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 28 de septiembre de 2013, 16:27Asunción, 28 sep (PL) Los trabajadores del transporte paraguayo que permanecían crucificados hace casi dos meses en demanda del reintegro a sus puestos de trabajo lograron esta madrugada un histórico triunfo frente a la intransigencia patronal.
Encabezados por el secretario general del Sindicato de Trabajadores del Transporte, Juan Villalba, los choferes y empleados de la línea 30, firmaron el documento mediante el cual se les devuelve el derecho al trabajo y el respeto a las actividades sindicales.
El acuerdo, logrado en una reunión de varias horas de duración, permitió el cese de la dramática acción sindical en la cual permanecían nueve protestantes clavados por las manos a grandes cruces de madera en condiciones que ya afectaron su salud general.
Sólo uno de ellos, a pesar del acuerdo, prefirió no reintegrarse al trabajo y mantener la protesta por la vía judicial sin obstruir el logro del entendimiento que regresa al resto a la plantilla de la línea 30.
La suscripción del documento se logró después que todas las centrales sindicales del país amenazaron con ir a una huelga general si en el plazo de 72 horas no se daba una solución por el gobierno al problema.
Los médicos habían dictaminado serias consecuencias en el estado de salud de los crucificados, acompañados en su doloroso accionar por la esposa de Villalba, los cuales presentan complicaciones peligrosas por el largo tiempo de crucifixión.
Casi la totalidad de los choferes y empleados de la línea 30 apoyaron durante semanas a sus compañeros realizando una huelga general que paralizó el servicio de ese medio de transporte.
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