Por Redacción CaféFuerte
El poeta Rafael Alcides Pérez, una de las voces más prestigiosas de la intelectualidad cubana contemporánea, anunció públicamente su renuncia a la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) en desacuerdo con las prohibiciones gubernamentales a que está siendo sometido.
“En vista de que ya a mis libros no los dejan entrar en Cuba ni por la aduana ni por el correo, lo que es igual a prohibirme como autor, renuncio a la UNEAC”, escribió Rafael Alcides en una carta enviada al presidente de la institución, Miguel Barnet, diputado al Parlamento cubano y miembro del Comité Central del Partido Comunista.
El escritor, de 81 años, envió a Barnet la medalla conmemorativa por el 50 aniversario de la UNEAC, entregada en el 2011, y dijo que su decisión era “irrevocable”.
En los últimos años, el poeta había asumido una postura abiertamente crítica sobre la situación del país, distanciado del discurso oficial y con planteamientos comprometidos con la causa de los derechos humanos y las libertades cívicas. Ha colaborado con el proyecto Estado de Sats, que reúne a activistas opositores al gobierno.
Figura esencial
Figura prominente de la llamada Generación de los 50, Rafael Alcides es considerado uno de los poetas cubanos vivos de mayor reconocimiento y trascendencia en el panorama literario cubano e iberoamericano.
Es autor de una docena de títulos entre los que se destacan los poemarios Himnos de montaña (1961), Gitana (1962), La pata de palo (1967) y Agradecido como un perro (1983), un libro emblemático de la poesía conversacional que ganó el Premio de la Crítica de ese año.
Ha publicado también Nadie (1993), Noche en el recuerdo (1989) y Y se mueren, y vuelven, y se mueren (1989). Su obra aparece recogida en numerosos antologías poéticas en Cuba y Latinoamérica.
En 1965 obtuvo mención en el Concurso Casa de las Américas por su novela Contracastro.
Nacido en 1933 en el poblado de Barrancas, Bayamo, actual provincia de Granma, cursó el bachillerato en el Instituto de Segunda Enseñanza de Holguín y en las Escuelas Pías de La Habana (1946-1949). Realizó estudios de Química industrial en la Escuela de Artes y Oficios de La Habana (1950), y luego viajó por México y Estados Unidos.
En su lugar la poesía
Durante años fue un destacadísimo productor, director y escritor radial, y condujo el programa En su lugar la poesía, donde dio a conocer a las jóvenes creadores cubanos.
En el 2011 recibió el Premio Literario Bodegas Olarra-Café Bretón, en España. Su más reciente libro, Un cuento de hadas que termina mal (narrativa), se publicó este año en Logroño, España.
A continuación el texto íntegro de la carta de renuncia a la UNEAC:
La Habana, 30 de junio del año 2014.
Poeta Miguel Barnet.
Presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba.
Ciudad.
Amigo Miguel:
En vista de que ya a mis libros no los dejan entrar en Cuba ni por la aduana ni por el correo, lo que es igual a prohibirme como autor, renuncio a la UNEAC.
También hallarás en este sobre la Medalla Conmemorativa del 50 aniversario de la UNEAC que como fundador me pertenece. Lo demás de esa casona tan mía en otro tiempo, son mis recuerdos, y estos, por personales, se irán conmigo. Entre esos recuerdos, el de los buenos amigos hallados en la Unión de entonces, tesoros de mi juventud, lo que de aquel gran sueño fracasado me queda, figuras a las que quiero aunque no piensen como yo y que me quieren aunque no se atrevan a visitarme.
Eso es todo, Miguel. Previendo interpretaciones que omitieran el texto de esta renuncia irrevocable, me he adelantado a hacerla pública.
Rafael Alcides