El discurso de CFK en el Congreso este 1 de marzo dejó bien claro cuál es la orientación del kirchnerismo para el tiempo que queda de su gobierno: deré… márch.
En una combinación patética de números económicos que apuntarían a que estamos camino al “primer mundo”(citando “índices” de Estados Unidos para comparar), Cristina dejó en claro con quiénes está (organismos imperialistas como el FMI, la ONU, Banco Mundial), y contra quiénes está (los trabajadores y la izquierda).
Veamos.
1
Dijo sobre la situación de los docentes:
No puede ser que cada año sea un parto el inicio de clases por la discusión salarial. (Aplausos.) ¡No puede ser que sea un parto!
[…] uno muchas veces tiene la sensación de sentirse rehén porque los chicos tienen que empezar las clases, porque a la familia se le complica toda la vida si los pibes no van a clases. La gente tiene que laburar, la gente tiene que hacer cosas […]
Junto a esto –el planteo de “ser rehén”, similar a lo que dice cualquier nota de La Nación o algún “correo de lectores” del mismo– apuró a los docentes porque… pedirían muchas “licencias”, tratando además de camuflar la perversidad del “presentismo” –instaurado bajo el menemismo, como recordó Nicolás del Caño–, ahora con mediante la novedosa nominación de “presencia pedagógica”…
2
Respecto a los petroleros de Las Heras, la izquierda y ante la jornada nacional de lucha por los petroleros, dijo:
El otro día, el corte… Y quiero decirlo porque me dolió en el corazón. Había salido yo de la casa de gobierno una tarde, cosa rara porque eran las ocho de la noche, y pude ver que había banderas rojas del PST [en realidad, del PTS]. ¿Por qué protestan?, les digo. No, me dicen, protestan por lo de Las Heras. ¿Lo de Las Heras?
Yo les voy a contar a los que no saben qué es lo de Las Heras. En 2006, en un conflicto, un policía que salió a defender su comisaría en la localidad de Pico Truncado, fue muerto a palazos en el piso.
[…]
Bueno, transcurrió desde aquel 2006 a la fecha y –fíjense, 2006 a la fecha– la Justicia finalmente llegó y los condenaron a los responsables de ese homicidio terrible, alevoso, porque fue sin defensa alguna.
Bueno, estaban protestando por la condena y cortaron la Panamericana, cuando los desalojó la Gendarmería, que la gente aplaudía, por la condena de la Justicia por un asesinato.
Para variar –en este “clásico” del kirchnerismo–, hay, una vez más, doble discurso: la justicia funcionaría “bien” cuando condena –con torturas y amenazas– a los testigos en el juicio fraguado en Las Heras; y “mal” cuando los gobernantes –sean FPV, PJ, UCR o Pro– piden órdenes de desalojo y los fiscales “duermen”…
Como ya plantearon los compañeros Christian Castillo y Nicolás del Caño –quien también respondió a esta ataque a la izquierda–, diputados del PTS y el FIT, la causa de los petroleros de Las Heras, injustamente condenados a cadena perpetua, concitó (por ello) un amplio apoyo –nacional e internacional– de personalidades y organismos de derechos humanos (como Osvaldo Bayer y Adolfo Pérez Esquivel), sindicales (CGT, CTA y decenas de dirigentes, delegados y comisiones internas), juveniles, artísticas y culturales, pronunciándose ante un caso similar al histórico de Sacco y Vanzetti.
3
CFK dijo:
[…] todo el mundo tiene el derecho a protestar, pero no cortando las calles
Y se gana los furiosos, exaltados aplausos de la bancada del Pro, en un discurso donde también hubo “tirón de orejas” para “la Justicia” (que los fiscales laburen, full time, las 24 horas del día, para que el “poder político” del Estado –el ejecutivo– pueda reprimir con todas las de la ley), en coincidencia lo que pretenden Macri y Berni. Ahí están los últimos hechos de Lugano, donde la Metropolitana del Pro reprimió tras esta “bendición” de la presidenta.
Como plantea Fernando Rosso en un post: justicia clasista y criminalización de la protesta es la política oficial kirchnerista.
4
Y como si faltara algo para señalar lo reaccionario del discurso cristinista, están los planteos sobre las FFAA y el“operativo reconciliación nacional” (del pueblo con sus verdugos):
[…] vamos a una Argentina mucho mejor que la que tuvimos en 2003; a una integración de nuestras Fuerzas Armadas a la sociedad, que se explicitó y desplegó, debo decirlo con mucha alegría y mucho orgullo, y se pudo visibilizar con mucha alegría y mucho orgullo.
Una vez más, a tono con el operativo Hebe-Milani, CFK reivindica estas (supuestas) “fuerzas armadas de la democracia”, hijas directas de las generaciones anteriores, incluyendo las que dieron el golpe en el ’76, por más “cursos de DDHH” que les den…
5
La bloguería K y P, como era obvio, alabó y se babeó con las retóricas y fuegos de artificio del discurso; nadie hizo foco en estos núcleos reaccionarios. (Sí por ejemplo Wainfeld en su columna de Página12 del domingo, aunque sin admitir el signo político de los dichos presidenciales. Y También Verbitsky, quien señaló –como un único “dardo crítico” – que Cristina avala las políticas derechosas de Berni sobre “ocupas” y “usurpadores”.)
El “realpolitiker” de Abel, además de admitir que la única oposición al kirchnerismo –y al peronismo– es el Frente de Izquierda (al que, igualmente, no le da mucho changüí), dice “dale que va”, y casi no se preocupa por el futuro de los K, existan o no como “expresión progre” dentro del peronismo (al parecer, le da lo mismo un Scioli que un Massa –si retorna al PJ–). Otros, plantean más discretamente que “queda bastante claro que no existe ya lugar para el relato de otra épica que no sea la de un “país normal””. E incluso hubo algún blog que dijo que la izquierda “miraba otro canal”mientras CFK discurseaba…
(Otro blog, uno crítico en este caso, señalaba “que el PRO la aplauda de pie, que la UIA la festeje, que el FMI la elogie, que el Banco Mundial le arregle los numeritos… no es nada raro. En los 90 sucedía lo mismo.”)
Así las cosas, los que parece que miran otro canal son los K y P: el “canal CFK”, que está, cada vez más, a la derecha de la grilla…