Un grupo de economistas de la Universidad de California (oeste de Estados Unidos), de Oxford (centro de Inglaterra) y de la Escuela de Economía de París (Francia) presentaron un estudio en el que demostraron que la desigualdad social en EE.UU. ha estado creciendo desde hace casi tres décadas.
Este crecimiento aumentó drásticamente el año pasado cuando los ingresos del uno por ciento más rico del país aumentó el 19,3 por ciento, la máxima desde 1928, mientras que el aumento de ganancias para el 99 por ciento de la población restante fue solo del uno por ciento.
El equipo de economistas aseguró que casi la mitad de todos los ingresos del país, (48,2 por ciento) fue acumulado por el 10 por ciento más abastecido de los estadounidenses. Se detalló que el 95 por ciento de todo el aumento de los ingresos de la nación estadounidense ha sido para los ricos.
Los estadounidenses más ricos fueron duramente golpeados por la crisis financiera. Sus ingresos cayeron considerablemente durante la Gran Recesión de 2007-2009 debido a que se desplomaron los precios de las acciones en Wall Street.
El fuerte crecimiento del precio de las acciones y el aumento de los beneficios de las corporaciones entre 2010 y 2012 ha permitido a los ricos mejorar esencialmente su posición y recuperarse de la recesión algo que no ha sucedido en su totalidad con el pueblo estadounidense.
El alcalde de Nueva York (noreste de EEUU), Michael Bloomberg dijo a inicios de agosto que esta ciudadpodría declararse en bancarrota, tal como lo hizo Detroit (noreste) en julio. Bloomberg, quien pronto dejará su cargo advirtió a su sucesor que Nueva York podría caer en quiebra si no logra controlar a corto plazo los gastos provisionales y sociales.
El alcalde resaltó que esa entidad “no es la única, muchas ciudades en todo Estados Unidos deben enfrentar la perspectiva de que las pensiones serán una porción cada vez más sustantiva de su presupuesto. Y Nueva York no es la excepción”.
Las autoridades de esta entidad confirmaron un déficit financiero de 369 millones de dólares en el presupuesto operacional para 2014 y se activó la alerta ante un posible escenario similar al de Detroit.
La ciudad de Detroit, localizada en el estado de Michigan, en el medio oeste de Estados Unidos ( EE.UU.),declaró la mayor bancarrota municipal vista en la historia del país del norte y solicitó amparo legal ante su incapacidad de mantener la creciente deuda que posee y a la población ante la fuerte crisis industrial que atraviesa.
El encargado de pedir protección al Estado ante la quiebra de la localidad fue Kevin Orr, quien es el gestor externo de la ciudad nombrado por la autoridades gubernamentales.
Por su parte, el diario Detroit News, reseñó que lo que sigue a continuación es que la Justicia determine aceptar o no la petición para suspender los pagos y reestructurar la deuda que se calcula en 18 mil 500 millones de dólares, no obstante, varias entidades financieras habían acordado con Orr una liberación de las deudas de hasta 75 por ciento.
Además de Nueva York y Detroit, Phoenix (Arizona, suroeste) y Jacksonville (Florida, sureste) también están en la mira de la quiebra, pues como las otras solo cuentan con cerca de 60 por ciento del capital necesario para saldar sus pagos a jubilados o trabajadores activos.
Pese a la crisis que afecta a las ciudades y sus ciudadanos, el diario político The Hill publicó la lista anual de los legisladores estadounidenses más ricos, encabezados por el legislador republicano por California Darrel Issa. De acuerdo con este periódico, Issa tiene una fortuna de unos 355 millones de dólares. El legislador supera a su colega de Texas Michael McCaul. Su fortuna está estimada en al menos 101 millones. Algo que contrasta con el devenir de los ciudadanos estadounidenses.