Por Su Jin
PANAMA, 19 oct (Xinhua) -- Con la ausencia de 11 jefes de Estado o Gobierno de los 22 países miembros, la XXIII Cumbre Iberoamericano se clausuró hoy en esta capital con reiterados reclamos de "reformas", lo que significa este mecanismo de cooperación regional se encuentra en un momento decisivo.
Analistas indican que tras años de rápido crecimiento económico, muchos países latinoamericanos ya no necesitan hacer todo lo que dice la "madre patria", como se acostumbraba anteriormente. Una de las constancias es la ausencia de varios jefes de Estado o Gobierno de la izquierda. Además, solo dos presidentes sudamericanos (de Colombia y Paraguay) asistieron al encuentro.
Se esperaba que Enrique Peña Nieto, presidente de México, próxima sede de la cumbre, detallara las medidas concretas para revitalizar ese instrumento en la conferencia de prensa previo al cierre del evento, pero abandonó Panamá con anticipación con el pretexto de tratar asuntos internos en su país, lo cual sorprendió a muchos de los participantes.
Por su lado, España, sumergida en una crisis desde hace varios años, en cierto grado ha venido perdiendo sus influencias tanto en lo económico como en lo político. Aunque el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, ha reiterado una y otra vez que España sigue concediendo suma importancia a América Latina, será difícil que el país europeo continúe aportando fondos para mantener ese mecanismo de cooperación.
En tanto, la Secretaría de la Comunidad Iberoamericana de Estados, como organismo permanente de la conferencia iberoamericana, afronta problemas como baja eficiencia y desvinculación de la realidad. Un funcionario de la delegación española, quien pidió permanecer en el anonimato, indicó que debido a las diferencias sobre ciertos temas, no se ha podido elegir a un nuevo secretario general en la cumbre.
Sin duda alguna, por la convergencia del idioma y la cultura, desde su fundación, la Cumbre Iberoamericana ha contribuido grandemente al fortalecimiento del entendimiento y la prosperidad común del grupo.
Como afirmara Rajoy en su discurso durante la cumbre, España tiene una inversión acumulada en Latinoamérica de unos 200.000 millones de dólares estadounidenses, mientras que los países latinoamericanos también han contribuido para que España se libre de la actual crisis económica.
Sin embargo, en un momento en que el mundo entra en una época marcada por el multipolarismo, es notable que los países iberoamericanos se agrupen en dos bloques, América Latina y la Unión Europea.
A medida que se fortalezca la independencia de los países latinoamericanos, agrupaciones regionales como el Mercado Común del Sur, la Alianza Pacífica y la Comunidad de Países Latinoamericanos y Caribeños muestran una mayor vitalidad.
Esta última, recién nacida hace menos de dos años, ha tenido un gran ímpetu de desarrollo. La cumbre bienal entre este bloque con la Unión Europea se ha convertido en una nueva plataforma para el diálogo directo entre América Latina y Europa.
Bajo esta circunstancia, la Cumbre Iberoamericana se vio obligada a hacer cambios: se ha decidido celebrar la cumbre cada dos años y no anualmente a partir de 2014, cediendo el paso para la cumbre con la Unión Europea.
Otras medidas de reformas aprobadas en la cumbre incluyen el aumento de los diálogos extraoficiales entre los líderes, reajustar el porcentaje de la aportación de fondos para la agrupación, aceptar nuevos miembros u observadores, así como incorporar los organismos de educación, cultura y ciencia dentro de la estructura de la Secretaría para elevar su eficiencia.
No obstante, algunos analistas opinan que no han sido suficientes estas reformas al sugerir que la Comunidad Iberoamericana de Estados debería convertirse al final en un mecanismo de intercambio cultural, con el objetivo de explorar el vínculo verdadero entre los países miembros y el ímpetu de la cooperación.
En la declaración de la cumbre se menciona el establecimiento de una plataforma de educación por Internet entre diversas universidades iberoamericanas y la construcción de un cable de fibra óptica submarina entre la Península Ibérica y América Latina para fortalecer la conexión informática, hecho para el que se aprovecha mejor el rico recurso común entre los miembros: el idioma y la cultura.
Promover la cooperación en otros campos, aprovechando el intercambio cultural, podría ser el verdadero futuro de la comunidad iberoamericana. Fin