiendo ropa en el patio, ésta creyó que era la mismísima virgen María quien estaba apareciendo ante sus ojos. La mujer se arrodilló y empezó a gritar: ¡Milagro! ¡Milagro! En la confusión, Vilma escapó.

Por supuesto, a medida que fui creciendo, Vilma me resultó cada vez más familiar y milagrosa. Y utilizo esta última palabra con alevosía, porque en el camino íbamos descubriendo que la Federación de Mujeres Cubanas defendía y ejecutaba un proyecto de dignidad para la mujer sin enfrentarla socialmente al hombre, sino educándolo, y a la par luchaba a brazo partido por erradicar todo vestigio de discriminación. Fue ella la primera que le habló al país acerca de la igualdad de género y, en particular, de los derechos de los homosexuales y de los transexuales a una vida plena, a contracorriente de una especie de marxismo victoriano que se mezcló en la isla con la plaga autóctona del machismo e hizo sufrir a no poca gente.

La primera vez que conversé con ella, frente a frente, fue a principios de los años 90, a raíz de un reportaje que yo había publicado en Juventud Rebelde acerca de la prostitución en Cuba, que reaparecía asociada al turismo, una de las principales fuentes de ingresos en divisas a las que acudió desesperadamente el país para atenuar la crisis económica. Con la caída del campo socialista y el oportunista recrudecimiento del bloqueo estadunidense en medio del llamado periodo especial, la "jinetera" se convirtió de la noche a la mañana en un producto de marketing en el mercado político, que supuestamente servía para demostrar el fracaso de la revolución cubana. Se sacaba una cuenta muy simple: si había reaparecido la prostituta -una figura casi desaparecida poco después de 1959, gracias a las medidas sociales-, el proyecto político había abortado.

Jamás olvidaré la conversación con Vilma. Me impresionó su dulzura y mientras le hablaba a esta periodista que prácticamente acababa de graduarse en la universidad, no podía quitarme de la cabeza la imagen primera que tuve de ella en mi escuelita perdida en el centro de la isla. Vilma me dio un consejo que para mí fue una lección de ética: "No olvides que las jineteras no son prostitutas a secas; son en todo caso nuestras prostitutas, y no hay que satanizarlas, porque se corre el riesgo de actuar contra la víctima, en vez de atacar el mal."

Entre las muchas personas que entrevisté para aquel reportaje que luego creció y terminó en un libro, se encontraba Alfonsina Benítez. Ella había sido una de las 100 mil prostitutas que existían en Cuba en 1959, la más alta tasa por habitantes probablemente del mundo -el país tenía entonces una población de 6 millones. Alfonsina, como muchas otras, se hizo enfermera gracias a los programas de la Federación de Mujeres Cubanas. Entre otras muchas cosas, le pregunté qué era lo más importante que le había ocurrido en su vida. Me respondió sin titubear: "Todas las mujeres que yo conocí en la casa de putas tenían un nombre falso, para no avergonzar a su familia. Lo más importante que me ha ocurrido en la vida es que recuperé mi nombre."

Anoche, en el Teatro Karl Marx de La Habana, rencontré a Alfonsina. Estaba entre la multitud que asistió a uno de los homenajes que se le hicieron a Vilma en todo el país, apenas se conoció la noticia de su muerte. Alfonsina ni siquiera me vio cuando la saludé entre la gente. Lloraba como una criatura.

* Periodista cubana



Primer  Anterior  2 a 2 de 2  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 13/06/2013 16:05
 
Seguramente conservará muchas de las cagadas de la vieja iglesia ...  pero con todo y eso es nuestro Papa ... y algunos buenos y nuevos  aires respirará el mundo que nos harán sentir orgullosos de haber nacido en Nuestra América  .-
 


 
©2025 - Gabitos - Todos los derechos reservados