There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here. Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately.
domingo, 1 de septiembre de 2013
Mi religión y otras creencias
Leyendo un libro de un filósofo de la ciencia que explica y justifica el ateísmo. El autor es Alex Rosenberg. Lo acabo de bajar y comenzar a leer, pero ya tenido hormigueo en los dedos de ideas que me surgen.
El libro es para no creyentes, ateos convencidos. No es para hacer proselitismo, dice, sino para explicar dónde están las respuestas a las eternas preguntas existenciales para los que no creen. La respuestas están en la ciencia. ¿Qué es el mundo? El mundo es lo que dice la física que es.
Siempre he creído que debería haber un división en el científico entre sus creencias y su actividad. El científico, creía yo, no está para responder a esas preguntas, porque la ciencia no puede. Ya digo: eso creía yo. El científico debe descubrir como funciona la naturaleza, y de las preguntas existenciales deben ocuparse la gente que sienta inquietud.
La religión me ha producido atracción y repulsión en distintos momentos de la vida. De esa lucha interna en la que invertí mucho tiempo en lecturas, no llegué a ninguna parte fiable. Pero algunas respuestas prácticas si que obtuve; tanto a nivel individual como social.
1) la religión ha tenido un papel básico en la formación de las civilizaciones. Pero inmediatamente añado que no es la inmovilidad de las creencias, sino bien al contrario, su lento cambio en respuesta al cambio de la realidad, lo que ayuda a cimentar la sociedad. No es tal o cual verdad absoluta lo que ha definido a la civilización nacida de esa religión: son otras cosas menos importantes oficialmente. El lento desplazamiento de las creencias permite un ajuste mutuo de la religión social y la convivencia. En realidad, las religiones profesan unos dogmas de los que se va deslizando. No importa que sigan en vigor, lo importante es que sigan las creencias emocionales, no las racionales, en pie. Las creencias racionalizadas, los dogmas, son raíces resecas, pasto de teólogos que, como decía Unamuno, hay que prescindir de ellos.
2) No tengo claro que la religión sea la única fuente de moral. En esto estoy de acuerdo con Rosenberg (y con Adam Smith en "La teoría e los Sentimientos Morales") . Somos seres morales porque nos es grato, es una fuente de satisfacción íntima. Además de eso, nos gusta la aprobación de los demás. Es una fuerza muy viva la necesidad de justificarme en la conciencia y ante los semejantes. A veces este impulso es tan fuerte que hay quienes se arropan en la religión para hacer el mal y justificarse.
http://www.miguelnavascues.com/2013/09/mi-religion-y-otras-creencias.html