17 de septiembre de 2013, 09:13Roma, 17 sep (PL) La operación para enderezar el crucero italiano Costa Concordia finalizó con éxito, anunciaron hoy las autoridades, y el navío retornó a la posición vertical luego de permanecer volcado sobre el lado derecho desde su naufragio en enero de 2012.
En conferencia de prensa, el jefe de la maniobra, Franco Gabrielli, informó que los procedimientos iniciados la víspera se completaron sin problemas, pese a demorar más de las 12 horas previstas y extenderse a 19 horas de trabajo.
Según la prensa local, la alegría inundó tanto a técnicos de la operación como a habitantes de la isla toscana del Giglio, en cuyas costas naufragó el crucero, por lo cual acontecieron numerosas escenas de celebración, saludos y abrazos.
Gabrielli declaró que se logró dar un primer paso muy importante, pero todavía falta mucho trabajo para poder retirar del mar el vehículo, el cual en estos momentos se encuentra apoyado en una plataforma.
Ahora, agregó, será necesario reparar toda la parte dañada durante el naufragio para colocarle los flotadores y estabilizadores que permitirán trasladar el barco, por lo que este permanecerá frente a la isla algunos meses más.
Durante la operación de viraje no se logró encontrar los cuerpos de dos de la víctimas fatales del accidente -en el hundimiento fallecieron 32 personas-, y hoy continuarán las labores de búsqueda de ambos desaparecidos.
Asimismo, autoridades ambientales señalaron que, al parecer, por ahora no se han producido escapes de materiales contaminantes como aceites combustibles o detergentes, una de los mayores peligros de la maniobra de rotación.
De cualquier forma, la Agencia Regional de Protección Ambiental Toscana Arpat permanecerá alerta sobre el asunto y tomará muestras de las aguas para analizarlas con más detenimiento en aras de preservar el medio ambiente.
La operación para enderezar el buque se considera la de mayor complejidad de su tipo desarrollada en Italia, dadas las dimisiones del navío -290 metros de largo y 114,500 toneladas-, con un costo de unos 750 millones de euros y la participación de 500 personas.
El Costa Concordia naufragó en enero de 2012 con unos cuatro mil individuos a bordo, entre pasajeros y tripulación, y permaneció durante meses en el lugar del trágico suceso pues su retirada fue pospuesta en varias ocasiones.
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