Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

LA CUBA DEL GRAN PAPIYO
¡ Feliz Cumpleaños Scorpio58 !
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 Conociendo Cuba 
 CANCION L..A 
 FIDEL CASTRO.. 
 Fotos de FIDEL 
 Los participantes más activos 
 PROCLAMA AL PUEBLO DE CUBA 
 
 
  Herramientas
 
General: Georges Brassens por Carlos Tena. 33 Años sin Georges Brassens
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: Quico º  (Mensaje original) Enviado: 04/12/2014 21:10

33 Años sin Georges Brassens

brassens dias antes de morir de cancer de pulmon

“Mi naturaleza es reacia a todo tipo de exhibiciones; sufro de una modestia casi enfermiza. No puedo enseñar mis órganos procreadores a nadie, excepto a mis mujeres y mis doctores” (“Les Trompettes de la Renommée”)

Georges Brassens (1921-1981) es tan popular en Francia como los Beatles en Inglaterra. La gente va silbando o cantando sus canciones por la calle, temas que pasan de una a otra generación. Palabras agridulces que le valieron el Gran Premio de Poesía de la Academia francesa; versos irreverentes, originales, armoniosos, bellísimos, duros como la piedra, pero que llegaron a ser tan populares como las canciones infantiles; poemas a los que pondría música con el paso del tiempo.

Se le conocía familiarmente como el Buen Señor (Le Bon Maître) o Georges el Simplón (Tonton Georges). Jamás estuvo interesado por dar un concierto fuera de su país hasta que, en 1973, por invitación de su amigo, el británico Colin Evans, fue hasta el País de Gales para dar un único y memorable recital en el Teatro Sherman de Cardiff.

La BBC filmó el acto. TVE no hubiera hecho nada al respecto, de haber tenido la oportunidad, ni siquiera con ocasión de la muerte del genial autor, al que dificultosamente pude dedicar un programa en la 2ª Cadena, a los pocos meses de su desaparición. Y me llovieron las críticas por ello. ¿Quién era ese Brassens, para ocupar cincuenta minutos en la pequeña pantalla de la televisión pública?.

La Televisión Española y de las JONS siempre tuvo de pública lo que Rajoy de demócrata. Hoy, RTVE es ya un organismo engullido por empresarios de variado plumaje, mientras va desapareciendo cualquier vestigio de servicio al ciudadano, excepto si pensamos en las necesidades fisiológicas. Sin embargo, el poeta galo aún es un referente en la canción popular francesa de todos los tiempos.

Georges Brassens es el mejor de los poetas-intérpretes europeos, el más preclaro de los cantantes que han creado poemas propios para ser ofrecidos con una música idónea.

Un caso insólito, perteneciente a esa órbita en la que giraban Jacques Brel o Leo Ferré, Jean Ferrat y Charles Trenet, pero que, al contrario del primero de los nombrados, jamás fue promocionado en España, territorio comanche en el que todavía sigue vigente aquello que le preguntaba un sargento del ejército franquista al joven soldado y futuro escritor Juan Benet, cuando este hacía el servicio militar:

– Cuando ves a un francés ¿no te entra mucha rabia?… Pues eso es ser patriota – decía la mala bestia vestida de uniforme.

Es una verdadera pena el desafrancesamiento paulatino, pero constante, que la intelectualidad españolista fue sembrando desde que Felipe González (que venía de ser coronado como Secretario General del PSOE en una ciudad francesa, como es Suresnes) decidiera caminar por la senda de los Estados Unidos de Norteamérica, traicionando la hospitalidad y la cultura gala, porque así se lo aconsejaron ilustres demócratas como el criminal de guerra Javier Solana, experto en armas químicas, daños colaterales (o sea genocidios) y mentiras piramidales.

Las canciones de Brassens eran (son) verdaderos ejercicios poéticos de ingenio, ternura y dominio de la lengua vernácula, resultado de muchos años de trabajo arduo, al que había que añadir, ulteriormente, el problema de la música, la métrica y el ritmo.

Pero a Georges le protegía su inmensa cultura, su conocimiento adquirido en la lectura y disfrute de Villon, Valery, Rimbaud, Baudelaire o el ya citado Aragon. Todo ello y la utilización habitual de modismos y frases de extracción popular, que contrastaban con el academicismo de algunos textos, hicieron de él un verdadero creador, inimitable, independiente y siempre cáustico.

De Brassens emana una valiente integridad, tan extraña hoy a los intelectuales de pensamiento blando (Marías, Alba, Montero, Albiac, Bueno, Cebrián, Pradera) como el compromiso con la verdadera democracia.

De su obra brotan conceptos que se hacen casi tangibles, como el amor, la amistad, la vejez, la muerte, la traición, la esperanza, el honor, el valor, que se esparcen en medio de un paisaje donde florece el sentido del humor, el sarcasmo o la ironía vitriólica, sin un ápice de tolerancia para la sensiblería o la dramatización desmedida, que habitan en personajes de ficción, pero tan bien dibujados que parecen reales. Poesía verdadera. Poesía sin tacha.

Hace 33 años que murió, discreta y dolorosamente, el poeta cantor. Tenía sesenta. He lamentado que ese nuevo aniversario no pueda tener como escenario la mediterránea playa de Sête, donde se halla enterrado. Pero en mi casa suenan sus canciones,mientras recuerdo las palabras que le dedicara alguien imprescindible como Gabriel García Márquez:

– “Hace algunos años, en el transcurso de una discusión literaria, alguien me preguntó quien era, en mi opinión, el mejor poeta contemporáneo de Francia. Sin dudarlo un segundo, respondí: Georges Brassens.”

Me imagino a Gabo, cantando junto al autor de “Morir por las ideas…(pero de muerte lenta)”, mientras Georges disfruta de las obras del Nobel colombiano. Una bella escena

Carlos Tena



Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados