Al menos una persona murió y otras cinco resultaron heridas por los
bombardeos del ejército fascista ucraniano sobre la ciudad de Gorlovka,
en la República Popular de Donetsk, según informaron las autoridades.
Uno de los proyectiles cayó en una vivienda particular en esta ciudad
en el este del país y mató a un hombre no identificado e hirió a otros
dos, además de dos mujeres y dos menores de edad, reseñó la fuente
citada por la agencia de noticias rusa Tass.
El ataque se produce mientras el gobierno ruso y las milicias
populares antifascistas del este de Ucrania expresaron su confianza en
que esta semana se reanuden las consultas en Minsk con mediación de la
OSCE para la firma de una nueva tregua.
“Hemos confirmado nuestra disposición a celebrar la reunión del Grupo
de Contacto (Ucrania, milicias populares, Rusia y la OSCE) en los
próximos días. Estamos haciendo todo lo posible para que se celebre esta
semana”, dijo Yuri Ushakov, asesor del Kremlin, a medios locales
citados por la agencia de noticias EFE.
El negociador de Donetsk, Denís Pushilin, en tanto, agregó que las
negociaciones “tendrán lugar esta semana tan pronto como Kiev confirme
la agenda, que se está abordando en estos momentos”.
Pushilin explicó que los insurgentes quieren discutir en la capital
bielorrusa asuntos como una nueva tregua, el repliegue de la artillería y
las lanzaderas de misiles, o el canje de prisioneros de guerra por
listas consensuadas.
También insisten en tratar el gradual levantamiento del bloqueo
económico impuesto por Kiev a las zonas antifascistas y la entrada en
vigor de las leyes que conceden tres años de autonomía a las Repúblicas
populares y amnistía a los milicianos.
La pasada semana Ucrania y las milicias acordaron una nueva tregua a
partir del 9 de diciembre, aunque quedaron a expensas de plasmar el
acuerdo de manera documental.
Las fuerzas gubernamentales y las milicias acordaron a principios de
esta semana un alto el fuego en el aeropuerto de Donetsk, epicentro de
los más cruentos combates desde hace semanas, pero las fuerzas armadas
al servicio de Kiev violaron el acuerdo.
El mando militar ucraniano reconoció que más de 400 soldados
perdieron la vida en combates con las milicias antifascistas desde el
alto el fuego declarado el pasado 5 de septiembre en Minsk.
LibreRed/Telam