Los manifestantes, que protestan contra la brutalidad policial y el
racismo, se enfrentaron con la policía por segunda noche consecutiva en
el norte de California, después de que un jurado decidió la semana
pasada no procesar a un agente que estranguló hasta la muerte a un
hombre negro desarmado en Nueva York.
La policía de Berkeley, California, lanzó gases lacrimógenos y balas
de goma tras ser blanco de lo que llamó “elementos explosivos”. Luego de
que la fuerza despejara las calzadas, los manifestantes invadieron las
pasarelas de las autopistas en dos áreas de la ciudad, informó un
periodista de Reuters. La policía dijo en la mañana de este lunes que
hubo cinco detenidos entre los manifestantes.
Se han registrado manifestaciones en varias ciudades de Estados
Unidos desde que un gran jurado decidiera el miércoles no presentar
cargos penales contra un agente de policía blanco que estranguló hasta
la muerte a Eric Garner en julio pasado en Nueva York.
Los asesinatos de Garner y Michael Brown -un adolescente negro
desarmado que fue baleado por un oficial en Ferguson, Missouri- han
tensado las relaciones entre la policía y la comunidad negra, abriendo
nuevamente el debate racial en Estados Unidos.
Nueva York estuvo más tranquilo durante el fin de semana, pero las
ciudades de la costa oeste siguen en alerta tras los enfrentamientos en
Berkeley y Seattle registrados el fin de semana.
El domingo, la policía de Berkeley usó gases después de que algunos
manifestantes comenzaran a lanzar objetos contra los oficiales, dijo la
división de la Patrulla de Caminos de California.
Hubo varias detenciones pero el número exacto no estuvo disponible.
Algunos vehículos de la Patrulla de Caminos fueron objeto de agresiones,
dijo la división policial en Twitter, donde también mostró fotos de
algunas de las piedras que habrían sido lanzadas en su contra.
Además de las dos noches de disturbios en la costa oeste, se han realizado manifestaciones en otros puntos del país.
Investigación interna
El comisionado de la Policía de Nueva York, Bill Bratton, dijo el
domingo que la investigación interna que lleva a cabo el departamento
sobre la muerte de Garner podría tardar cuatro meses.
Bratton dijo que revisará los resultados para decidir si los agentes
implicados en el arresto de Garner habían violado las políticas
internas. El Departamento de Justicia, por su parte, está haciendo su
propia investigación.
En Chicago, manifestantes marcharon a través de la ciudad con
pancartas y entonando “No puedo respirar”, en alusión a las últimas
palabras pronunciadas por Garner, y “Manos arriba, no disparen”, según
imágenes de televisión.
En Miami, manifestantes bloquearon una parte de la carretera interestatal 195 la tarde del domingo, informó la cadena CBS.
La protesta por estas muertes con connotaciones raciales se extendió
también a los estadios de la liga de fútbol americano (NFL). Reggie
Bush, de los Detroit Lions, fue uno de los varios jugadores que usaron
una camiseta antes de un partido que decía “No puedo respirar”.
LibreRed/Reuters