
El Gran Blanqueador, implicado en la trama de fraude fiscal con cemento en Ferrol
El amigo de Aznar, Blanco Balín, detenido en la Operación Clínker
M.T.
José Ramón Blanco Balín vuelve a tener problemas con la Justicia. Según ha podido saber ELPLURAL.COM, el que fuera vicepresidente de Repsol gracias a su estrecha relación con José María Aznar fue detenido en Madrid por un presunto delito de contrabando. También fue apresado José Martínez Parra, el hijo del empresario José Martínez Núñez, dueño de Teconsa hasta que ésta se hundió, afectada sobre todo por su relación con la trama Gürtel. Ambos están relacionados con la trama de fraude fiscal destapada esta semana en Ferrol y que habría evadido tres millones de euros.
La empresa Gallega de Molienda de Clínker SL se dedicaba a descargar su mercancía en el puerto exterior de Ferrol para después introducirla con camiones y furgonetas sin pagar aranceles. Con este sistema fraudulento que investiga la Guardia Civil dentro de la Operación Clinker la trama habría defraudado entre 2008 y 2009 un total de 3, 2 millones de euros, a base de mover ilegalmente 350.000 toneladas de clínker, un producto para fabricar cemento.
Cuatro detenidos
La Guardia Civil inició esta semana los registros en empresas y domicilios particulares "en busca de pruebas y posibles rastros de las sumas defraudadas" y detuvo a cuatro personas: un operario de la fábrica en Galicia (que ya está en libertad) y a tres personas en Madrid que ya están en libertad con cargos. Uno de ellos sería el Gran Blanqueador, el sobrenombre con que se conoce a José Ramón Blanco Balín en los ambientes judiciales. Otros apresados son José Martínez Parra, hijo del antiguo dueño de Teconsa, José Martínez Núñez; Juan Jesús Pérez Marco y Fernando Fernández Fernández, este último en la localidad de Betanzos (A Coruña).
La empresa defraudadora está actualmente en concurso de acreedores y en su día perteneció a Teconsa. El último presidente que figuraba en ella hasta hace bien poco era Blanco Balín. Pero, ¿quién es Blanco Balín?
Inspector blanqueador
Conocido también en los pasillos de los tribunales como el “ inspector blanqueador” , la historia de José Ramón Blanco Balín se remonta a la década de los 70, cuando comenzó su amistad con el joven José María Aznar, inspector de Hacienda como él, con el que por aquellas fechas escribió un libro de texto para el Centro de Estudios Financieros.
Su amistad con Aznar
Fue su larga amistad con el ex presidente Aznar lo que le colocó, en el mismo año de su victoria electoral, en 1996, en el consejo de administración de Repsol YPF, hasta llegar a ocupar el puesto de vicepresidente en el año 2000 y luego el de consejero delegado. Y de ahí su salto a algunas de las firmas más poderosas del país, como Gas Natural, Barclays, Banco Zaragozano, NH o Ercros. Blanco Balín aparece en el Registro Mercantil como administrador, socio o apoderado de más de 40 empresas, según constató Europa Press.
Gürtel, su destino
Su nombre estuvo entre los posibles sustitutos del ex ministro Miguel Boyer al frente de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH), pero no consiguió el cargo. Y en ese momento, el destino le mostró un camino que sólo él sabe si ha merecido la pena o al final será el comienzo del fin para su carrera al alza: se cruzó con el grupo de empresas de Francisco Correa, hoy conocido como la trama Gürtel, crecida a la sombra del PP.
El "gran blanqueador"
Blanco Balín llegó a formar parte de los consejos de administración de al menos seis de las compañías de Correa, como Orange Market, Hator Consulting, Osiris Patrimonial e Inversiones Kintimani, convirtiéndose en el “ gran blanqueador” no solo de la trama Gürtel, sino que también desde su propia empresa R. Blanco Asesores Fiscales SL, ubicada en la calle Guzmán el Bueno, 133, de Madrid, como asesor fiscal, se especializó presuntamente en facilitar la fuga de capitales a paraísos fiscales, como el Principado de Liechtenstein.
Los contratos de los feudos del PP
A Blanco Balín no se le podrá tildar nunca de hombre poco versátil ni de haber perdido el tiempo. Como administrador único de las compañías Rústicas MBS, S.L y Artas Consultoría consiguió jugosas adjudicaciones en el Ayuntamiento de Boadilla del Monte, donde la trama Gürtel se cebó con la anuencia del alcalde Arturo González Panero, entre ellas la concesión, por diez años, de la Oficina de Atención al Ciudadano (OAC) de esa localidad.
Además, consejero de Teconsa
Desde su cargo de consejero en la empresa Teconsa consiguió importantes adjudicaciones de las Empresas Públicas de Vivienda de los Ayuntamientos de Boadilla, Arganda del Rey y Majadahonda, y presuntamente pagó comisiones a la trama Correa para lograr que la Junta de las Comunidades de Castilla y Castilla y León le adjudicaran la construcción de la autovía de Olleros. Por cierto, la sede social de Teconsa en Madrid está ubicada en Serrano, 45, justo al frente de la oficina principal de las empresas de Correa, en la misma calle, en el número 40.
La autovía de Olleros
Una información de El País daba cuenta de un fax intervenido a Correa procedente de la Consejería de Fomento de Castilla y León, en el que se informaba de la adjudicación a Teconsa de la construcción de la autovía de Olleros, y en el que figuraba la anotación manuscrita de la cantidad de 73.650 euros, equivalente al 3% de la concesión, o lo que es lo mismo, la comisión a cambio de la adjudicación. Este dato le incluyó en la lista de los más de 100 imputados del caso Gürtel.