"Creo que nuestros amigos ya no cuentan con nosotros, no
confían en nosotros, y nuestros adversarios ya no nos temen. Esa era la
clave y la base de nuestra capacidad de influencia", indicó Cheney en
una entrevista con la cadena ABC.
El exvicepresidente entre el 2001 y el 2009 durante el mandato del
republicano George W. Bush, lamentó especialmente la "menor implicación"
de la Administración estadounidense en Oriente Medio.
En este sentido, se mostró "escéptico" ante el renovado impulso diplomático para detener el programa nuclear iraní.
"No tengo mucha confianza en que la Administración sea capaz de
negociar un acuerdo. Creo que las sanciones contribuyeron a controlar a
los iraníes", agregó al referirse al reciente diálogo establecido entre
el presidente Barack Obama y el presidente iraní Hasan Rohani.
Por último, eludió comentar las recientes filtraciones de documentos
clasificados de la inteligencia estadounidense por parte del exanalista
de la CIA, Edward Snowden, que han provocado el enojo de los aliados
europeos por las supuestas revelaciones de espionaje masivo.
"Cuando estaba en la Casa Blanca utilizaba informaciones de
inteligencia de todo el mundo, y era importante que las recopilásemos,
porque eran importantes para llevar a cabo nuestra política exterior",
dijo.
"Lo más desafortunado es que Snowden, de hecho, ha divulgado un
montón de información que es dañina para EE.UU.", agregó el
exvicepresidente.