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22 de septiembre de 2013, 11:21 Moscú, 22 ago (PL) El canciller ruso, Serguei Lavrov, acusó hoy de chantaje a Estados Unidos por exigir una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU basada en la fuerza a cambio de que la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) colabore con Siria.
Washington chantajea a Moscú al afirmar que sin la aprobación de una resolución sobre Siria bajo el capítulo 7 de la Carta de la ONU, la colaboración de la OPAQ con Damasco se suspenderá, aseguró el ministro en entrevista transmitida por la televisión nacional rusa.
Lavrov deploró que la actitud estadounidense contradiga los acuerdos pactados recientemente tras sus reuniones con el secretario norteamericano de Estado, John Kerry, en Ginebra.
Aclaró que, según esos entendimientos, primero debe haber una decisión de la OPAQ y luego la resolución del Consejo de Seguridad en apoyo a esa decisión, pero no bajo el capítulo 7, que incluye el uso de la fuerza.
El canciller ruso sostuvo que a Washington y sus aliados les interesa más asegurar su superioridad en el Medio Oriente que solucionar el problema de las armas químicas en Siria.
Buscan, ante todo, asegurar las pruebas de su superioridad y no el objetivo que perseguimos nosotros de solucionar la situación de los agentes tóxicos en Siria, reiteró durante la entrevista.
Subrayó que si ese fuera el objetivo de Occidente no se posicionarían tal y como hacen en el Consejo de Seguridad.
Lavrov criticó la actitud ideologizada de Washington y sus aliados en la exigencia de derribar al gobierno sirio, luego que desde hace un bienio establecieron el esquema de que ya no hay lugar para el presidente Bashar al Assad, cuya renuncia reclaman a toda costa.
No pueden admitir ahora que se equivocaron otra vez, como en Libia, a la que bombardearon y pusieron al borde del colapso, o en Irak, donde hicieron lo mismo además de realizar una operación terrestre, dijo.
Recordó que esos países quedaron en una situación muy grave como resultado de esas agresiones y en la actualidad cada día decenas de personas mueren en atentados terroristas.
Al retomar el caso sirio, Lavrov criticó a Washington y París por su actitud agresiva sin que hasta el momento hayan podido presentar pruebas de que las armas químicas fueron disparadas por las tropas del presidente al Assad.
En alusión a la exigencia del Kremlin de que todas las evidencias sobre el uso de agentes tóxicos en Siria deben ser investigadas, respaldó la intención de inspectores de la ONU de regresar a Damasco, según expresó el jefe de ese equipo, Ake Sellstrom.
jf/jpm |
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